Recaudar m¨¢s para combatir la desigualdad

Estamos ya en precampa?a electoral y el PP, bien apoyado por su trompeter¨ªa medi¨¢tica, cree haber encontrado la idea fuerza para ganar las elecciones: bajar los impuestos.

Este mismo Gobierno que nos trata de vender ahora sus bajadas impositivas, el que las anunciaba antes de las pasadas elecciones generales, no es otro que el que lleg¨® al poder y ejecut¨® el mayor hachazo fiscal a las clases medias de la democracia, con m¨¢s de 50 subidas impositivas por valor de 23.000 millones de euros. Los espa?oles lo saben y no se dejar¨¢n enga?ar de nuevo, ni engatusar por la reciente reforma fiscal, que supone un gran regalo fiscal de 3.800 millones para 2015, beneficiando desproporcionadamente a las grandes empresas y las rentas m¨¢s altas, y que ni de lejos compensan a la clase media por las subidas de IVA, los copagos o los recortes en servicios p¨²blicos, derechos y prestaciones.

Otros partidos como Ciudadanos se han subido al carro y proponen reducir el IVA al 16%, cuando en realidad esconden que eso supondr¨ªa una subida de impuestos por valor de 2.500 millones de euros, justamente centrada en los productos m¨¢s sensibles para las clases medias y bajas.

Desde el Partido Socialista pensamos que con los impuestos, como con todo, es bueno decir la verdad a la gente. Tres aspectos merecen ser destacados:

1. Nuestro pa¨ªs tiene unos ingresos p¨²blicos muy inferiores a la media europea, m¨¢s parecidos a los de Polonia y Estonia que a los de los pa¨ªses m¨¢s avanzados. Con ese nivel de recaudaci¨®n es imposible corregir el d¨¦ficit y recuperar el Estado de bienestar.

2. En las sociedades avanzadas las desigualdades no son tan acusadas en lo que se gana (las rentas salariales), sino en lo que se tiene (la gran riqueza acumulada y la rentas de esa riqueza). En nuestro pa¨ªs, el 10% de los individuos que acumulan m¨¢s riqueza poseen un patrimonio 135 veces m¨¢s elevado que el 20% m¨¢s pobre de la poblaci¨®n. En cambio, en renta la diferencia es m¨¢s baja, de 13 a 1.

3. En Espa?a las rentas salariales soportan directa e indirectamente en torno al 90% de la presi¨®n fiscal, 9 de cada 10 euros recaudados. En cambio, la imposici¨®n sobre el capital, la riqueza y las sociedades apenas aporta 1 euro de cada 10 (el restante 10%), y ser¨ªa discutible que, en realidad, estuviese siendo aportado por las rentas altas.

En este contexto, desde el PSOE creemos que Espa?a necesita una reforma fiscal en profundidad, no el parche que ha aprobado el Gobierno, para lograr un sistema fiscal que recaude m¨¢s, s¨ª, pero tambi¨¦n de una forma m¨¢s justa, sin elevar la carga tributaria a la clase media trabajadora, sino mejorando la progresividad de nuestro sistema tributario exigida por nuestra Constituci¨®n. Es decir, el debate no deber¨ªa ser subir o bajar impuestos, sino a qui¨¦n se le sube y a qui¨¦n se le puede bajar sin da?ar la recaudaci¨®n. Lo que est¨¢ en juego es el modelo de sociedad al que se aspira.

El PSOE no puede renunciar a gravar con m¨¢s eficacia la gran riqueza

Mejorar la progresividad y equidad de nuestros impuestos exige recuperar una visi¨®n integral del conjunto del impuesto sobre la renta de las personas f¨ªsicas, el impuesto sobre el patrimonio y el impuesto sobre sucesiones y donaciones. Una de las propuestas del Partido Socialista es realizar una reforma conjunta del impuesto de patrimonio (IP) y del IRPF para que este ¨²ltimo deje de ser un impuesto que pr¨¢cticamente solo grave a los asalariados, y grave toda la capacidad econ¨®mica derivada de las rentas de capital y de la acumulaci¨®n de riqueza.

Se pretende as¨ª incorporar de manera efectiva la tributaci¨®n de la riqueza al sistema impositivo, en l¨ªnea con recomendaciones de organismos como el FMI o la OCDE, para que aquellas grandes fortunas y rentas que actualmente no contribuyen empiecen a hacerlo y adem¨¢s incentivar el uso productivo de los capitales.

La reforma tendr¨ªa que acordarse tambi¨¦n con las comunidades aut¨®nomas para que participen de su recaudaci¨®n, como ocurre ahora con el IP e IRPF, y para evitar que la competencia a la baja acabe vaciando el tributo dejando as¨ª sin gravamen a los patrimonios elevados. Un caso claro de esto ¨²ltimo es la Comunidad de Madrid (CAM), que aplica desde hace a?os una bonificaci¨®n auton¨®mica del 100% sobre el IP, la ¨²nica regi¨®n que lo hace por cierto, lo que supone una p¨¦rdida de recaudaci¨®n de unos 600 millones de euros al a?o. Es una cantidad equivalente a, por ejemplo, el 43% del gasto social o el 41,6% del gasto en vivienda y transportes de la CAM, que se pierde en beneficio de unas 14.000 personas (el 0,2% de los madrile?os) con un patrimonio medio de cinco millones de euros.

La alternativa fiscal del PSOE incluye una reforma en profundidad del impuesto sobre sociedades, en l¨ªnea con las tendencias internacionales, para ampliar las bases imponibles y eliminar privilegios hacia las grandes empresas, que actualmente pagan un tipo efectivo muy bajo. Por ello, proponemos una tributaci¨®n m¨ªnima temporal del 15% sobre el resultado contable para las grandes empresas de modo que contribuyan a recuperar la recaudaci¨®n y estabilizarla en el tiempo.

Elevar la recaudaci¨®n requiere una lucha sin cuartel contra el fraude y la evasi¨®n fiscal

Adem¨¢s, creemos que elevar la recaudaci¨®n requiere una lucha sin cuartel contra el fraude y la evasi¨®n fiscal. Cuanto m¨¢s eficaces seamos contra el fraude, m¨¢s podremos bajar los impuestos a las clases medias. En esta legislatura en la que el Gobierno ha aprobado una vergonzosa amnist¨ªa fiscal, el PSOE ha presentado docenas de propuestas concretas y viables para combatir el fraude, la elusi¨®n y la evasi¨®n fiscal. Incluida una propuesta detallada de un impuesto para evitar la desviaci¨®n de beneficios por las grandes multinacionales (la llamada Google Tax).

Al tiempo que se elevan los ingresos, es necesario mejorar la eficiencia del gasto p¨²blico, reduciendo los costes de provisi¨®n de los servicios p¨²blicos, y eliminando duplicidades y gastos superfluos. Pero, sobre todo, debemos aumentar la eficacia de cada euro empleado para estimular la inversi¨®n productiva y conseguir reducir desigualdades y combatir la pobreza que estamos sufriendo a consecuencia de la crisis y de las pol¨ªticas de recortes del Gobierno del Partido Popular.

En definitiva, la reforma fiscal del PSOE no busca en ning¨²n caso ¡°crujir a los ricos¡±, como proclama sin pudor la derecha medi¨¢tica e incluso se ha escrito recientemente en estas mismas p¨¢ginas. Al contrario, el Partido Socialista es favorable a las empresas y a los empresarios que crean empleo y riqueza y que son la inmensa mayor¨ªa en nuestro pa¨ªs. Pero un partido socialdem¨®crata como el PSOE no puede renunciar a gravar con m¨¢s eficacia la gran riqueza. Lo hacemos para que contribuyan m¨¢s los que m¨¢s capacidad tienen, para que no tengan que pagar m¨¢s quienes ya pagan suficiente y para sostener el gasto social y reducir la creciente desigualdad.

Manuel de la Rocha V¨¢zquez es secretario de Econom¨ªa del PSOE