Los debates nunca deciden pero siempre revelan

Los debates pocas veces deciden unas elecciones. Hay m¨¢s leyenda que realidad en la idea de que los sudores de Richard Nixon en el debate televisado ante John F. Kennedy le costaron las presidenciales de 1960. O que la frase de Ronald Reagan, en el debate de 1980 ante el presidente Jimmy Carter (¡°?Est¨¢n ustedes mejor que hace cuatro a?os?¡±), le llev¨® a la Casa Blanca.

Tampoco el debate del martes en Las Vegas (Nevada), organizado por la cadena CNN, decidir¨¢ el nombre del candidato del Partido Dem¨®crata a las elecciones presidenciales de noviembre de 2016. Era el primero de una campa?a larga. Faltan m¨¢s de tres meses para que comience el proceso de votaciones, en caucus (asambleas electivas) y primarias, que desembocar¨¢ en la proclamaci¨®n del candidato en la Convenci¨®n Dem¨®crata, del 25 al 28 de julio en Filadelfia (Pensilvania). En Las Vegas debatieron la ex secretaria de Estado y ex primera dama Hillary Clinton, el senador Bernie Sanders, el exgobernador de Maryland Martin O¡¯Malley y los exsenadores Jim Webb y Lincoln Chafee.

El debate revel¨® tres cosas. Una ya la sab¨ªamos, y es que, aunque los candidatos dem¨®cratas sean cinco, la campa?a es cosa de dos: Clinton y Sanders. La segunda revelaci¨®n de Las Vegas afecta a algo que ignoramos: si el vicepresidente Joe Biden se presentar¨¢ o no. Biden lo ha intentado dos veces, en la campa?a para las presidenciales de 1988 y en la de 2008. En la primera ocasi¨®n sus posibilidades empezaron a desmoronarse cuando The New York Times public¨® que hab¨ªa plagiado un discurso del laborista brit¨¢nico Neil Kinnock. Al final Biden retir¨® su candidatura. La periodista que firmaba la informaci¨®n era Maureen Dowd. Hoy Dowd ¡ªla pluma m¨¢s ¨¢cida del periodismo pol¨ªtico estadounidense¡ª es columnista en el mismo diario. Y este verano escribi¨® que Biden sopesaba presentarse. Se lo hab¨ªa pedido su hijo Beau, fallecido el pasado mayo, en el lecho de muerte. La columna de Dowd desat¨® las especulaciones y cerr¨® un c¨ªrculo: la misma periodista que hace m¨¢s de tres d¨¦cadas hab¨ªa hundido a Biden relanzaba su candidatura.

El debate revel¨® que el margen de Biden para entrar en campa?a se estrecha. Biden era la opci¨®n de muchos dem¨®cratas por si Clinton falla. pero la actuaci¨®n brillante de Clinton en Las Vegas desmonta el argumento en favor de Biden. ?Por qu¨¦ es necesario si Clinton ya funciona?

Y aqu¨ª llega la tercera revelaci¨®n, algo que sab¨ªamos pero nos resist¨ªamos a admitir, o que hab¨ªamos olvidado. Y es que Hillary Rodham Clinton es una pol¨ªtica fuera de serie, experimentada en campa?a y en el gobierno, con muchas horas de debate a las espaldas (y mucho dinero para financiar un aparato electoral bien engrasado). Sus esc¨¢ndalos, verdaderos o exagerados; la franca antipat¨ªa que sienten por ella los periodistas; y su tendencia ¡ªbien real¡ª a la confusi¨®n y al equ¨ªvoco han contribuido a erosionar su ventaja.

El ruido tapa la se?al: el hecho de que Clinton sigue siendo la favorita indiscutible para la nominaci¨®n en Filadelfia. As¨ª era antes de Las Vegas y as¨ª es despu¨¦s.