La vida del bater¨ªa de AC/DC es un drama
Phil Rudd ruega a Angus Young que le perdone para volver a la banda mientras contin¨²a en arresto domiciliario y se desintoxica
Angus Young me est¨¢ explicando el Santo Grial del rock duro: c¨®mo se compone una canci¨®n de AC/DC. ¡°Cuando escucho un tema y no entra a los pocos segundos la bater¨ªa me pongo nervioso, no me gusta. En realidad es parecido a c¨®mo componemos en el grupo. Mi hermano Malcolm escribe en su casa y yo en la m¨ªa. Luego nos juntamos y elegimos las mejores canciones. Cuando ensayamos, las probamos. Nos ponemos a tocar los acordes de guitarra y entra la bater¨ªa de Phil. Poc, poc, poc [y Angus simula que toca con las baquetas], y ah¨ª empieza a fluir todo¡±. Como si el guitarrista acabase de dictar la lista de la compra en lugar de desvelar el gran secreto rockista, sorbe tranquilamente un poco de su taza de caf¨¦ y esboza una sonrisa a la espera de la siguiente pregunta. En aquella ¨¦poca ni Angus ni nadie lo sab¨ªan, pero la realidad es que las canciones de AC/DC ya nunca se crear¨¢n de esa manera.
Entrevist¨¦ al jefe de AC/DC en D¨¹sseldorf (Alemania), en 2008, con motivo del lanzamiento del pen¨²ltimo ¨¢lbum de la banda, Black ice. Los 40 minutos de charla resultaron frustrantes. Muy poco tiempo para hablar de tantas cosas: de Bon Scott, de Highway to hell, de su forma de tocar la guitarra, de las claves de su leyenda, de mil asuntos¡ Aquel d¨ªa, el alma de la banda de rock duro m¨¢s popular de la historia llevaba una peque?a bolsa verde consigo. El m¨²sico, vestido tan sencillo como con unos vaqueros, una camiseta y unas zapatillas deportivas, ten¨ªa alrededor a un batall¨®n de asistentes. Innecesarios la mayor¨ªa de ellos debido a la austeridad del protagonista. A la hora de comer, entre una entrevista y otra, Angus agarr¨® su bolsita verde y cogi¨® un s¨¢ndwich que se hab¨ªa comprado en una tienda pr¨®xima al hotel donde se celebraban sus encuentros con los medios. As¨ª son los lujos de esta peculiar estrella del rock. Pero algunas cosas han cambiado.
La maquinaria de AC/DC nunca se detiene. Se muri¨® el cantante Bon Scott y a las pocos semanas ya ten¨ªan a Brian Johnson; cay¨® en las garras de la demencia Malcolm Young y el grupo se puso a grabar sin ¨¦l; la polic¨ªa encerr¨® a su bater¨ªa, y le sustituyeron a las pocas horas. AC/DC es un tranv¨ªa que va demasiado embalado como para esperar al que sale a tomar el aire
Aquel Phil tan esencial a la hora de ensayar las canciones de la formaci¨®n australiana se encuentra ahora sorteando problemas. Muchos. En lugar de estar aporreando su instrumento (y, de paso, llenando sus bolsillos de d¨®lares) ante 50.000 desatados seguidores, Phil Rudd (nacido en Melbourne, Australia, hace 61 a?os), se encuentra retenido en su casa durante los pr¨®ximos ocho meses. Desde all¨ª, en Tauranga (Nueva Zelanda), declar¨® la semana pasada a la revista estadounidense Rolling Stone: ¡°D¨¦jame cinco minutos en una habitaci¨®n con Angus y recupero mi puesto de bater¨ªa en AC/DC¡±. M¨¢s tarde desvela que no ha hablado con el jefe Angus en todos estos meses: ¡°He hecho algunas cosas que no deber¨ªa haber hecho y estoy pagando por ello. Pero cuando recupere mi libertad quiero volver a la banda. No deseo enfadar a Angus. S¨¦ que soy el mejor bater¨ªa para el grupo y ¨¦l tambi¨¦n lo sabe¡±.
Pobre diablo. ?l deber¨ªa saber mejor que nadie que la maquinaria de AC/DC nunca se detiene. Jam¨¢s. No espera a nadie. Se muri¨® Bon Scott (febrero de 1980), aquel vozarr¨®n que parec¨ªa insustituible, y a los pocos meses editaron, con Brian Johnson cantando, su ¨¦xito m¨¢s apabullante, Back in black (julio de 1980); cay¨® en las garras de la demencia Malcolm Young (2014), hermano de Angus y base de la composici¨®n, y el grupo se puso a grabar sin ¨¦l; la polic¨ªa encerr¨® a su bater¨ªa, y la banda le sustituy¨® por otro (Chris Slade) en pocas horas y se marcharon de gira. AC/DC es un tranv¨ªa demasiado embalado y pesado como para pararse a esperar a la gente que sale a tomar el aire.
Los problemas de Rudd empezaron en noviembre de 2014, cuando fue acusado por partida triple: contratar a un sicario para asesinar a una persona, amenazas de muerte y posesi¨®n de drogas. El primer cargo, el m¨¢s grave, fue archivado por falta de pruebas. Los otros no. Las sustancias encontradas fueron marihuana y metanfetaminas. Por esto ¨²ltimo debe permanecer en su domicilio, sin permitirle salidas. Puede, sin embargo, recibir a gente. Uno de sus visitantes es un psiquiatra especialista en tratar con personas dependientes de la poderosa metanfetamina. Rudd tambi¨¦n tiene dependencia del alcohol. ¡°?l me est¨¢ ayudando a superar mis desequilibrios. Y me est¨¢ yendo bien. Este m¨¦dico es un tipo altamente cualificado en la escuela de La naranja mec¨¢nica [la pel¨ªcula de Stanley Kubrick, donde el protagonista pasa por las manos de un equipo m¨¦dico que experimenta sus m¨¦todos extremos con ¨¦l]. Estoy aprendiendo muchas cosas. Soy como un gran pez en un peque?o estanque¡±, ha declarado.
Rudd niega algunas informaciones que se ofrecieron sobre su caso. Los medios neozelandeses contaron que el bater¨ªa, descontento por las estrategias seguidas para el lanzamiento, en 2014, de su primer disco en solitario, Head job (un ¨¢lbum de rutinario rock duro, donde Rudd se atreve a cantar con su voz quincallera), llam¨® a unos sicarios para que ¡°quitaran¡± de la circulaci¨®n a su guardaespaldas. Rudd le responsabiliz¨® de la, en su opini¨®n, deficiente gesti¨®n del lanzamiento del ¨¢lbum. Seg¨²n estos medios, el bater¨ªa ofreci¨® a estas personas ¡°200.000 d¨®lares, un coche, una moto y una casa¡±. Adem¨¢s, el m¨²sico telefone¨® a su empleado y le dijo que ¡°le matar¨ªa¡±. Rudd, sin embargo, niega esta informaci¨®n. El juez desestim¨® todo el asunto de los sicarios "por falta de pruebas", pero mantiene las acusaciones de amenazas de muerte. ¡°Hemos apelado por el tema de las acusaciones de amenazas de muerte. Todav¨ªa no hay fecha prevista para la vista, pero est¨¢ claro que al juez le interesa que Phil se rehabilite de su dependencia de las drogas, por eso le ha recluido en casa¡±, ha afirmado el abogado del m¨²sico, que conf¨ªa en que transcurridos los ocho meses de arresto domiciliario el bater¨ªa quede libre.
El bater¨ªa est¨¢ en arresto domiciliario. Recibe casi a diario la visita de un psiquiatra especializado en drogodependencia. ¡°Me est¨¢ ayudando a superar mis desequilibrios. Y me est¨¢ yendo bien. Es un tipo altamente cualificado en la escuela de La naranja mec¨¢nica", se?ala Rudd
Para Rudd su caso es un claro ejemplo de persecuci¨®n medi¨¢tica. ¡°Tiene la pinta de que los medios quieren encontrar algo malo para despachar ejemplares. Me quieren vender como ¡®el bater¨ªa malote¡¯. Desean que todo el mundo me odie, pero en el fondo creo que la gente me aprecia¡±, ha se?alado a Rolling Stone. No es la primera vez que Rudd ha tenido que dejar la banda. Entr¨® en el grupo en 1975, un par de a?os despu¨¦s de su formaci¨®n y vivi¨® la mejor etapa creativa y de ¨¦xito. Por supuesto, fue activo en esos primeros a?os de rock regados con alcohol. ¡°Aquellos primeros tiempos fueron muy locos. Nos acost¨¢bamos borrachos y nada m¨¢s levantarnos volv¨ªamos a beber. No hab¨ªa final¡±, declar¨® en el programa Behind the music Malcolm Young. En 1983, Phil fue expulsado por sus problemas con las drogas y por pelearse con otros miembros del grupo, sobre todo con Malcolm. Regres¨® a la banda en 1994¡ hasta los incidentes de noviembre de 2014.
Rudd invirti¨® los once a?os de retiro fuera de AC/DC en consolidar su vida privada. Se cas¨® con su novia, Lisa O?Brien, y se marcharon a vivir a Tauranga, una ciudad id¨ªlica, situado en la Isla Norte de Nueva Zelanda. Buen clima, gran oleaje para practicar surf y elevado nivel de vida. Es uno de los lugares de retiro para los jubilados neozelandeses y australianos de nivel medio-alto. All¨ª vivi¨® relajado criando a su amplia prole: cinco hijos y su mascota, una cacat¨²a. Adem¨¢s, se compr¨® un yate (donde ya en 2011 le caz¨® la polic¨ªa con una considerable cantidad de marihuana) y mont¨® un restaurante, Phil¡¯s Place. Aquel mismo a?o, 2011, Rudd se moviliz¨® con sus vecinos para recaudar fondos para los afectados por el terremoto de Christchurch, en la Isla Sur de Nueva Zelanda, donde murieron varias decenas de personas.
Cuando regres¨® a AC/DC en 1994 y le preguntaron sobre qu¨¦ hab¨ªa hecho en sus a?os de retiro, coment¨®: ¡°Pilot¨¦ helic¨®pteros, conduje mis coches y me dediqu¨¦ a la agricultura¡±. Rudd tiene pasi¨®n por los transportes de motor. Su colecci¨®n de coches llega a las 12 unidades y tiene licencia para pilotar helic¨®pteros. Pero la tranquilidad se acab¨® cuando regres¨® a la actividad rockera. En 2006 se divorci¨® de Lisa, que le acus¨® de malos tratos, aunque el juez dio la raz¨®n al m¨²sico. Adem¨¢s, tuvo que cerrar el restaurante (luego reabri¨®) y despedir a parte de los empleados tras varias discusiones que acabaron en el juzgado, con reclamaciones de indemnizaciones.
Como baterista, Phil Rudd, cuyo ¨ªdolo es Ringo Starr, es conocido como el genio de la simplicidad. De hecho, algunos especialistas le acusan de ser ¡°extremadamente normal¡±. Seguramente es el bater¨ªa perfecto para un grupo que estil¨ªsticamente no camba mucho (ni falta que hace). Si se extrajera el sonido de bater¨ªa de los temas del grupo se comprobar¨ªa que las variaciones entre canciones son m¨ªnimas. Otros le llaman, por su capacidad para llevar el comp¨¢s, el maestro del metr¨®nomo, el artilugio que indica el tempo en las piezas musicales. Hace solo unos meses, en la ronda de entrevistas para promocionar su disco en solitario y antes de que estallara todo, mascull¨® a un periodista el secreto de su potente pegada: ¡°Toco con unas baquetas con doble cabeza¡±.
¡°D¨¦jame cinco minutos en una habitaci¨®n con Angus y recupero mi puesto de bater¨ªa en AC/DC¡±, dice Rudd. Mientras, ninguno de los miembros del grupo se ha puesto en contacto con ¨¦l
Rudd no tiene un perfil, digamos, intelectual. Hay una an¨¦cdota que desvel¨® en una entrevista el cantante de la banda, Brian Johnson, sobre la personalidad del bater¨ªa. Despu¨¦s de deshacerse en elogios sobre su t¨¦cnica e intuici¨®n cont¨® esta historia: ¡°Ve¨ªamos cada noche que Phil ten¨ªa unos grandes trozos de papel colgados de la bater¨ªa. Un d¨ªa me acerqu¨¦ a ver qu¨¦ demonios era aquello. Y vi que era un p¨®ster con una chica con las tetas m¨¢s grandes que jam¨¢s vi. Le dije: ¡®Pero qu¨¦ es esto, Phil¡¯. Y me contest¨®: ¡®Es para inspirarme¡±. Cuando alguien le pregunt¨® cu¨¢l era la tem¨¢tica de su ¨¢lbum en solitario, le espet¨®: ¡°Trata sobre ir al pub y quitarte toda la mierda que tienes en la cabeza¡±.
Despu¨¦s de llenar estadios por todo el mundo durante el primer semestre de 2015, la gira de AC/DC? Rock or bust se tom¨® un mes de descanso. Vuelve el 22 de agosto para recorrer Estados Unidos y luego enlazar con Canad¨¢ y Australia para acabar el a?o en Nueva Zelanda. El gran drama de Rudd es que su grupo estar¨¢ actuando cerca de su casa y ¨¦l no podr¨¢ posicionarse al fondo del escenario, golpeando el bombo de su bater¨ªa. Y, probablemente, ya no estar¨¢ all¨ª sentado nunca.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.