12 fotosUn sol para DominicanaEl fot¨®grafo Alberto Pla analiza los resultados conseguidos por la fundaci¨®n religiosa SOLCA en sus proyectos a trav¨¦s de la mirada de voluntarios y beneficiarios 04 feb 2016 - 09:01CETWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceRep¨²blica Domicana es conocida, principalmente, por sus paisajes id¨ªlicos y su clima, excelente casi todo el a?o. Sin embargo, el mismo sol que atrae a miles de turistas, no brilla de la misma manera para todos sus habitantes. Medios sanitarios escasos, deficiente calidad educativa o falta de alternativas de ocio, son solo algunas carencias con las que trabaja la fundaci¨®n de car¨¢cter religioso SOLCA - Solidaridad Calasancia a diario que afectan especialmente a ni?os y j¨®venes. Alberto Pla propone un recorrido a trav¨¦s de la mirada de voluntarios y beneficiarios de los proyectos para entender los resultados que ha conseguido la organizaci¨®n. ?l mismo comenta sus instant¨¢neas. "Ashley es una joven estudiante de 12 a?os que vive en La Puya de Arroyo Hondo, Santo Domingo. Un barrio inseguro de dif¨ªcil acceso, sin los servicios m¨¢s b¨¢sicos. Su casa es precaria y tan grande como se muestra en la imagen. Acude a diariamente al Centro Cultural Calasanz construido en La Puya para reforzar sus materias escolares, siendo la educaci¨®n el puente para alcanzar un mejor futuro".Alberto PlaEl barrio de La Puya de Arroyo Hondo amanece. La precariedad de sus viviendas y la basura acumulada en el arroyo contrasta con la belleza del paisaje caribe?o. Las inundaciones, el desempleo, la inseguridad o la falta de las medidas m¨¢s b¨¢sicas de higiene son solo algunas de las adversidades con las que lidian los habitantes diariamente.Alberto PlaAcuarelas, t¨¦mperas, plastilina¡ se mezclan para potenciar su creatividad y ayudar a su concentraci¨®n en un aula del Centro Cultural Calasanz, en el coraz¨®n del barrio de La puya. Materiales que no pueden permitirse la mayor¨ªa de ellos, pero si se les facilita su uso, dan rienda suelta a su imaginaci¨®n.Alberto PlaEl taller de animaci¨®n lectora es una apuesta fundamental para todos los centros culturales Calasanz y supone una garant¨ªa de un futuro esperanzador. Los ni?os de la imagen leen en el que hay en el barrio de La Puya, incluso estudian poetas y escritores con el fin de reforzar sus conocimientos de la escuela formal.Alberto PlaEl edificio del Centro Cultural Calasanz en La Puya contrasta con el resto de estructuras, tanto como los bellos paisajes entre las viviendas precarias. Acoge seis ¨¢reas educativas con diferentes programas repartidos en nueve aulas. Actualmente trabajan 12 profesores y 40 voluntarios que atienden a 300 ni?os desde primaria a secundaria en talleres y clases de apoyo escolar, arte, m¨²sica, lectura y campamentos. El objetivo es la educaci¨®n integral de ni?os, j¨®venes y familias vulnerables para la mejora de su calidad de vida.Alberto PlaLa ni?a de la imagen probablemente resume el alma del proyecto. La vitalidad proyectada en su sonrisa, la vida por delante, sentada, sonriendo en un aula de una comunidad perdida en La Romana (al este del pa¨ªs) asistiendo a clase, aprendiendo a leer y con ganas de conocer. La educaci¨®n definitivamente es el puente para que estos ni?os consigan mayores oportunidades en el futuro.Alberto PlaSe llama Edimel Inoa Reyes, tiene siete a?os y es alumna del centro Cultural Calasanz de Cumayasa. Sonr¨ªe y juega mientras sostiene el cuento 'Ratoncillo y ratoncilla'. Muchos ni?os de 12 y 13 a?os no saben leer. La lectura es un eje fundamental de los centros, y se trabaja gracias a una coordinadora de lectura del proyecto.Alberto PlaDivanny Familia es alumna del centro Cultural Calasanz de Cumayasa. Tiene 12 a?os. Sonr¨ªe bajo la sombra de un ¨¢rbol con 'James y el melocot¨®n Gigante' de Roald Dahl. Divanny ha ganado varios torneos de lectura que organizan anualmente las coordinadoras de los centros. De mayor quiere ser profesora. La imagen recuerda a la famosa frase del Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa ¡°Aprender a leer es lo m¨¢s importante que me ha pasado. Casi 70 a?os despu¨¦s recuerdo con nitidez esa magia de traducir las palabras en im¨¢genes".Alberto PlaKevin disfruta jugando en los columpios en el campamento mensual que organiza la fundaci¨®n. Los ¨²nicos columpios con los que cuenta toda su comunidad. Alrededor de 80 j¨®venes de las comunidades se capacitan para realizar actividades con los ni?os, como juegos, danzas y manualidades, en torno valores como la solidaridad, el trabajo en equipo y la amistad. Inician y finalizan con cuentos centrados en el valor del d¨ªa.Alberto PlaJos¨¦ es cantante de profesi¨®n. Est¨¢ enfermo de una trombosis que padece desde hace dos a?os. Vive solo sin su familia desde que comenz¨® su enfermedad. Con m¨¢s de 70, a?os las enfermeras se convierten hoy en d¨ªa en su familia improvisada: le llevan la comida, escuchan y atienden sus cuidados m¨¦dicos. Jos¨¦, emocionado, sonr¨ªe junto a tres de ellas en la fotograf¨ªa. Sobre ellas dice: ¡°Son mujeres guerreras¡±.Alberto PlaOraida esromotora de salud en la comunidad de Brisas del Mar. Descansa en su sal¨®n antes de ir a la escuela. A pesar de su corta edad (12 a?os), Oraida compagina sus estudios en la escuela con el seguimiento de enfermos cr¨®nicos, ayudando a su madre ¨Ctambi¨¦n promotora de salud¨C en el tratamiento y la medicaci¨®n de los enfermos de su comunidad.Alberto PlaF¨¢tima es promotora de salud del programa que apoya la Fundaci¨®n SOLCA en La Romana. Adem¨¢s de atender a sus cinco hijos (entre ellos, Oraida, de la foto anterior) y no contar con demasiados recursos, dedica voluntariamente tiempo a sus vecinos escuch¨¢ndoles y proporcion¨¢ndoles medicamentos y atenci¨®n sanitaria b¨¢sica.Alberto Pla