Hoy en d¨ªa, aproximadamente 300 millones de ni?os pobres en todo el mundo no van a la escuela o no reciben una comida durante el d¨ªa en el colegio. En la mayor parte de los casos, se trata de ni?as. De entre las im¨¢genes que comparto a diario en mi cuenta de Twitter @diegofgphoto, este mes he querido mostrar aquellas que reflejan las actividades de alimentaci¨®n escolar desarrolladas por el Programa Mundial de Alimentos. Estas fotograf¨ªas fueron tomadas durante 10 a?os de trabajo en Darfur (Sud¨¢n), Timor Occidental (Indonesia), Afganist¨¢n y Kenia y se las dedico a mi padre, profesor de matem¨¢ticas, que nos dej¨® el 19 de marzo. Esta imagen de 2010, corresponde a una jornada de distribuci¨®n de galletas energ¨¦ticas en el norte de Afganist¨¢n. En situaciones de emergencia, la alimentaci¨®n escolar es una fuente de nutrici¨®n fundamental y permite que no se interrumpa el proceso educativo.2005, Darfur, Sud¨¢n. Programa de alimentaci¨®n escolar para ni?os desplazados por la guerra. El conflicto en Darfur, que dura ya una d¨¦cada, se ha intensificado recientemente debido a conflictos intertribales por tierras cultivables y recursos, provocando la mayor oleada de desplazamientos de poblaci¨®n que la regi¨®n haya experimentado en los ¨²ltimos a?os. Nuestras visitas a los lugares donde se desarrollan las actividades del PMA suelen generar cierto revuelo, sobre todo entre los ni?os. No fue f¨¢cil convencer a estas peque?as de que dejaran de mirar a la c¨¢mara y se concentraran en su profesora¡2011, meriendas escolares en las tierras altas de Kenia. El programa de alimentaci¨®n escolar del pa¨ªs est¨¢ dise?ado para fomentar tambi¨¦n el desarrollo agr¨ªcola local. Como parte de esta estrategia, el PMA apoya al Gobierno en las transferencias de dinero a las escuelas, las cuales emprenden entonces procesos competitivos de compras con los agricultores y proveedores locales.2010, alimentaci¨®n escolar en el norte de Afganist¨¢n. Vamos a la mesa¡ A pesar de estar elaborados con ingredientes sencillos, las personas encargadas de preparar las comidas para los ni?os cocinan platos no solo nutritivos, tambi¨¦n apetitosos. Esta comida ol¨ªa realmente bien y, calentita, ayudaba a los ni?os a combatir los rigores del invierno en Afganist¨¢n.2008, alumnos de los colegios apoyados por el PMA en Kupang, Timor Occidental, Indonesia. Las comidas nutritivas en la escuela son un m¨¦todo sencillo y efectivo que pretende lograr mejoras en las tasas de alfabetizaci¨®n y contribuir a que los ni?os pobres rompan el ciclo de pobreza, lo que se traducir¨ªa en resultados tangibles para toda la sociedad. Al disminuir el hambre de los ni?os y mejorar sus posibilidades de educaci¨®n, la alimentaci¨®n escolar puede ayudar a crear la infraestructura humana necesaria para que las naciones prosperen.2010, alimentaci¨®n escolar en el norte de Afganist¨¢n. Esta imagen se tom¨® durante una visita a un pueblo cercano a la frontera con Uzbekist¨¢n. Afganist¨¢n es un pa¨ªs de gran riqueza en recursos naturales, historia, paisajes y tambi¨¦n etnias. Mientras que en algunas partes del pa¨ªs me confund¨ªan con un afgano y se dirig¨ªan a m¨ª en dari por la calle, me llam¨® la atenci¨®n que eso no suced¨ªa en el norte y noreste, donde abundan los rasgos marcadamente asi¨¢ticos de muchos de sus habitantes.2005, Darfur, Sud¨¢n. Los proyectos del PMA casi siempre se desarrollan conjuntamente con ONG locales o internacionales, diversas dependencias gubernamentales, u otras agencias de Naciones Unidas. Como se aprecia la imagen, la bonita sonrisa de esta ni?a desplazada por el conflicto en Darfur est¨¢ enmarcada por el emblema de Unicef, nuestro compa?ero de trabajo en proyectos de alimentaci¨®n escolar.2008, Timor Occidental, Indonesia. Programa de distribuci¨®n de galletas enriquecidas con vitaminas y minerales en colegios. No hay diferencia entre las miradas de los ni?os cuando reciben una chucher¨ªa, algo que he apreciado en muchas ocasiones viajando al terreno. Uno ejemplo m¨¢s de las similitudes que tiendo a encontrar (o quiero hacerlo) entre los pueblos, m¨¢s que diferencias.2006, Nyala, Darfur, Sud¨¢n. Programa de atenci¨®n a ni?os de la calle. Como en todas las guerras, el conflicto en Darfur dej¨® y sigue dejando tras de s¨ª un buen n¨²mero de hu¨¦rfanos. Muchos de ellos son atendidos por familiares, pero algunos acaban en la calle. Estas actividades dirigidas a ellos no solo suponen que se les acoge y se les da alimentaci¨®n y educaci¨®n, sino tambi¨¦n, como en la imagen, las actividades recreativas ayudan a devolverles la sonrisa.2014, Isiolo, Kenia. En ciertas culturas tradicionales, donde se espera que las ni?as se queden en el hogar o vayan a trabajar, a menudo la alimentaci¨®n escolar y las raciones para llevar a la casa funcionan como un incentivo para que sus padres las env¨ªen a la escuela.2006, programa de alimentaci¨®n escolar en Darfur, Sud¨¢n. Si no recuerdo mal, en nuestra a?orada EGB tambi¨¦n era com¨²n que nos mandaran a limpiar la pizarra¡ Las infraestructuras de muchos colegios rurales en los pa¨ªses en desarrollo son generalmente pobres; en algunos sitios se dan clases incluso debajo de los ¨¢rboles. Sin embargo, tan importante como la educaci¨®n que reciben o las infraestructuras, lo es el facilitar un entorno donde los ni?os puedan relacionarse, jugar, y aislarse, por un rato al menos, de las crudas realidades que les rodean.2006, Darfur, Sud¨¢n. Ni?as desplazadas por la guerra en Darfur reciben clases en instalaciones provisionales gestionadas por agencias de cooperaci¨®n internacional.2010 Mazar e Sharif, Afganist¨¢n. La taza roja del Programa Mundial de Alimentos se ha utilizado en campa?as de sensibilizaci¨®n y, con el tiempo, se ha convertido para nosotros en una especie de icono del trabajo que realizamos. Estas de la imagen se utilizan en los colegios de Afganist¨¢n para servir agua.