Alrededor de 1.000 Urak Lawoi malviven en su peque?o poblado de Koh Lipe a pesar de que Tailandia les concedi¨® las islas del archipi¨¦lago en 1909, cuando se establecieron las fronteras nacionales.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraConocidos como Chao Lays en tailand¨¦s, estos n¨®madas del mar han surcado las costas de Malasia, Tailandia y Myanmar de desde hace 500 a?os viviendo de lo que la naturaleza les ofrec¨ªa.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraLa creaci¨®n del Parque Nacional de Tarutao en 1974 con el objetivo de proteger las especies end¨¦micas del archipi¨¦lago oblig¨® a los Urak Lawoi a prescindir de su nomadismo y asentarse en Koh Lipe.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraTras el intento de regularizaci¨®n del suelo en el archipi¨¦lago hombres de negocios se interesaron por los terrenos en Koh Lipe. Seg¨²n un estudio de la Unesco, los resorts crecieron de 5 e 1997 a 23 en 2005, y los bungal¨®s de 153 a 496.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraSena Kohsire es una de las Urak Lawoi m¨¢s ancianas, lleg¨® a la isla durante la segunda guerra mundial. Se queja de que las mafias est¨¢n arrebat¨¢ndole su tierra y contaminado los recursos naturales.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraSalvai Hantale es trabaja como limpiadora en uno de los resorts de Koh Lipe pese a que considera que el turismo y los hombres de negocios est¨¢n acabando con su pueblo. Posa en la casa de su madre, cantante tradicional de rong ngeng (celebraci¨®n local), uno de los denominadores culturales de su pueblo.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraLos profesores organizan representaciones culturales con los ni?os Urak Lawoi para que no se pierdan las tradiciones. En la foto, un grupo canta y toca rammana, celebraci¨®n ancestral que serv¨ªa como plegaria a los esp¨ªritus.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraUn hombre contempla el barco cargando toneladas de desechos. La recogida de basuras ahora se realiza frente al poblado Urak Lawoi y a la escuela, ya que un resort se quej¨® de que la recogida se realizara frente a su establecimiento.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraAlrededor de cuatro ferris y barcos llegan a la isla de Koh Lipe cada d¨ªa. Ya en 2007, un documento de la Unesco advert¨ªa de que las visitas hab¨ªan pasado de unas 2.000 anuales a 1.000 diarias.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraEl turismo est¨¢ acabando con los recursos mar¨ªtimos aunque la ley del Parque Nacional proh¨ªbe su explotaci¨®n. Su Oi Susai, de 55 a?os, cuenta que antes se pod¨ªa llenar una barca entera y nunca escaseaba la comida, pero ahora llenar dos sacos puede llevar un mes.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraLa ¨²nica pesca tradicional que los Urak Lawoi contin¨²an haciendo se basa en el bubu (nombre local para trampas o celdas), hecho de bamb¨² y usado para atrapar todo tipo de animales del fondo marino.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraLos n¨®madas del mar se adaptan como pueden a la invasi¨®n tur¨ªstica y ahora se dedican a traer y llevar visitantes en los long-tails (barcas tradicionales) para ganar un poco de dinero.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraLas mujeres Urak Lawoi ha optado por trabajar en el sector de la hosteler¨ªa de Koh Lipe bien de camareras o como limpiadoras.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraNiwat Leekand, m¨¢s conocido como 'Mr. Chang' entre los turistas, construy¨® su propio resort en Koh Lipe hace siete a?os. Pero cree que la situaci¨®n en la isla es insostenible y cree que la ¨²nica soluci¨®n es acabar con el turismo.?ngel L. Mart¨ªnez CanteraNi?os Urak Lawoi juegan en la orilla de la playa. Los adultos consideran que la irrupci¨®n del turismo descontrolado pone en peligro su cultura y que nunca ser¨¢ lo mismo para las futuras generaciones.?ngel L. Mart¨ªnez Cantera