Cr¨ªticas a los pr¨ªncipes de Noruega por llevar a sus hijos a colegios privados
Haakon y Mette Marit rompen con la tradici¨®n de la familia real y de la poblaci¨®n noruega de escoger centros p¨²blicos Pagar¨¢n 25.600 euros al a?o por la educaci¨®n de sus dos hijos
El pr¨®ximo 11 de agosto la princesa Ingrid Alexandra de Noruega cambiar¨¢ la ruta escolar que lleva recorriendo durante los ¨²ltimos cuatro a?os. En vez de dirigirse al colegio p¨²blico de Jansl?kka, en Asker, saldr¨¢ desde la residencia oficial de sus padres en B?rum, hacia el Colegio Internacional de Oslo, un centro privado a las afueras de la capital noruega en el que compartir¨¢ pupitre con ni?os de todas las nacionalidades (el 70% de los alumnos son extrajeros) y con los que jugar¨¢, hablar¨¢ y estudiar¨¢ en ingl¨¦s. ¡°Ha sido dif¨ªcil para nosotros tomar esta decisi¨®n, pero hemos llegado a la conclusi¨®n de que es lo mejor para nuestros hijos. Ellos van a necesitar pensar, hablar y escribir en ingl¨¦s en el futuro", asegura el pr¨ªncipe Haakon, heredero al trono noruego. Seg¨²n los c¨¢lculos hechos por el peri¨®dico Aftenposten, ¨¦l y su esposa, la princesa Mette Marit pagar¨¢n unos 25.636 euros (206.000 coronas noruegas) al a?o por la educaci¨®n de la princesa Ingrid Alexandra, de 10 a?os, y la del pr¨ªncipe Sverre Magnus, de 8, al que tambi¨¦n cambian de colegio para llevarlo la escuela concertada Montessori.
La decisi¨®n de los herederos al trono de Noruega de mandar a sus hijos a centros privados y concertados ha levantado la pol¨¦mica, el debate y las cr¨ªticas en el pa¨ªs esta semana. Primero, porque con esta decisi¨®n Haakon y Mette Marit rompen con la tradici¨®n. Ellos, sus padres, sus abuelos y todos los miembros y antepasados de la familia real noruega asistieron y defendieron siempre la escuela p¨²blica. Segundo, porque establecen un precedente. Seg¨²n el responsable de prensa de la Casa Real, Marianne Hagen, tambi¨¦n las tres ni?as de la princesa Marta Luisa y Ari Behn ir¨¢n a escuelas privadas cuando regresen a Noruega de su estancia en Londres. Y tercero, porque con esta decisi¨®n, se alejan de los usos y costumbres de sus conciudadanos. En Noruega hay muy poca tradici¨®n de escuelas o centros privados. De hecho entre el 96 y el 97% de los noruegos van a colegios p¨²blicos La princesa Ingrid Alexandra, en quinto curso, y su hermano el pr¨ªncipe Sverre Magnus, en segundo, pasan pues con la decisi¨®n de sus padres a incluirse en el selecto y reducido grupo de ni?os que asisten a centros privados aunque, seg¨²n el comunicado hecho p¨²blico por la Casa Real, ¡°seguir¨¢n manteniendo lazos cercanos con sus antiguos compa?eros a trav¨¦s de las actividades extraescolares y los tiempos de ocio que seguir¨¢n compartiendo con ellos.¡±
"Si la Casa Real no mantiene su car¨¢cter popular, lo que hace es dar el primer paso hacia la desmantelaci¨®n de la monarqu¨ªa", dice el l¨ªder del partido laborista
Estas explicaciones y justificaciones no han convencido, entre otros, a Anders Folkestad, l¨ªder de Unio, segundo sindicato m¨¢s importante del pa¨ªs. "Los pr¨ªncipes han mostrado siempre su compromiso con la sociedad, por eso tras esta decisi¨®n nos preguntamos si verdaderamente han pensado en la se?al que est¨¢n ofreciendo. Dan a entender que las escuelas privadas son mejores que las p¨²blicas. La justificaci¨®n de que una escuela internacional es mejor para prender ingl¨¦s lo que hace es arrojar piedras contra nuestro sistema educativo p¨²blico". En esa misma direcci¨®n habla Torgeir Knag Fylkesnes, diputado de Izquierda Socialista. Recuerda que en Noruega existe una larga tradici¨®n de acuerdo seg¨²n la cual la familia real siempre suele usar la educaci¨®n y la sanidad p¨²blicas.
El l¨ªder del partido laborista, en la oposici¨®n, va incluso m¨¢s lejos. Martin Kolberg asegura que ¡°si la Casa Real no mantiene su car¨¢cter popular, lo que est¨¢ haciendo es dar el primer paso hacia la desmantelaci¨®n de la monarqu¨ªa, de la propia instituci¨®n. En nuestro pa¨ªs, en Noruega no hay raz¨®n que justifique enviar a tus hijos a una escuela privada.¡±
¡°No es una cuesti¨®n de que los centros p¨²blicos o privados sean mejores o peores¡±, asegura Janecka Aaarn?s, directora de la Escuela Internacional de Oslo a la que asistir¨¢ la princesa Ingrid Alexandra. ¡°Los noruegos en general hablan bien ingl¨¦s pero no es lo mismo ir a la escuela en ingl¨¦s y hacerlo todo en esta lengua que tener el ingl¨¦s como una asignatura m¨¢s.¡± Un punto de vista que comparte Glenn Ole Hellekj?r, profesor asociado del departamento docente y de investigaci¨®n de la escuela en Noruega. ¡°Nuestros ni?os reciben una gran cantidad de contenidos en ingl¨¦s a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n. Tenemos un nivel similar al de Suecia o Finlandia pero a¨²n as¨ª, las estad¨ªsticas reflejan que el 30% de los estudiantes de secundaria tienen problemas de comprensi¨®n en ingl¨¦s. Est¨¢ claro que dos horas de ingl¨¦s a la semana no son suficientes¡±.
Thorbjorn R?e Isaksen, ministro de educaci¨®n y amigo personal del pr¨ªncipe Haakon, defiende la ense?anza del ingl¨¦s en las escuelas p¨²blicas noruegas. Dice que aunque son muchos los profesores de idioma que no tienen los cr¨¦ditos suficientes se est¨¢ trabajando en la buena direcci¨®n. La primera ministra, la conservadora Erna Solberg, as¨ª lo cree tambi¨¦n. La mandataria ha evitado criticar a los pr¨ªncipes y ha llevado el asunto a lo personal al rechazar plantearse hacer algo similar en su familia. ¡°Nunca he pensado en enviar a mis hijos a una escuela privada, pero respeto el derecho de todos a tomar sus propias decisiones acerca de los suyos¡±.
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