La se?ora Manuela y los ¡®okupas¡¯

Es la mujer m¨¢s altruista que conozco. El otro d¨ªa la vi saliendo de una de las sesiones de quimioterapia que la mantienen con vida. Y as¨ª, flojita como estaba, me pregunt¨® cuando me acerque a besarla: ¡°?C¨®mo est¨¢n tus hijos?¡± Yo le dije: ¡°Mi hijo se ha hecho okupacomo su nieto¡±. La se?ora Manuela, que ya no tiene, o no ha tenido nunca, prejuicios ni miedos absurdos, me espet¨®: ¡°Y ?qu¨¦?, no creo que haya muchos chicos que cuiden de sus abuelos como lo hace mi nieto¡±. Puso en palabras lo que yo pienso desde que veo a mi hijo haciendo cambios en su vida: ecologista, vegetariano, feminista.

Los acusan de antisistema, y s¨ª, lo intentan. Y nosotros con ellos. ?Acaso funciona este sistema? ?No tendr¨ªamos que buscar otro m¨¢s humano? No digo el modelo consumista de antes de la crisis, digo un modelo social m¨¢s respetuoso con la vida, con todas las vidas. Los acusan de terroristas, y, por lo que conozco y s¨¦, esa acusaci¨®n es injusta y falta a la verdad. ?Por qu¨¦ los persiguen? Ellos no han dejado en la calle o sin medicamentos a nadie, m¨¢s bien ayudan al vecino, dan cobijo al sin techo¡­ ?Qu¨¦ les incomoda?

Ellos son los profetas de nuestro tiempo, todos los profetas fueron perseguidos. Viven como viv¨ªan las primeras ¨®rdenes de franciscanos que renovaron la Iglesia. No, no son santos, ni son ¨¢ngeles, son s¨®lo esp¨ªritus libres y, ante todo, humanos. Han ido a por ellos, pero luego pueden venir a por m¨ª, pienso como ellos y si no vivo igual que ellos es porque pasan mucho fr¨ªo.¡ª M.? ?ngeles Garc¨ªa-Carpintero.