Educaci¨®n: ?cuesti¨®n de sue?os o derechos?

En el a?o 2.000, en el Foro Mundial sobre la Educaci¨®n celebrado en Dakar (Senegal), gobiernos del mundo y representantes de las organizaciones internacionales se comprometieron a lograr la educaci¨®n para todos y todas (EPT) en el 2015. Pues bien, ya estamos en el a?o meta y los datos nos muestran una dura realidad que hace de Dakar un sue?o incumplido. Hoy como entonces, desde la Campa?a Mundial por la Educaci¨®n estaremos presentes en Corea luchando porque el sue?o de lograr una educaci¨®n de calidad para todas las personas en el mundo deje de ser tal para ser un Derecho garantizado.

El pasado mes de abril, UNESCO presentaba el Informe de la Educaci¨®n para Todos (EPT) 2015 Logros y desaf¨ªos. No podemos negar que ha habido avances, pero insuficientes. Seg¨²n datos del informe, s¨®lo uno de cada tres pa¨ªses del mundo ha alcanzado la totalidad de los objetivos de la Educaci¨®n para Todos, y tan s¨®lo la mitad de ellos lograron el objetivo en el que se centraba la m¨¢xima atenci¨®n: la escolarizaci¨®n universal de todos los ni?os y ni?as en edad de cursar la ense?anza primaria.

Esto significa que en 2015 todav¨ªa hay 58 millones de ni?os y ni?as sin escolarizar, otros 100 millones de ni?os y ni?as en el mundo que no podr¨¢n terminar sus estudios de primaria y que muchos de los que la terminan no adquieren las competencias b¨¢sicas por la mala calidad de la ense?anza. Se siguen necesitando cuatro millones de docentes para lograr la escolarizaci¨®n de todos los ni?os y ni?as en edad de cursar Primaria. Adem¨¢s, un tercio de los ni?os y ni?as sin escolarizar viven en zonas azotadas por guerras y conflictos. Otros 63 millones de adolescentes siguen sin escolarizar. Casi 781 millones de adultos tienen competencias deficientes en lectura y escritura y as¨ª podr¨ªamos seguir ampliando la retah¨ªla de datos desalentadores...

En 2015 todav¨ªa hay 58 millones de ni?os y ni?as sin escolarizar

Entre otros motivos, como bien se?ala el informe, la educaci¨®n sigue estando insuficientemente financiada. Muchos gobiernos han incrementado el gasto educativo, pero son pocos los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo que asignan el 20% recomendado de sus presupuestos nacionales. Algo similar ocurre con los donantes, que no s¨®lo han reducido en la mayor¨ªa de los casos el presupuesto de Ayuda Oficial al Desarrollo ¡ªen el caso de Espa?a hemos pasado del 0.49% en el a?o al 2009 al 0.14%PIB en 2014¡ª, sino que han reducido desde 2010 su apoyo a la educaci¨®n (en Espa?a hemos pasado del 10.6% del total de AOD destinado a educaci¨®n en el a?o 2011, al 6.8% en el 2013 ). La educaci¨®n es un derecho humano fundamental reconocido y los gobiernos tienen la obligaci¨®n de garantizarla. En concreto, los gobiernos tienen la responsabilidad de proporcionar fondos suficientes para una educaci¨®n equitativa, inclusiva y de calidad y el aprendizaje a lo largo de toda la vida para todos y todas.

?Para qu¨¦ un foro mundial?

Ante este panorama, ?para qu¨¦ sirve el Foro Mundial para la Educaci¨®n (FME)?. En Incheon ¨C Corea se pretende firmar una declaraci¨®n promovida por UNESCO, previamente trabajada en diferentes espacios y con la participaci¨®n de todo tipo de actores en cada pa¨ªs. Adem¨¢s, se aprobar¨¢ un marco para la acci¨®n que ser¨¢ adoptado finalmente en noviembre, tras la Cumbre de desarrollo sostenible de Naciones Unidas.

El objetivo sigue siendo el mismo que hace 15 a?os: ¡°Garantizar una educaci¨®n inclusiva, equitativa y de calidad, y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos¡±. Se reafirma la educaci¨®n como un derecho humano fundamental, el compromiso a 12 a?os de educaci¨®n gratuita, de los cuales nueve a?os sean obligatorios, la necesidad de apostar por la equidad y en ese sentido, hacer ¨¦nfasis en los ni?os, ni?as y j¨®venes pertenecientes a grupos y colectivos m¨¢s desfavorecidos,el concepto amplio de calidad, la importancia central del profesorado y el reconocimiento del derecho a la participaci¨®n.

Y en este reconocimiento del Derecho a la Educaci¨®n, la sociedad civil ha jugado un importante papel, pues a medida que crece la conciencia de la ciudadan¨ªa global crecen los espacios de incidencia hacia los gobiernos. Durante 2015, los activistas en educaci¨®n tenemos una oportunidad ¨²nica para influir en el contenido del programa por la educaci¨®n post-2015. Guiados por esta visi¨®n com¨²n del derecho a la educaci¨®n y la creencia compartida en el poder de esta, la CME ha luchado por la implementaci¨®n del programa completo de la Educaci¨®n para todos (EPT) a lo largo de los ¨²ltimos 15 a?os. Las metas todav¨ªa no se han alcanzado y en los ¨²ltimos dos a?os de negociaciones post-2015, la CME ha luchado por una meta m¨¢s amplia, basada en derechos y global.

Son pocos los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo que asignan el 20% recomendado de sus presupuestos nacionales a la educaci¨®n

En el FME la CME reclamar¨¢ que los nuevos objetivos incluyan un compromiso expreso en favor de la equidad, del acceso a una formaci¨®n de calidad y que se haga una llamada a la inversi¨®n en docentes. Abogamos tambi¨¦n para que en el FME se revise la indignante situaci¨®n por la que muchos Estados aumentan el gasto militar mientras reducen el gasto en educaci¨®n y velaremos porque la Educaci¨®n no sea una meta m¨¢s de los ODS, sino un facilitador fundamental para alcanzar todas las metas.

El mundo necesita cambios fundamentales y esto requiere de una nueva generaci¨®n de ciudadanos globales activos con nuevos conocimientos, actitudes y conductas, para lo cual la educaci¨®n es el catalizador fundamental. 2015 ya no es momento de reflexiones, sino de firmes compromisos para la acci¨®n conjunta, millones de ni?os y ni?as est¨¢n esperando una oportunidad para ejercer su derecho a la educaci¨®n, para ser libres.

Graciela Rico es coordinadora en Espa?a de la Campa?a Mundial por la Educaci¨®n (liderada por Entreculturas, Ayuda en Acci¨®n y Educo). La Campa?a Mundial por la Educaci¨®n (CME) es un movimiento de la sociedad civil que trabaja para poner fin a la crisis mundial en la educaci¨®n. Su misi¨®n es asegurar que los Estados act¨²en ya para hacer realidad el derecho de todos y cada uno a una educaci¨®n p¨²blica, gratuita y de calidad.?