Ellos se comprometen
Cada vez m¨¢s hombres se identifican con el movimiento feminista en la lucha por la igualdad. Estos son algunos de ellos.
En su primer discurso largo como secretario general del PSOE, Pedro S¨¢nchez (Madrid, 1972) se plante¨® como objetivo ¡°desterrar la violencia de g¨¦nero¡±. Sin embargo, opina que actualmente la principal barrera de las mujeres en Espa?a es el paro. Seg¨²n la ¨²ltima encuesta de poblaci¨®n activa, hay 13.900 mujeres empleadas menos que en el trimestre anterior. ¡°Adem¨¢s, muchas mujeres sufren pobreza laboral y el trabajo precario tiene rostro femenino. La ¨²ltima reforma laboral es claramente discriminatoria¡±. El pol¨ªtico subraya su apoyo a la actual ley del aborto ¨C¡°no veo argumentos para eliminar los supuestos que permiten abortar a una menor en situaci¨®n de desamparo sin permiso de los padres¡±¨C. Reitera la idea de considerar la violencia de g¨¦nero ¡°un asunto de Estado¡± y aboga por invertir m¨¢s fondos p¨²blicos en la prevenci¨®n.
¡°Eleg¨ª la cita de la pizarra porque mi madre siempre nos inculc¨® la importancia de los estudios a mi hermano y a m¨ª. Es un ejemplo de superaci¨®n y compromiso social. Nos tuvo muy joven y termin¨® sus estudios ya de mayor. Sacaba mejores notas que nosotros¡±. El l¨ªder socialista afirma que se reparte las tareas dom¨¦sticas a medias con su esposa. ¡°Hacer los deberes con mis hijas es de lo que m¨¢s me gusta. Gracias a ellas pienso en femenino¡±. Respecto a nuevas medidas, S¨¢nchez apoya crear una legislaci¨®n que regule la baja por paternidad obligatoria, pero evita comprometerse a aprobarla en caso de llegar a presidente del Gobierno.
Caterina Barjau
Trist¨¢n Ulloa (Orleans, 1970) ha colaborado en diversas campa?as por la igualdad, como la llamada Maltrato Cero de 2010. Junto con el escritor Fernando Mar¨ªas y el periodista Fernando Olmeda, impuls¨® a principios de este a?o la adhesi¨®n de cientos de hombres de la cultura al manifiesto de mujeres contra la reforma de la ley del aborto. ¡°De la desaparici¨®n de la ley Gallard¨®n podemos congratularnos todos, no solo las mujeres. Nos ata?e a todos. Yo no quiero que ninguna mujer en mi vida sea menos que yo. Vivo tranquilo con mi propia fragilidad y con mi lado femenino¡±.
¡°Subrayar el hecho de que una trabajadora es mujer es un arma de doble filo¡±, a?ade. ¡°Todo tendr¨ªa que ser m¨¢s natural¡±. Sostiene que su implicaci¨®n en la igualdad ¡°es una cosa de caj¨®n. Soy un ciudadano m¨¢s. No me puedo callar ante ciertas cosas, y creo que todos debemos hacer lo mismo, seamos pintores, fontaneros, bomberos o futbolistas¡±. Ulloa no se explica el aparente retroceso ideol¨®gico de la esfera p¨²blica. ¡°?Por qu¨¦ es una amenaza el matrimonio gay o la paridad?¡±. Elige como inspiraci¨®n a Edith Piaf. ¡°Lleg¨® a ser el icono de todo un pa¨ªs sin perder nunca ese rasgo arrabalero, sin renunciar a sus or¨ªgenes. A la salida de sus galas ante la burgues¨ªa se ofrec¨ªa a cantar para los mendigos de la calle. Entend¨ªa que la cultura es para todos¡±.
Caterina Barjau
V¨ªctor Lape?a (Zaragoza, 1975) fue entrenador asistente y t¨¦cnico principal del Perfumer¨ªas Avenida de Salamanca entre 2012 y 2014, temporadas durante las cuales el equipo consigui¨® la Liga, la Copa y la Supercopa. De ese conjunto han salido 8 jugadoras de las 12 que est¨¢n en la selecci¨®n espa?ola. Entrenador de la selecci¨®n sub-17, este a?o ha conseguido con su equipo la plata frente a EE?UU en el Mundial de la Rep¨²blica Checa. Un s¨ªmbolo del potencial que poseen las baloncestistas y su deporte, que finalmente queda truncado por el camino debido a la falta de medios.
¡°Muy pocas jugadoras profesionales obtienen un salario con sus equipos que les permita vivir¡±, explica Lape?a. Muchas tienen que buscarse la vida fuera de Espa?a. ¡°Los patrocinadores privados y la Administraci¨®n ofrecen muy poca financiaci¨®n a los clubes femeninos¡±. Aunque la Federaci¨®n de Baloncesto pone a disposici¨®n de la selecci¨®n femenina pr¨¢cticamente los mismos medios que a la masculina, no es suficiente si no existen recursos para mantener una Liga fuerte. Afirma: ¡°He aprendido de todas las deportistas que he tenido a mi lado. Especialmente de Amaya Valdemoro, Elisa Aguilar o Isa S¨¢nchez¡±. Y zanja: ¡°Todas las relaciones son al 50%. Los hombres tenemos que concienciarnos con la igualdad porque trabajar juntos nos enriquece¡±.
Caterina Barjau
Albert Rivera (Barcelona, 1979), portavoz de Ciutadans de Catalunya en el Parlamento catal¨¢n, se sinti¨® impactado hace a?os por la historia de Ayaan Hirsi Ali, diputada holandesa de origen somal¨ª y autora de la autobiograf¨ªa Mi vida, mi libertad (Galaxia Gutenberg): escap¨® a Holanda de joven, donde pidi¨® el asilo para huir del extremismo isl¨¢mico de su infancia; atraves¨® una crisis de fe, renunci¨® a su familia y entr¨® de lleno en pol¨ªtica. ¡°Est¨¢ amenazada de muerte por fundamentalistas. Es una feminista del siglo XXI, una persona que defiende la libertad de todas las mujeres, muy cr¨ªtica con las barbaridades que se cometen en nombre de los dioses. Su defensa de la dignidad humana es muy valiente¡±, opina Rivera.
El parlamentario sostiene que el reto principal al que se enfrenta la mujer espa?ola es la violencia, cuya ra¨ªz est¨¢ en la identificaci¨®n del amor con la posesi¨®n. ¡°Como hombre, me siento interpelado en el problema de la igualdad. Es una cuesti¨®n de comportamiento ¨¦tico, que debe implicar a toda la sociedad¡±. Aunque cree que otro obst¨¢culo al que se enfrentan las mujeres es la discriminaci¨®n en el trabajo, no apoya las cuotas para alcanzar la paridad. Arguye que para conseguir este objetivo hay que centrarse en ¡°la igualdad de oportunidades y de salario¡±. Cree que la ley Gallard¨®n est¨¢ ¡°bien desaparecida¡±. El a?o pasado pidi¨® una ¡°ley clara de plazos¡±, ya que la reforma del aborto propuesta por el PP hubiera sido ¡°un salto hacia atr¨¢s¡±.
Caterina Barjau
El Choj¨ªn (Torrej¨®n de Ardoz, Madrid, 1977) es un rapero consagrado de la escena espa?ola. En 2005 lanz¨® su conocida canci¨®n El final del cuento de hadas, una denuncia contra el maltrato. Desde hace nueve a?os realiza talleres para ni?os de prevenci¨®n sobre la violencia machista. ¡°Les explicamos la posibilidad que ofrece el rap para expresarse y realizamos juegos de rol sobre la diferenciaci¨®n de g¨¦nero. Prefiero concentrarme en lo que viene antes de la violencia. Cuando explicas que no hay que discriminar tienes la verdad de tu lado, y los chavales lo entienden perfectamente¡±.
Considera la igualdad una cuesti¨®n social, y por ello requiere la implicaci¨®n de todos. Uno de sus referentes ideol¨®gicos es Rosa Parks, la activista negra que en 1955 desafi¨® las leyes de segregaci¨®n de Alabama (EE?UU) al negarse a ceder su asiento a un blanco en un autob¨²s. Su gesto desencaden¨® el boicoteo de autobuses de Montgomery, que a su vez cristaliz¨® el movimiento por los derechos civiles en todo el pa¨ªs. ¡°Parks simboliza la lucha contra lo injusto¡±, sintetiza El Choj¨ªn. Incide en que el estereotipo del rapero machista existe debido a la industria mainstream. Es un sexismo que se da en todos los g¨¦neros comerciales y que no est¨¢ ligado a la esencia de denuncia que define al hip-hop. ¡°La lucha de los negros por los derechos civiles en EE?UU se termin¨® reciclando en hip-hop en los barrios marginales¡±, explica. ¡°En los a?os setenta, muchas de las activistas contra el racismo tambi¨¦n estaban implicadas en la lucha feminista¡±.
Caterina Barjau
Jos¨¦ ?ngel Lozoya (Valencia, 1951), educador sexual y agitador de toda la vida, se meti¨® de lleno en la lucha feminista de los setenta cuando comenz¨® a practicar interrupciones del embarazo en su casa de Valencia. Entonces ¡°te pod¨ªan caer seis a?os por cada aborto¡±. Fue uno de los fundadores en 1980 de la Cl¨ªnica Los Naranjos de Sevilla, la primera en realizar abortos en Andaluc¨ªa, cerrada a los 10 meses. Hoy Lozoya es uno de los principales miembros del Foro Hombres por la Igualdad. Siguen siendo muy pocos, aunque han ganado visibilidad en las ¨²ltimas d¨¦cadas. ¡°Mi madre, Marina G¨®mez, siempre trabaj¨® fuera de casa. En 1970 mi padre y ella sufrieron un atentado por su activismo, y se compr¨® una pistola. Nos ense?¨® que las tareas dom¨¦sticas eran responsabilidad de todos. Y siendo cat¨®lica practicante, firm¨® a favor del aborto y me apoy¨® cuando supo que yo los hac¨ªa¡±.
Lo mejor que pueden hacer los hombres es ¡°ser consecuentes: ponerse el delantal, cuidar de los dependientes y los mayores, y adem¨¢s reivindicarlo. El neomachismo ha calado por olvidarnos de concienciar a los hombres. Muchos de ellos no se identifican como feministas porque les cuesta renunciar a sus privilegios. Hay que instaurar la baja por paternidad obligatoria¡±. Cuando habla de coherencia, se refiere a todos los aspectos: ¡°?C¨®mo es un hombre en la cama? Pues igual que fuera de ella¡±, ilustra sonriente. Lozoya cuenta la lucha de las espa?olas de la Transici¨®n y la suya propia en su nuevo libro El aborto: historias de combate y resistencia (Fundaci¨®n Iniciativa Social).
Caterina Barjau