Una simbiosis que beneficia a todos

Ya lo hicieron los Rolling Stones en 1964 y los Beatles en 1963. La lista de celebridades que hoy prestan su imagen a ONG es interminable y el beneficio que las organizaciones obtienen por ello, descomunal. ¡°El viaje de Pau Gasol, en julio de 2013, a Dohuk [Kurdist¨¢n iraqu¨ª] cost¨® entre 5.000 y 6.000 euros. Y recaudamos en tan solo un mes unos 200.000¡±, afirma Raquel Fern¨¢ndez, de Unicef. Las organizaciones coinciden: ¡°Cuando ellos hablan [las celebridades], la gente les escucha¡±.

La fiebre de famosos por una buena causa empez¨® cuando la actriz Audrey Hepburn (Desayuno con diamantes) present¨® en 1988 el trabajo de Unicef ¡ªla agencia de la ONU para la infancia¡ª antes de un multitudinario concierto de la Orquesta Filarm¨®nica Mundial en Tokio. Es habitual desde entonces que muchas celebridades visiten campos de refugiados o zonas de cat¨¢strofe para dar visibilidad a las campa?as de las organizaciones, captar fondos... y de paso, proyectar su cara m¨¢s amable.

No me imagino sin poner mi voz y dedicaci¨®n al servicio de los ni?os que no son escuchados Pau Gasol

La desaparecida Lady Di, en Angola; Pau Gasol, en Irak o Jes¨²s V¨¢zquez, en Dadaab (Kenia), el mayor campo de refugiados del mundo con una poblaci¨®n que supera el medio mill¨®n. ?C¨®mo elegir la cara de una campa?a que dar¨¢ la vuelta al mundo? ?Qui¨¦n es id¨®neo ¡ªy qui¨¦n no¡ª para representar a toda una organizaci¨®n? Buena reputaci¨®n, credibilidad, solidez, disposici¨®n, simpat¨ªa. Estos son los ingredientes para poder llegar a ser imagen de una causa solidaria. ¡°Nosotros nos fijamos directamente en las encuestas¡±, afirma Raquel Fern¨¢ndez. Muchas organizaciones consultan los sondeos de Personality Media, una empresa espa?ola que una vez al a?o publica una estad¨ªstica sobre qui¨¦n es el famoso mejor valorado.

Pero hay veces que sucede lo contrario. ¡°Tambi¨¦n son los famosos quienes se acercan a la organizaci¨®n para tantear la posibilidad de prestar su colaboraci¨®n¡±, coinciden las ONG consultadas. ¡°Ha habido casos en que hemos rechazado a alg¨²n famoso¡±, admite ACNUR. Existen empresas en Estados Unidos que se dedican a aconsejar a las celebridades sobre a qu¨¦ ONG ser¨ªa bueno representar. Con ayuda de una cara conocida, las instituciones llegan a un p¨²blico que de otra forma ser¨ªa inalcanzable para la organizaci¨®n. El presentador Jes¨²s V¨¢zquez ¡ªembajador de ACNUR desde 2008¡ª explica emocionado c¨®mo durante su primer viaje a Dadaab se le ocurri¨® grabar un rap que los ni?os le cantaban a modo de bienvenida. Gracias a sus patrocinadores televisivos lo convirti¨® en melod¨ªa para el m¨®vil. ¡°Obtuvimos m¨¢s de 300.000 descargas¡±, explica. ¡°A un euro por politono... ?Imag¨ªnate!¡± exclama orgulloso.

No basta con la fama. Tambi¨¦n se valora el compromiso. Convertirse en embajador de una campa?a humanitaria ¡ªcomo tras el terremoto de Hait¨ª en enero de 2010 o el tif¨®n que arras¨® Filipinas en diciembre de 2013¡ª es casi un cargo institucional. ¡°Es como si fuera el representante de un pa¨ªs en el mundo. Es la voz de nuestra marca¡±, sostiene Unicef. ¡°Me siento orgulloso y responsable. Creo que poner dedicaci¨®n y mi voz al servicio de los ni?os que no son escuchados es una de las mejores cosas que puedo aportar, no me imagino a m¨ª mismo sin hacerlo¡±, afirma por correo electr¨®nico el jugador de la NBA Pau Gasol, uno de los 15 embajadores de buena voluntad de Unicef.

Las grandes organizaciones como Oxfam, ACNUR o Amnist¨ªa Internacional (esta ¨²ltima prefiri¨® no colaborar para el reportaje) disponen de un departamento que se dedica exclusivamente a gestionar la colaboraci¨®n con personajes conocidos. Oxfam, por ejemplo, cuenta con casi un centenar de famosos entre deportistas, actores y m¨²sicos. Incluso el arzobispo sudafricano Desmond Tutu, premio Nobel de la Paz en 1984, presta su imagen para captar socios.

ACNUR, m¨¢s exclusivo, cuenta tan solo con diez personalidades en sus filas. ¡°Se selecciona mucho. No todo el mundo puede entrar as¨ª que es un honor que quisieran que yo fuera uno de ellos¡±, sostiene Jes¨²s V¨¢zquez (La Voz, Mira qui¨¦n salta). ¡°Me ha cambiado la vida¡±, a?ade el presentador.

En EE UU hay empresas que asesoran a las celebridades sobre las causas que han de representar

Las ONG siguen, investigan, estudian a los famosos y, si sus intereses coinciden con los de la organizaci¨®n, les hacen una propuesta. Siempre es gratuita, seg¨²n todas las organizaciones consultadas. ¡°La cantante Annie Lennox siempre ha estado comprometida con la equidad de g¨¦nero y por eso la captamos¡±, explica Mia Farawell, responsable de administrar a las celebridades desde Oxford, sede de Oxfam.

Y tan importante es para la organizaci¨®n que el famoso conozca la desastrosa realidad de algunos lugares como que act¨²e en consecuencia. La actriz Scarlett Johansson ¡ªimagen de Oxfam Gran Breta?a¡ª desat¨® la pol¨¦mica el pasado febrero por promocionar una marca israel¨ª ¡ªSodaStream¡ª. Casualmente la compa?¨ªa tiene sus f¨¢bricas en Ma¡¯ale Adumim, uno de los asentamientos jud¨ªos en la Cisjordania ocupada. ¡°Aunque Oxfam respeta la independencia de nuestros embajadores, el papel de promoci¨®n de SodaStream de la se?orita Johansson es incompatible con su trabajo como embajadora global de Oxfam¡±. La actriz llevaba colaborando con la organizaci¨®n desde 2005. Finalmente, decidi¨® renunciar a la representaci¨®n de la ONG por ¡°diferencias fundamentales de opini¨®n¡±, seg¨²n argument¨® la actriz en un comunicado.

Adem¨¢s de ser una v¨ªa para atraer socios y donaciones, las organizaciones utilizan a sus embajadores ¡°para llegar a incidir en los que tienen el poder de decisi¨®n¡±, a?ade Unicef. La semana pasada, la actriz de Angelina Jolie ¡ªjunto al ministro de Exteriores brit¨¢nico, William Hague¡ª dio una enorme visibilidad a la cumbre mundial sobre la violencia sexual en conflictos. Casi 1.000 ONG, expertos y representantes de m¨¢s de 100 pa¨ªses se reunieron en un evento que dur¨® tres d¨ªas en Londres y que atrajo, entre otros, a Hillary Clinton y al secretario de Estado estadounidense, John Kerry. ¡°El mundo entero est¨¢ muy pendiente de lo que hacen las celebridades¡±, sentencia Farawell, de Oxfam.