11 fotosUn oficio contra los elementosPasamos una jornada con pescadores artesanales para conocer sus t¨¦cnicas de captura que las organizaciones ecologistas defienden como las m¨¢s sostenibles Corcubi¨®n - 31 jul 2014 - 20:16CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceA las cinco de la ma?ana II Toro sale con sus tres tripulantes a bordo. La noche es cerrada y durante el trayecto mar adentro, amanece. Por delante, una jornada de diez horas de trabajo f¨ªsico sin apenas ayuda mec¨¢nica.ALFREDO C?LIZTras m¨¢s de una hora de trayecto, el barco llega a la primera de las redes (mi?os) que lanzaron el d¨ªa anterior. Comienza una fren¨¦tica actividad para recogerla con los peces que hayan quedado atrapados.ALFREDO C?LIZLuis, el patr¨®n, desengancha uno de los pescados mientras Josu¨¦ estira la red que va recogiendo ordenadamente para volver a lanzarla en otro punto.ALFREDO C?LIZLa modalidad de pesca conocida como 'largar mi?os' (lanzar redes) es respetuosa con el ecosistema marino en tanto que permanece fija a la espera de que los peces, en su ir y venir, queden atrapados. Los descartes, pescado que se devuelve al mar por estas prohibida su captura o por su peque?o tama?o, son m¨ªnimos.ALFREDO C?LIZEn las embarcaciones que se dedican a la pesca artesanal, el armador (patr¨®n) tambi¨¦n es pescador y recoge las redes. Apenas tienen ayudas mec¨¢nicas.ALFREDO C?LIZPoco a poco, van llenando los cubos con pescado. A tenor de la poca cantidad que observa, Enrique vaticina que va a ser un mal d¨ªa.ALFREDO C?LIZLuis es el l¨ªder de la asociaci¨®n de peque?os armadores Asoar y defiende la pesca artesanal como la m¨¢s respetuosa con el medio marino. Josu¨¦ (a la izquierda) es peruano y ha trabajado en grandes barcos pequeros. Asegura que la artesanal es m¨¢s dura pero no cambiar¨ªa la vida tranquila en Galicia por volver a pasar meses en alta mar.ALFREDO C?LIZPara subir las redes, apenas cuentan con la ayuda de un peque?o motor. Cuando se engancha, tiran de ma?a con las manos para poder continuar la labor.ALFREDO C?LIZUna vez terminada la recogida, clasifican el g¨¦nero en cajas y lo limpian para dejarlo listo para la venta en la lonja.ALFREDO C?LIZEn la lonja comienza la subasta del pescado. Unos carteles de papel indican el precio por kilogramo al que finalmente se ha comprado.ALFREDO C?LIZUna vez vendido el pescado, Enrique cree que con lo poco que han capturado y los precios a los que les pagan, hoy no habr¨ªa merecido la pena salir diez horas al mar. "Pero hay que hacerlo", zanja.ALFREDO C?LIZ