El poder real de Estados Unidos
La ¡®era americana¡¯ no ha concluido, pero va a experimentar cambios importantes
En la historia moderna ning¨²n pa¨ªs ha tenido tanto poder militar mundial como los Estados Unidos y, sin embargo, ahora algunos analistas sostienen que este pa¨ªs est¨¢ siguiendo los pasos de Reino Unido, el ¨²ltimo pa¨ªs hegem¨®nico en el mundo que termin¨® decayendo. Esa analog¨ªa hist¨®rica, aunque resulta cada vez m¨¢s popular, es enga?osa.
Otros art¨ªculos del autor
Gran Breta?a nunca fue tan predominante como los EE UU en la actualidad. Desde luego, mantuvo una armada cuyo tama?o equival¨ªa a las dos flotas siguientes combinadas y su imperio, en el que nunca se pon¨ªa el sol, gobern¨® a una cuarta parte de la humanidad, pero hab¨ªa muchas diferencias entre los recursos de poder relativos de la Gran Breta?a imperial y los de los Estados Unidos contempor¨¢neos. Al estallar la Primera Guerra Mundial, Gran Breta?a ocupaba s¨®lo el cuarto puesto entre las grandes potencias en cuanto a personal militar, el cuarto en PIB y el tercero en gasto militar.
El Gobierno del imperio brit¨¢nico depend¨ªa en gran parte de tropas locales. De los 8,6 millones de soldados brit¨¢nicos en la Primera Guerra Mundial, casi una tercera parte proced¨ªa del imperio de ultramar, por lo que, cuando empezaron a intensificarse los sentimientos nacionalistas, al Gobierno de Londres le result¨® cada vez m¨¢s dif¨ªcil declarar la guerra en nombre de un imperio.
Cuando se produjo la Segunda Guerra Mundial, la protecci¨®n del imperio se hab¨ªa vuelto m¨¢s una carga que un activo. El hecho de que Reino Unido estuviera situado tan cerca de potencias como Alemania y Rusia le result¨® a¨²n m¨¢s grave.
Pese a lo mucho ¡ªy poco rigurosamente¡ª que se habla de un ¡°imperio americano¡±, la realidad es que Estados Unidos no tienen colonias que deban administrar y, por tanto, dispone de una mayor libertad de maniobra que Reino Unido de entonces y, como est¨¢ rodeado de dos oc¨¦anos y no tiene vecinos amenazadores, le resulta mucho m¨¢s f¨¢cil protegerse.
El Gobierno del imperio brit¨¢nico depend¨ªa en gran parte de
tropas locales
Esto ¨²ltimo tiene relaci¨®n con otro problema que plantea la analog¨ªa con un pa¨ªs hegem¨®nico mundial: la confusi¨®n sobre lo que de verdad significa el t¨¦rmino ¡°hegemon¨ªa¡±. Algunos observadores equiparan ese concepto con el de imperialismo, pero EE UU es una prueba clara de que un pa¨ªs hegem¨®nico no ha de tener necesariamente un imperio propiamente dicho. Otros definen la hegemon¨ªa como la capacidad para establecer las normas del sistema internacional, pero sigue sin estar claro cu¨¢nta influencia en ese proceso debe ejercer el pa¨ªs hegem¨®nico respecto de otras potencias.
Otros m¨¢s consideran que ¡°hegemon¨ªa¡± es sin¨®nimo de control del mayor n¨²mero de recursos de poder, pero, conforme a esa definici¨®n, no se pod¨ªa considerar hegem¨®nica a la Gran Breta?a del siglo XIX, que en el apogeo de su poder en 1870 ocupaba el tercer puesto por su PIB (detr¨¢s de Estados Unidos y Rusia) y el tercero en gasto militar (detr¨¢s de Rusia y Francia), pese a su predominio naval.
De forma similar, quienes hablan de la hegemon¨ªa americana a partir de 1945 no tienen en cuenta que la Uni¨®n Sovi¨¦tica tuvo un poder militar equiparable al de los EE UU durante m¨¢s de cuatro decenios. Aunque este ¨²ltimo pa¨ªs ten¨ªa un poder econ¨®mico desproporcionado, su margen de maniobra pol¨ªtico y militar estaba limitado por el poder sovi¨¦tico.
Algunos analistas califican el per¨ªodo posterior a 1945 de orden jer¨¢rquico encabezado por Estados Unidos con caracter¨ªsticas liberales, en el que los EE UU brindaban bienes p¨²blicos dentro de un sistema poco r¨ªgido de normas e instituciones multilaterales que dejaba voz y voto a otros Estados m¨¢s d¨¦biles. Se?alan que para muchos pa¨ªses puede ser racional preservar el marco institucional, aun cuando los recursos de poder de los Estados Unidos decaigan. En ese sentido, el orden internacional encabezado por Estados Unidos podr¨ªa sobrevivir a la primac¨ªa americana en materia de recursos de poder, aunque muchos otros sostienen que el surgimiento de nuevas potencias augura el fin de dicho orden.
Pero, por lo que se refiere a la era de una supuesta hegemon¨ªa de los EE UU, siempre ha habido mucha ficci¨®n mezclada con la realidad. M¨¢s que un orden mundial, fue un grupo de pa¨ªses con una mentalidad similar, la mayor¨ªa de ellos situados en el continente americano y en la Europa occidental, que comprend¨ªa menos de la mitad del mundo y sus efectos para con los que no eran miembros de ¨¦l ¡ªincluidas potencias importantes como China, India, Indonesia y el bloque sovi¨¦tico¡ª no siempre fueron benignos. En vista de ello, ser¨ªa m¨¢s preciso llamar ¡°semihegemon¨ªa¡± la posici¨®n de Estados Unidos en el mundo.
Est¨¢ por ver que los cambios aumenten o no la seguridad y la riqueza globales
Naturalmente, este pa¨ªs mantuvo sin duda el predominio econ¨®mico a partir de 1945: con la devastaci¨®n de la Segunda Guerra Mundial en muchos pa¨ªses, EE UU produc¨ªa la mitad del PIB mundial. Esa situaci¨®n dur¨® hasta 1970, cuando su participaci¨®n en el PIB mundial baj¨® hasta el nivel anterior a la guerra, es decir, la cuarta parte, pero, desde un punto de vista pol¨ªtico o militar, el mundo era bipolar, pues el poder de la Uni¨®n Sovi¨¦tica era equiparable al de Estados Unidos. De hecho, durante ese per¨ªodo hubo ocasiones en las que este ¨²ltimo pa¨ªs no pudo defender sus intereses: la Uni¨®n Sovi¨¦tica consigui¨® armas nucleares, los comunistas conquistaron el poder en China, Cuba y la mitad del Vietnam, la guerra de Corea acab¨® en punto muerto y las rebeliones de Hungr¨ªa y Checoslovaquia fueron sofocadas.
Sobre ese tel¨®n de fondo, la de primac¨ªa parece una descripci¨®n m¨¢s precisa de la desproporcionada (y mensurable) parte de poder correspondiente a un pa¨ªs en las tres clases de recursos: el militar, el econ¨®mico y el blando. Ahora la cuesti¨®n es la de si la era de la supremac¨ªa de Estados Unidos est¨¢ tocando a su fin.
Dada la imprevisibilidad de la evoluci¨®n de los acontecimientos mundiales, resulta imposible, naturalmente, responder a esa cuesti¨®n de forma rotunda. El ascenso de fuerzas transnacionales y actores no estatales, por no hablar de potencias en ascenso como China, indica que se perfilan grandes cambios en el horizonte, pero sigue hab¨ªendo razones para creer que, al menos en la primera mitad de este siglo, Estados Unidos conservar¨¢ su primac¨ªa en materia de recursos de poder y sigue desempe?ando un papel fundamental en el equilibrio mundial de poder.
En una palabra, si bien la era de la primac¨ªa de EE UU no ha concluido, va a experimentar cambios importantes. Lo que est¨¢ por ver es si esos cambios aumentar¨¢n la seguridad y la prosperidad mundiales o no.
Joseph S. Nye es profesor en la Universidad de Harvard, presidente del Consejo del Programa Mundial sobre el Futuro de la Gobernaci¨®n, del Foro Econ¨®mico Mundial, y autor de Is the American Century Over? (?Se ha acabado el siglo americano?).Traducido del ingl¨¦s por Carlos Manzano.? Project Syndicate, 2015.www.project-syndicate.org
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.