Ellas fueron maltratadas por sus empleadores, pero han peleado para salir de la espiral de violencia. Ahora intentan rehacer su vida
Hong Kong -
Kamsiah recrea el momento en el que escap¨® de la casa en la que trabajaba y encontr¨® refugio en un McDonald's abierto 24 horas. Descalza, y sin dinero ni documentaci¨®n, tuvo que esperar a que una compatriota la llevase a un centro de acogida.Miguel CandelaKamsiah fue acusada de haber robado una cartera de quienes la empleaban con 730 euros dentro. Es una t¨¢ctica habitual para amedrentar a las mujeres inmigrantes y evitar pagarles as¨ª los salarios que se les deben.Miguel CandelaGrace es filipina y tiene 42 a?os. Firm¨® un contrato para trabajar en Hong Kong pero la familia la envi¨® a la ciudad china de Dalian, algo ilegal. Luego, sin pagarle el sueldo, la dejaron a su suerte con 20 euros para pagar el viaje de regreso a Hong Kong. Ahora ha puesto una denuncia contra la agencia que tramit¨® su contrato, pero no cree que pueda pagar la deuda de 40.000 pesos contra¨ªda en Filipinas. En la foto posa en Mong Kok, cerca de donde lleg¨® la primera vez al bajarse del autob¨²s.Miguel CandelaSring Atin lleg¨® en 2002 a Hong Kong para trabajar como sirvienta, y s¨®lo disfrutaba de un d¨ªa de asueto al mes. Despu¨¦s de haber aguantado como muchas otras mujeres indonesias, cambi¨® de familia y ahora es una de las activistas que m¨¢s en¨¦rgicamente luchan para que cambien las leyes de Hong Kong.Miguel CandelaEni Lestari es portavoz del Comit¨¦ Justicia para Erwiana, una joven indonesia que, como ella, lleg¨® a Hong Kong buscando un futuro mejor y encontr¨® la esclavitud. Quienes empleaban a Erwiana le golpearon en la cabeza hasta provocarle da?os cerebrales irreversibles, le arrancaron los dientes, y la enviaron a Indonesia llena de hematomas y con seis euros en el bolsillo. Ahora, inmigrantes como ella demandan justicia y c¨¢rcel para sus agresores.Miguel CandelaLos domingos son el d¨ªa de descanso para las emigrantes. Algunas de Indonesia, como las que aparecen en esta imagen, se prueban vestidos para hacerse fotos y enviar a la familia en su pa¨ªs de origen. Dar imagen de prosperidad es importante para ellas.Miguel CandelaPara disfrutar del poco tiempo libre y conocer a otras mujeres como ellas, un grupo de inmigrantes indonesias organiza un concurso de belleza en un c¨¦ntrico parque de Hong Kong.Miguel CandelaEn el parque Victoria Park de Wan Chai, mujeres de Indonesia aprenden y entrenan defensa personal en el club de lucha Persaudaraan setia hati Terate con el fin de aprender a defenderse de las palizas que les propinas algunos empleadores.Miguel CandelaLos domingos las calles y los parques de Hong Kong se llenan de mujeres emigrantes que aprovechan para hacer picnic. "Apenas tenemos dinero, as¨ª que necesitamos coger la comida de casa y sentarnos en alg¨²n lugar p¨²blico para disfrutar de una charla con nuestras amigas", asegura Kamsiah.Miguel CandelaDos j¨®venes emigrantes de Indonesia posan en domingo. Muchas son reclutadas en zonas pobres del archipi¨¦lago por mafias que luego les consiguen contratos y las explotan en Hong Kong.Miguel Candela
