La PAH denuncia que el fondo buitre que compr¨® su casa al Ayuntamiento les ha triplicado el alquiler
Wilson y su familia viv¨ªan en un piso de la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo en r¨¦gimen de alquiler social, que fue vendido en 2013 a un fondo de inversi¨®n. Por falta de recursos no pudieron hacer frente al pago del alquiler, que la empresa compradora les triplic¨®. En la imagen, Wilson Ruilova (de espaldas) y miembros de la Plataforma de Afectados colocan los pocos muebles que les quedan a modo de barricada en la puerta de la vivienda.Andres Kudacki (AP)Wilson Ruilova y Cecilia Paredes se preparan para dejar su casa. Seg¨²n los activistas antidesahucios, su deuda es de 3.000 euros. Ambos en paro, no se negaban a pagar, pero s¨ª ped¨ªan un alquiler social acorde con sus ingresos, de menos de 400 euros al mes.Andr¨¦s Kudacki (Ap)Feli Vel¨¢zquez, activista antidesahucios, se enfrenta a los agentes con el beb¨¦ en los brazos. Seg¨²n el Ayuntamiento de Madrid, que recuerda que la vivienda ya no es de su propiedad, se ha ofrecido ayuda a la familia, que ha declinado porque se va a mudar a Parla. Sin embargo, la PAH niega este extremo.ANDREA COMAS (REUTERS)Wilson Ruilova y Cecilia Paredes, con el beb¨¦ a su izquierda, en la furgoneta del Samur Social que les ha trasladado a un hotel, donde pasar¨¢n unos d¨ªas. ?l trabajaba en la construcci¨®n como electricista y ella en trabajos ocasionales.Andres Kudacki (AP)A las puertas de la vivienda, un bloque de 18 pisos en el PAU de Vallecas, se han concentrado un centenar de activistas y vecinos en defensa de esta familia de ecuatorianos. Para llevar a cabo el desahucio, la comisi¨®n judicial ha acudido con siete furgonetas de la polic¨ªa y unos 50 agentes antidisturbios. No se han registrado incidentes.ANDREA COMAS (REUTERS)Varios j¨®venes sacan los ¨²ltimos enseres de la familia de la que ha sido su casa los ¨²ltimos tres a?os. Este caso ha conmovido en Twitter, donde la etiqueta #WilsonSeQueda ha sido lo m¨¢s comentado durante toda la ma?ana.ANDREA COMAS (REUTERS)Varios activistas gritan proclamas contra los desahucios ante el n¨²mero 68 de la avenida de Las Suertes. En apenas media hora, la familia de Wilson estaba en la calle. "No hemos podido hacer nada, iban equipados hasta las orejas y han llegado como si fueran a detener a unos terroristas", denuncian los activistas.ANDREA COMAS (REUTERS)