El famoso mat¨® a la estrella de la cabina
Las discotecas persiguen el tir¨®n de la celebridad reconvertida en pinchadiscos
¡°Llego con mi ordenador, lo conecto y le voy dando a la tecla de intro. Todos hacemos lo mismo¡±. As¨ª resume sus sesiones Deadmau5 en un art¨ªculo publicado en su propia web y titulado Todos le damos al bot¨®n de play. El canadiense es uno de los grandes nombres de la electr¨®nica actual. Forbes calcula que este dj vale unos 15 millones de euros y esta temporada ha entrado en la alineaci¨®n de Hakkasan, el megaclub de Las Vegas, que le paga unos 300.000 euros por sesi¨®n. Cuando Paris Hilton hizo su debut tras los platos en 2012 en un evento en S?o Paulo, el resultado fue un esperpento. Se equivoc¨® de canci¨®n varias veces, se le descontrol¨® el volumen, parec¨ªa estar m¨¢s pendiente de buscar un espejo en el que comprobar lo bien que le sentaba su atuendo y cada vez que le echaba un vistazo a la mesa de mezclas parec¨ªa que hab¨ªa avistado un ovni. Entonces, Deadmau5 declar¨®: ¡°Seamos sinceros, los mayas vieron venir este apocalipsis¡±.
Paris Hilton puede atraer a gente m¨¢s diversa¡±, defiende su m¨¢nager
Este mes de agosto, Paris vuelve a Amnesia, en Ibiza, donde todos los mi¨¦rcoles pinchar¨¢ y ser¨¢ anfitriona de una fiesta llamada Foam & Diamonds. ¡°Paris no es una dj, es una celebridad¡±, aclara Harold Gallo, su m¨¢nager. ¡°Pero la fiesta el a?o pasado fue un ¨¦xito. Nadie cre¨ªa en nosotros y en la isla hubo muchas cr¨ªticas cuando se supo que ella iba a estar en Amnesia. Soy consciente de que mucha gente se acerc¨® para ver si se equivocaba. Pero aqu¨ª estamos otro a?o m¨¢s. Paris ya no es una turista en Ibiza, es parte activa de lo que pasa en la isla¡±.
Ha transcurrido m¨¢s de una d¨¦cada desde que los famosos empezaron a ponerse tras los platos en busca de diversi¨®n, atenci¨®n, reconocimiento, dinero, o lo que fuera. Con el tiempo, cada vez han sido m¨¢s los que han encontrado en el oficio de dj una salida tan vanidosa como lucrativa. Lo que ha sucedido durante este tiempo es que los dj¡¯s tambi¨¦n se han convertido en celebridades. Y como termina sucediendo en casi todo, el nivel se ha igualado por abajo. Es complicado hoy saber qui¨¦n le echa m¨¢s morro al asunto: el famoso convertido en dj o el dj que ya aparece con regularidad en la prensa del coraz¨®n. Por cada broma al respecto del hijo de Tom Cruise, Connor, pinchando en la inauguraci¨®n de una fiesta utilizando una lista en Spotify que contiene temas de Coldplay o Beyonc¨¦, existe un v¨ªdeo de David Guetta, el millonario dj y productor, haciendo de cheerleader tras la cabina, brazos en alto, mientras el esp¨ªritu santo dispara samplers y efectos. ¡°David se ha hecho en el mundo de la m¨²sica. En cambio, Paris viene de otro lugar y puede atraer a gente m¨¢s diversa. Son historias diferentes, pero no deber¨ªan ser excluyentes. En Ibiza creo que hay que dejar de lado la competici¨®n y centrarse en el buen rollo", justifica el m¨¢nager de Hilton.
Elijah Wood pincha bajo el nombre de DJ Wooden Wisdom, y aunque se le conceden ciertas credenciales en el underground ¡ªes propietario de Simian Records, un sello de m¨²sica indie¡ª, se le critica por poner caras de actor mientras mezcla canciones. Sasha Grey tiene una banda de rock g¨®tico (aTelecine) y tambi¨¦n es dj. Hizo porno y le gusta hablar de Godard en sus entrevistas. Ambos comparten reparto en la ¨²ltima de Nacho Vigalondo (Open windows), demostrando que hoy d¨ªa es casi imposible hacer una pel¨ªcula, una serie o un reality sin que alguno de tus protagonistas sea tambi¨¦n pinchadiscos.
El actor que interpreta a Hodor en Juego de tronos pincha. Snookie, de Jersey shore, pincha. La otra facci¨®n que cada d¨ªa pisa m¨¢s fuerte en el universo del dj celebridad es la de los hijos de o hermanos de quien sea. Solange Knowles, hermana de Beyonc¨¦ se reivindica utilizando vinilos. Asia Argento mantiene en vilo a todos los que la contratan, gracias a una bien cimentada reputaci¨®n de personaje imprevisible y elusivo. Alexandra Richards, hija de Keith Richards, ha hecho sus pinitos, triunfando m¨¢s en Instagram que en la pista. Daisy Lowe, modelo y descendiente del vocalista de Bush, la banda posgrunge, fue de las primeras en ser captadas por las marcas para poner discos en sus fiestas posdesfile. Ella juega tambi¨¦n en la liga de las it-girls convertidas en pincha, como Alexa Chung. El modelo Jes¨²s Luz aprovech¨® su periodo como pareja de Madonna para ponerse tras los platos. Pierre Sarkozy se ha hecho habitual de las cabinas de la noche madrile?a.
¡°Para m¨ª, es un divertimento. No tengo platos en casa, ni me lo tomo excesivamente en serio¡±, dice David Delf¨ªn. El dise?ador arranc¨® su carrera como dj en una fiesta en Barcelona organizada por la ilustradora y agitadora nocturna Silvia Prada. Pone discos junto a su amiga Bimba Bos¨¦ o con Mario Vaquerizo y Alaska. Mientras, prepara su pr¨®xima colecci¨®n. ¡°Yo ya casi no salgo, pero cuando me llaman para pinchar es una excusa para hacerlo. No poseo una t¨¦cnica depurada, pero estudi¨¦ piano y solfeo, por lo que o¨ªdo tengo. No me preparo las sesiones m¨¢s all¨¢ de la primera canci¨®n; luego, ya veremos. Con Bimba, cada uno pincha un tema, y eso es un reto divertido¡±.
Aparte de facturar un extra y hacerse presente, ejercer de dj, para alguien que viene de otro ¨¢mbito, realmente, ?es m¨¢s ¨²til que aparecer en, pongamos, S¨¢lvame? ¡°Mira, todo son procesos creativos¡±, recalca Delf¨ªn. ¡°Pinchar tambi¨¦n lo es. No te dir¨¦ que eso afecta a mis colecciones, pero hacerlo te mantiene vivo, alerta, despierto. No tengo ninguna intenci¨®n de hacerme profesional de esto, pero me divierte y cada vez lo hago mejor¡±. En 1998, el discurso de Delf¨ªn hubiera sonado a excusa o boutade. Hoy, tiene todo el sentido del mundo. Al final va a resultar que los turistas se lo toman mucho m¨¢s en serio que los profesionales. En este mundo y entre esta gente, solo se trata de darle al play. Macaulay Culkin lo tiene claro: por eso sus fiestas en Nueva York se llaman ¡®El iPod de Maculay¡®. Lo conecta. Y la gente baila. O le mira.
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