Consideraciones sobre la tragedia

Desde el tr¨¢gico accidente del vuelo GWI9525, se est¨¢ dando a la ciudadan¨ªa una serie de informaciones, en mi opini¨®n, sensacionalistatas por parte de la mayor¨ªa de los medios de comunicaci¨®n.

Estoy de acuerdo en que se informe sobre la causa del accidente, pero de ah¨ª a que se entre en el terreno personal de las v¨ªctimas y de sus familiares, o de la exnovia del copiloto, o en el diagn¨®stico psiqui¨¢trico que ten¨ªa ¨¦ste, hay un trecho.¡ª Bernat Mitjana Gonz¨¢lez de Rivera.¡ª Barcelona.

Seg¨²n todos los indicios, Andreas Lubitz, el copiloto, fue el responsable de que se estrellase el avi¨®n de Germanwings. Parece que ten¨ªa problemas psiqui¨¢tricos. Todos estamos conmocionados desde que conocimos el siniestro. Intentamos hacernos cargo del dolor de las familias de los fallecidos (yo hab¨ªa tenido de alumno a uno de ellos).

El hecho de que la muerte de 150 personas haya sido buscada de forma deliberada por el copiloto nos llena a¨²n m¨¢s de zozobra. Toda nuestra vida est¨¢ basada en actos de confianza. Confiamos en la persona que nos ha preparado la comida, en el conductor del autob¨²s, en el m¨¦dico que nos atiende. No puede ser de otro modo.

Hay que tener unas garant¨ªas m¨ªnimas y habr¨¢ que ver si en este caso se han respetado. Pero ser¨ªa patol¨®gico, nos llevar¨ªa a una situaci¨®n invivible (?se imaginan?), exigir un certificado a cada una de las personas con las que nos relacionamos, aunque corramos el riesgo de toparnos con un Lubitz.¡ª Jes¨²s Domingo Mart¨ªnez. Girona.