"Regresamos a Nigeria en agosto. Sin noticias de nuestros padres, no ten¨ªamos modo de contactar nuestra abuela, Maryam, que vive en Maiduguri", dice Yussuf. Los hermanos Chiroma conocieron a Ibrahim Mustapha en el campo de desplazados internos en Yola. Los ni?os proporcionaron suficiente informaci¨®n a la Cruz Roja para iniciar la b¨²squeda de sus seres queridos.JES?S SERRANO REDONDO (CICR)"Cuando vi a Ibrahim, sent¨ª que quer¨ªa llevarlo de nuevo en mi espalda como cuando era un ni?o. No tengo palabras suficientes para agradecer a la Cruz Roja la ayuda para encontrar a mi hijo", dice Hafsat Mohammed, la madre de Ibrahim.JES?S SERRANO REDONDO (CICR)"Todav¨ªa estoy sufriendo por la falta de noticias de mi hijo, su padre, pero ahora s¨®lo tengo l¨¢grimas de alegr¨ªa porque mis nietos est¨¢n de vuelta a casa", dice Maryam, aqu¨ª sentada con Hafsat y una t¨ªa de Ibrahim. En abril de 2014, Ahmed y Yussuf Chiroma, hermanos de 12 y 11 a?os respectivamente, cursaban sus estudios en una escuela de Kousseri, Camer¨²n, cuando la violencia armada alcanz¨® Kumshe, su ciudad natal en el noreste de Nigeria. Descubrieron que sus padres hab¨ªan huido y desde entonces no han tenido se?ales de ellos.JES?S SERRANO REDONDO (CICR)Los cuatro hermanos Chiroma; su abuela, Maryam, junto con Ibrahim Mustafa, su hermano reci¨¦n nacido y su madre, Hafsat, se ponen al d¨ªa en un veh¨ªculo del CICR despu¨¦s de su reencuentro. Tras meses de incertidumbre, finalmente volv¨ªan a casa juntos.JES?S SERRANO REDONDO (CICR)El conflicto armado hizo que Maryam perdiera el contacto con sus cuatro nietos durante casi dos a?os. "Estoy muy feliz de tenerlos de vuelta en nuestra comunidad y verlos jugar en las calles", dice Maryam.JES?S SERRANO REDONDO (CICR)"Cuando sea grande, yo tambi¨¦n quiero ayudar a otros ni?os a encontrar a sus familias", dice Yussuf con su sonrisa constante.JES?S SERRANO REDONDO (CICR)Bakura y Foke Chiroma, de 18 y 15 a?os respectivamente, fueron repatriados de Camer¨²n en agosto. Encontraron a sus hermanos menores, Yussuf y Ahmed, en Mubi pero perdieron contacto de nuevo cuando fueron llevados a un campo de desplazados en Maiduguri. "Un amigo me dijo que deb¨ªa informar de nuestros hermanos desaparecidos a la Cruz Roja para que nos ayudaran a encontrarlos y a nuestra abuela tambi¨¦n", dice Foke. JES?S SERRANO REDONDO (CICR)Debido a la tensi¨®n de no saber d¨®nde se encontraba su hijo primog¨¦nito, Hafsat dio a luz a su beb¨¦ algunas semanas antes de salir de cuentas. "No puedo decir lo aliviada que me sent¨ª cuando vi la foto de Ibrahim", dice Hafsat. "Mi hijo estaba vivo y despu¨¦s de todos estos meses de ansiedad, por fin conoc¨ªa su paradero".JES?S SERRANO REDONDO (CICR)"Estaba muy triste, pero segu¨ª rezando por Ibrahim todos estos meses, con la esperanza de que me llamar¨ªa un d¨ªa para decirme que estaba vivo y de camino a casa para conocer a su nuevo hermano", dice Hafsat.JES?S SERRANO REDONDO (CICR)Con 12 a?os, la aldea de Halima Hauwa fue atacada y ella tuvo que pasar un a?o viviendo en las monta?as. Despu¨¦s pas¨® otros doce meses en un pueblo de la frontera con Camer¨²n, pero un nuevo ataque le hizo huir de nuevo al pa¨ªs vecino.JES?S SERRANO REDONDO (CICR)En el campo de refugiados Minawao en Camer¨²n, Halila pudo de enviar un mensaje a su t¨ªa, Aisha Baha, que vive en Maiduguri. "No pod¨ªa creer que hubieran encontrado a mi t¨ªa. Pero fue a¨²n m¨¢s sorprendente cuando me dijeron que iban a llevarme a su casa", recuerda Halima.JES?S SERRANO REDONDO (CRIC)
