Un debate para cambiar el desd¨¦n de la pol¨ªtica por la ciencia

El presidente del Gobierno Mariano Rajoy necesit¨® dos a?os y medio para visitar por primera vez un centro de investigaci¨®n. Sus anteriores escarceos p¨²blicos con la ciencia hab¨ªan sido escasos y desafortunados. En unas peculiares declaraciones en 2007, restaba importancia al cambio clim¨¢tico y lo pon¨ªa en duda con unas afirmaciones que mostraban la dimensi¨®n de su ignorancia y su desinter¨¦s por el problema: ¡°Oiga, he tra¨ªdo aqu¨ª a diez de los m¨¢s importantes cient¨ªficos del mundo y ninguno me ha garantizado el tiempo que iba a hacer ma?ana en Sevilla. ?C¨®mo alguien puede decir lo que va a pasar en el mundo dentro de 300 a?os?". Desde entonces, algo ha aprendido y, ocho a?os despu¨¦s ,ha reconocido que se equivoc¨® con aquellos comentarios.

La semana pasada, despu¨¦s de que un panel de expertos de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) publicase un informe en el que se dice que comer carne procesada incrementa el riesgo de sufrir c¨¢ncer, Rajoy volv¨ªa a mostrar que no considera la ciencia parte de sus responsabilidades como presidente. ¡°No puedo opinar de lo que no s¨¦ pero me gustar¨ªa que alguien con suficiente conocimiento de causa nos dijera si eso es verdad o mentira", afirmaba durante una entrevista en la Cadena SER. En una sola frase, pon¨ªa en duda el dictamen de los expertos, reconoc¨ªa que no se hab¨ªa informado sobre un tema de gravedad e ignoraba que en los centros de investigaci¨®n p¨²blica espa?oles abundan los cient¨ªficos con conocimiento de causa que le podr¨ªan haber dicho si ¡°eso es verdad o mentira¡±.

En EE UU, solo el 43% de los senadores republicanos y el 67% de los dem¨®cratas aceptan la teor¨ªa de la evoluci¨®n

Fuera de Espa?a, la ciencia y la tecnolog¨ªa tampoco suelen estar en el centro del debate pol¨ªtico. Durante las ¨²ltimas elecciones generales en Alemania, Jakob Edler, investigador de la Universidad de Manchester, mencionaba la ausencia de estas materias en los debates electorales (aunque no en los programas). No obstante, reconoc¨ªa que esa ausencia pod¨ªa parecer poco relevante en un pa¨ªs que incluso en los momentos de dificultad ha mantenido unos niveles de financiaci¨®n muy elevados. Adem¨¢s, a la cabeza del pa¨ªs se encuentra Angela Merkel, doctora en qu¨ªmica cu¨¢ntica y profesional de la ciencia durante a?os.

En Estados Unidos, Barack Obama ha mostrado en numerosas ocasiones su sensibilidad con la ciencia. Cuesta imaginar en Espa?a a un presidente organizando una Noche de la Astronom¨ªa en la Moncloa como la que organiz¨® el presidente norteamericano el pasado 19 de octubre en la Casa Blanca. M¨¢s raro a¨²n ser¨ªa que el presidente introdujese en su discurso sobre el Estado de la Naci¨®n una menci¨®n relevante a la ciencia, como la que hizo Obama a principios de este a?o durante su discurso sobre el estado de la Uni¨®n. No obstante, tambi¨¦n all¨ª la inclusi¨®n de la ciencia en el debate pol¨ªtico es rara y el liderazgo cient¨ªfico y tecnol¨®gico del pa¨ªs no impide que muchos de sus pol¨ªticos renieguen de los resultados cient¨ªficos. En EE UU, solo el 43% de los senadores republicanos y el 67% de los dem¨®cratas aceptan la teor¨ªa de la evoluci¨®n.

Esta semana, desde la Fundaci¨®n Cotec para la innovaci¨®n tecnol¨®gica, se va a poder asistir a un debate sobre ciencia, una materia infrecuente en la discusi¨®n pol¨ªtica. Los principales partidos pol¨ªticos expondr¨¢n y discutir¨¢n sus respectivos programas sobre ciencia en un encuentro que se celebrar¨¢ el martes 3 de noviembre, a las 17:00 (hora de Madrid), y podr¨¢ seguirse en directo por la web de EL PA?S y en la p¨¢gina debate.cotec.es. El encuentro electoral, moderado por el periodista Vicente Vall¨¦s, tambi¨¦n se podr¨¢ comentar en Twitter con la etiqueta #DebateCotec, donde se podr¨¢n realizar preguntas a los asistentes. Hasta ahora han confirmado su asistencia ocho formaciones pol¨ªticas: PP, PSOE, Ciudadanos, Podemos, IU, UPyD, UDC y EAJ-PNV.