Libros, uniformes, cuadernos, l¨¢pices de colores¡ La vuelta al cole est¨¢ llena de preparativos. ?Y luego? ?C¨®mo asegurar que los ni?os aprovechan las lecciones? Buenos profesores, metodolog¨ªas novedosas, un espacio c¨®modo¡ son algunos de los ingredientes. Pero todo ello ser¨¢ insuficiente si las mentes de ni?as y ni?os no est¨¢n a pleno rendimiento.Una alimentaci¨®n deficiente puede echar por la borda las mejores intenciones. En 65 pa¨ªses en los que una nutrici¨®n adecuada puede ser un verdadero lujo, el Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA/WFP) se asegura de que 17 millones de escolares reciben comidas nutritivas en sus colegios. Sin hambre que distraiga la atenci¨®n, se aprende mejor.
Proporcionar comidas en los colegios incentiva, adem¨¢s, la escolarizaci¨®n. Padres que no se habr¨ªan planteado enviar a sus hijas al colegio, por ejemplo, deciden hacerlo al saber que adem¨¢s de formaci¨®n, ser¨¢n alimentadas a diario.
Cada a?o el PMA/WFP canaliza la expresi¨®n art¨ªstica de la importancia de las comidas escolares mediante un concurso infantil de dibujo. Las obras de muchos de los escolares, creadas este a?o bajo el lema ¡°Hambre cero: posibilidades infinitas¡±, impresionan por su madurez. En el comienzo de este curso escolar, ojal¨¢ esta peque?a muestra inspire tambi¨¦n grandes sue?os.
Esta primera ilustraci¨®n es de Ruth Elizabeth M¨¢rquez Rivas que, a sus 12 a?os, quiere ser ingeniera pero tambi¨¦n quiere estudiar Arte. En su dibujo, el mundo es una mujer bella, un s¨ªmbolo de amor y bondad. Como la Madre Naturaleza, cuida de su familia, d¨¢ndoles de comer alimentos sanos. Ruth es de Honduras.