Un ej¨¦rcito de perversos y diab¨®licos Gremlins pon¨ªa patas arriba la sala de cine de la ciudad sembrando el caos y la anarqu¨ªa donde se proyectaba Blanca Nieves y los siete enanitos. Una de las mejores muestras del esp¨ªritu corrosivo e irrespetuoso que recorr¨ªa de punta a punta esta comedia de terror.Un director de una cinefilia incurable como Woody Allen ya nos hab¨ªa dejado en Sue?os de seductor noticias de esa relaci¨®n m¨ªtica y poderosa entre la pantalla y el espectador, ahora nos legaba una de sus mejores obras: Ese cruce entre lo imaginario y lo real, entre el cine y la vida, y la sala oscura como puerta de embarque para todos los sue?os.En su viaje al pa¨ªs de la infancia Fellini fondeaba en la oscuridad luminosa de la sala de cine como lugar clandestino de encuentros prohibidos o frustrados contactos sexuales. Para el recuerdo la imagen de la actriz Magali Noel, la Gradisca cinematogr¨¢fica, fumando mientras mira cautivada la pantalla.La sala de cine esta vez como celebraci¨®n de ese paso hist¨®rico que marca el tr¨¢nsito del cine mudo al cine sonoro. El cine dentro del cine y el musical, como se?alaba Guillermo Cabrera Infante, g¨¦nero por excelencia con derecho a la felicidad eterna.Nos quedamos con la secuencia final: Jacques Perrin en la sala de proyecci¨®n mirando emocionado las im¨¢genes de todos esos besos robados y censurados que la pantalla le devuelve como un ¨²ltimo regalo de un tiempo de felicidad que ha quedado atr¨¢s: El milagro diario del cine.Un autocine y una pelicula de terror de la Hammer componen el escenario de una de las secuencias m¨¢s divertidas de la pel¨ªcula: James Mason ¡°atrapado¡± en un juego de manos entre el presente imperfecto, Shirley Winters y el futuro deseable, Sue Lyon.Johnny Depp como el g¨¢nster John Dillinger consume sus ¨²ltimos momentos de vida en una sala de cine de Chicago viendo Manhattan Melodrama (El enemigo p¨²blico n¨²mero 1). A la salida del cine Biograph las balas del FBI acaban con su vida.Dos adolescentes, Jeff Bridges y Timothy Bottoms asisten a la ¨²ltima sesi¨®n del viejo cine del pueblo que cierra sus puertas ante la competencia de la televisi¨®n. En la pantalla, las im¨¢genes de Rio Rojo. Se acaba una ¨¦poca del cine y una etapa de sus vidas ante un futuro lleno de incertidumbres.La imaginaci¨®n de Tarantino consegu¨ªa reunir a la c¨²pula del Tercer Reich, Hitler incluido, en una sala de cine de Paris y acabar con todos ellos con permiso de la Historia contempor¨¢nea y los historiadores, en medio de una org¨ªa de fuego y destrucci¨®n.Canto al cine y a su magia como espect¨¢culo colectivo. Marcello Mastroianni, el empresario del cine a punto de cerrar felicita la navidad mientras comienza a nevar sobre los espectadores y homenaje a la escena final de la pelicula ?Que bello es vivir! De Frank Capra.Los ni?os internos del colegio religioso disfrutan con la pelicula El emigrante de Charlot ajenos al r¨¦gimen de terror y de odio que se extiende por Francia y que acabar¨¢ se?alando su infancia.Robert de Niro como el taxista neur¨®tico y solitario que cura sus problemas de insomnio deambulando de madrugada por las calles de Nueva York y refugi¨¢ndose en salas de cine de porno.
