Desterradas hijas de Eva , del colectivo Generando Arte, reflexiona sobre los preventorios franquistas y los ni?os robados
La muestra surge de un encuentro entre Concha y Consuelo Garc¨ªa del Cid, que en 2012 public¨® el libro ¡®Las desterradas hijas de Eva¡¯, en el que sacaba a la luz uno de los agujeros m¨¢s negros de la historia de Espa?a: la reclusi¨®n de cientos de ni?as en preventorios, reformatorios como ese de San Fernando, donde Inmaculada Valderrama se suicid¨®. Ten¨ªa 15 a?os, y su suicidio se justific¨® como un intento de fuga. "Nadie hablar¨¢ de nosotras cuando hayamos muerto, por eso yo quiero hablar de Inmaculada. Cada una de las obras aqu¨ª expuestas, refleja el dolor causado, nuestro encierro involuntario y la fuerza interior, ahora externa, en manos de todas las artistas que han colaborado", cont¨® Consuelo Garc¨ªa del Cid en el texto que ley¨® el d¨ªa de la inauguraci¨®n.Susana Garc¨ªa¡°?Que por qu¨¦ creamos un colectivo as¨ª?¡±, se pregunta Concha. ¡°Sinceramente, porque no conoc¨ªamos algo con estas caracter¨ªsticas, un colectivo de mujeres artistas que se dedicaran exclusivamente a la tem¨¢tica de g¨¦nero. Es una reivindicaci¨®n, tambi¨¦n, del poco papel que las mujeres tienen en el arte. El a?o pasado, en Arco, solo el 4% de los artistas eran mujeres¡±. El colectivo, que actualmente aglutina a unas 50 artistas de Europa y Am¨¦rica latina, se cre¨® a principios de 2014, pero en su corto a?o de vida ya ha realizado 7 actos. ¡°Hay que dar visibilidad a este tipo de historias, que son en realidad reivindicaciones¡±, confiesa, se?alando su propia obra, la de la imagen. ¡°A veces¡±, cuenta, al borde de la emoci¨®n. ¡°A veces, cuando a una mujer a la que le robaban a su hijo reci¨¦n nacido y le dec¨ªan que hab¨ªa muerto, ella exig¨ªa verlo. Era entonces cuando sacaban al feto muerto de la nevera, cosificado en una mera excusa, para que ella se lo creyera. Ese es el germen de mi obra¡±.Concha MayordomoLa obra de la imagen, de Luz Velasco, surge de un sue?o recurrente de su infancia, una figura negra, envuelta en una capa, que devoraba ni?os. "En su origen era un sue?o, un monstruo informe y an¨®nimo", explica Concha mayordomo. "Pero ahora, tras todos los esc¨¢ndalos que se han ido conociendo, como el de Sor Mar¨ªa, con toda la informaci¨®n que ha ido saliendo sobre este oscuro tema, podemos ponerle nombres a esta sombra".Luz Velasco"De todos los preventorios, el de San Fernando era el m¨¢s cruel", cuenta Natacha Mazzitelli, otra de las artistas de la exposici¨®n y, tambi¨¦n, la comisaria de la misma junto con Concha Mayordomo. Ahora, en esta capilla, 30 obras de diverso formato (Video, fotograf¨ªa, escultura, pintura), de otras 30 artistas, dialogan y se contestan unas a otras, reflexionando sobre un tema tan oscuro. Su obra, en la imagen, muestra la mutilaci¨®n de la mujer y su hijo, cosificado, robado.Natacha MazzitelliEn la imagen, las artistas reunidas el d¨ªa de la inauguraci¨®n. Hasta el 15 de marzo podr¨¢n contemplarse en la sala de exposiciones Juan Carlos I de San Fernando de Henares estos 30, como dicen ellas, gritos contra la impunidad. Estos 30 llantos de beb¨¦s arrancados de sus madres, estas 30 visiones, en suma, para contar la p¨¦rdida, el dolor y el miedo a las que muchas mujeres fueron sometidas. Porque los lugares tienen memoria, y hay cosas que no conviene que se ahoguen en el olvido.Pepa Santamar¨ªa
