El Twitter de los sin techo

¡ªEn vacaciones el chef de la calle tampoco es muy bueno. ?Lo tuiteamos as¨ª? Podemos poner una carita feliz al final...

¡ª?Esa frase qui¨¦n la ha dicho? ?Jaume?

¡ªNo, mejor qu¨ªtalo. No pongas eso. Deja lo de que, cuando vives en la calle en verano, ves m¨¢s gente y eso te hace olvidar un poco tu situaci¨®n.

Tertulias como esta tienen lugar cada semana en Barcelona desde hace tres a?os y medio. Firman en Twitter con el nombre de Pl¨¢cido Moreno (@Placido_Mo) pero, en realidad, son seis personas las que est¨¢n detr¨¢s: Juan Carlos, Jaume, Mart¨ªn, Josep, Jes¨²s y Jos¨¦. Todos tienen algo en com¨²n: todos han vivido en la calle. Algunos durante apenas ocho meses y otros durante m¨¢s de 30 a?os. Ellos ya no est¨¢n en esa situaci¨®n, pero en Barcelona, donde residen, todav¨ªa hay cerca de 3.000 personas sin hogar. De ellas, m¨¢s de 900 duermen cada noche al raso, seg¨²n datos de la Red de Atenci¨®n a Personas sin Hogar de la capital catalana. Unas 595 ocupan infraviviendas y otras 1.500 utilizan los espacios gestionados por recursos p¨²blicos en los que permanecen de manera temporal porque solo hay 1.150 plazas. Catalu?a, adem¨¢s, es la comunidad aut¨®noma con mayor poblaci¨®n sin hogar: 21,3%, seg¨²n el ¨²ltimo informe del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), del a?o 2012.

Cada lunes por la tarde se re¨²nen en las instalaciones de la Fundaci¨® Arrels, organizaci¨®n que apoya al colectivo, para dar consejos de 140 caracteres a los sin techo: "En verano encuentras bocadillos en las papeleras cerca de la playa. En invierno, los encuentras enfrente de los colegios". "Si vives en la calle, en la playa tienes la oportunidad de refrescarte gratis y lavarte en las duchas. Cerca siempre encuentras jab¨®n". Pero la red social tambi¨¦n es una pizarra para confesiones algo m¨¢s crudas: "Si te acostumbras a estar en la calle, el tiempo te cura. Si no te acostumbras, te mata". Tambi¨¦n, para reivindicaciones: "En lugar de poner pinchos, pilones y m¨¢s barreras para que una persona no pueda dormir en la calle, que pongan m¨¢s albergues y recursos".

Los Pl¨¢cidos, como los llaman cari?osamente quienes trabajan con ellos, no han sido los mismos desde el inicio. Entre vasos de cristal con humeante y negro caf¨¦, hoy son cuatro los presentes, pero por esta interfaz tuitera han pasado otras caras diferentes desde su creaci¨®n. Y tienen la puerta abierta a quien se quiera unir.

El origen de la cuenta se lo deben al aut¨¦ntico Pl¨¢cido Moreno y la carta que escribi¨® a finales de 2010, poco antes de morir, agradeciendo a la Fundaci¨® Arrels su ayuda. Hab¨ªa pasado una d¨¦cada viviendo en la calle hasta que una enfermedad se lo llev¨® con 52 a?os. "Tanto yo como las dem¨¢s personas que solicitamos su ayuda aprendemos que, en realidad, ¨¦sta es desinteresada y se sienten felices y satisfechos cuando ven que, aunque sea pasito a pasito, pero firme, luchamos y nos esforzamos comprometi¨¦ndonos en recuperar valores que cre¨ªamos perdidos del todo", reza la misiva.

La Fundaci¨® se inspir¨® en sus l¨ªneas para lanzar la campa?a navide?a Todos merecemos una segunda oportunidad y buscar la forma de darle r¨¦plica en las redes sociales. La entidad ya ten¨ªa un perfil oficial, pero quer¨ªan ir m¨¢s all¨¢ y encontrar un nuevo enfoque que les permitiera llegar a un p¨²blico m¨¢s amplio. As¨ª, el 1 de diciembre de 2010, un nuevo usuario, el ya mencionado @Pl¨¢cidoMo, saludaba diciendo: "Abro este Twitter buscando una oportunidad. Necesito explicar c¨®mo me siento". Detr¨¢s se encontraban algunas de estas personas sin hogar que, acompa?ados por miembros de Arrels, tuiteaban cada semana qu¨¦ significaba para ellos haber vivido en la calle. Lo que cuentan no sucede en tiempo real, pero las experiencias que narran son aut¨¦nticas.

Hace poco superaron los 1.000 seguidores; gente de toda Espa?a que, a diferencia de la cuenta de Arrels, no est¨¢n necesariamente ligados con el trabajo social. Pero los Pl¨¢cidos echan en falta algo m¨¢s de interacci¨®n por parte de sus lectores. Cada lunes contestan a los mensajes que les hayan enviado durante la semana, normalmente de ¨¢nimo y apoyo; pocas preguntas, para su gusto. "Sigue habiendo mucho desconocimiento y mucha gente que culpa a la propia persona de estar en la calle, cuando lo importante aqu¨ª es que esa persona est¨¢ sufriendo y que es una injusticia. Por eso es importante la sensibilizaci¨®n", explica Ferran Busquets, director de Arrels.

Los datos de la Red de Atenci¨®n a Personas sin Hogar correspondientes a 2013 indican que el 43,1% de las personas que duermen en la calle en Barcelona son espa?olas, el 30% inmigrantes de la Uni¨®n Europea y el 26,9 %, extranjeros no comunitarios. Muchas no cuentan con una red social y familiar que les apoye, por lo que acaban encontrando en la calle la ¨²nica salida. Un 15% se encuentra en situaci¨®n irregular, lo que les imposibilita acceder a las ayudas p¨²blicas.

Desde Arrels aseguran que raras veces un solo motivo explica por qu¨¦ alguien acaba viviendo en la calle, e insisten en que cualquier intento de simplificaci¨®n es peligroso. En ocasiones, se debe a problemas familiares, de salud mental o de alcoholismo, pero tambi¨¦n a causas de car¨¢cter estructural como la falta de accesibilidad a una vivienda digna o la debilidad de ciertas pol¨ªticas sociales. Perder el trabajo y la pareja tambi¨¦n son factores importantes y, muchas veces, la suma de todos estos problemas y la incapacidad personal para gestionarlos acaba abocando a una persona a la indigencia.

Para las mujeres es, incluso, m¨¢s duro. Son una minor¨ªa en las calles ¡ªen Bercelona son unas 300, entre el 10 y 20%¡ª y las cifras que les dedica el INE son escalofriantes: el 40% de las sin hogar han sido agredidas, el 61% ha sufrido robos y el 24% ha sido v¨ªctima de violencia sexual. Por eso el informe La situaci¨®n de las personas sin hogar en Barcelona de la Red de Atenci¨®n a Personas Sin Hogar destaca que ellas tienen m¨¢s predisposici¨®n a ir en grupo y a evitar espacios como parques y jardines oscuros. Aunque en la ciudad existen centros mixtos para personas sin techo, tambi¨¦n los hay solo para hombres y, en menor n¨²mero, exclusivos para ellas, como el de Llar de Pau.

La dificultad de dejar la calle

El 11 de agosto fue el ¨²ltimo d¨ªa que Los Pl¨¢cidos tuitearon hasta su vuelta en septiembre. Por supuesto, el tema que trataron fueron las vacaciones. "Yo llevo 63 a?os de vacaciones. ?R¨¦cord Guiness!", apuntaba, ir¨®nico, Jaume. Este barcelon¨¦s s¨®lo pas¨® un mes durmiendo al raso antes de ser rescatado por el equipo de calle de Arrels. Pero ya ven¨ªa viviendo una situaci¨®n muy precaria desde hac¨ªa a?os. Los comedores sociales fueron su salvaci¨®n cuando las empresas en las que trabajaba como periodista y publicista empezaron a cerrar. Ahora colabora con la Fundaci¨® haciendo artesan¨ªa en el taller de intervenci¨®n social y dando charlas por los colegios.

"?Pero hablamos entonces de c¨®mo repercuten en la gente que est¨¢ en la calle?", trataba de matizar Jos¨¦. Nacido en Sevilla hace casi 61 a?os, que cumplir¨¢ en septiembre, se fue de casa voluntariamente cuando era joven y, tras pasar por varias empresas y oficios, acab¨® durmiendo durante una d¨¦cada en la calle. Ahora vive en uno de los pisos de la Fundaci¨® y colabora activamente con ellos en todo lo que puede: ayudando en el centro social, participando en los teatros, aportando su testimonio cada vez que es necesario... Es una forma de sentirse ¨²til ante la ausencia de mejores perspectivas laborales.

El tema que debaten esta vez es festivo y la iron¨ªa reina en la conversaci¨®n, pero tambi¨¦n hay lugar para los recuerdos. Jaume se acuerda de cuando veraneaba con su mujer y sus hijos en la Costa Brava y hac¨ªan escapadas a capitales europeas. Josep hace memoria de los a?os que pas¨® trabajando en un hotel, hasta que un d¨ªa no pudo seguir pagando su casa y acab¨® en la calle. Jes¨²s era de Madrid ¡ª"?de San Blas, como la Bel¨¦n Esteban!"¡ª y, tras varios tumbos por el mundo, acab¨® durmiendo en las calles de Barcelona.

Y as¨ª, entre an¨¦cdotas y reflexiones, van dando forma durante un par de horas a los mensajes que publicar¨¢n despu¨¦s.

Al terminar cada encuentro, Los Pl¨¢cidos dejan acordado cu¨¢l ser¨¢ el pr¨®ximo tema para poder pensar sobre ¨¦l durante los siguiente siete d¨ªas. Algunas veces repiten porque hay asuntos que nunca pierden vigencia, como la amistad en la calle. Otras tantas, el tema viene marcado por la estacionalidad, como el verano. "Las vacaciones significan relajarte y que nadie sepa d¨®nde est¨¢s. Que no te llamen al m¨®vil todo el rato", sentencia Jes¨²s. "Hombre ?ni que te estuvieran llamando a ti todo el d¨ªa! ?Eso son los ejecutivos!", le replica Jos¨¦.