11 fotosLos ¡®resistoleros¡¯ de TegucigalpaSe calcula que s¨®lo en la capital de Honduras hay 3.000 ni?os que viven en la calle. Muchos de ellos deambulan por plazas y esquinas para conseguir alimento y dinero para comprar el disolvente Resistol que esnifar Tegucigalpa - 19 feb 2016 - 12:23CETWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlace'Resistoleros' compartiendo un cigarro. Seg¨²n Casa Alianza, de cada 100 ni?os que viven en la calle, 94 han probado al menos dos drogas. A el pegamento le suele acompa?ar la marihuana, coca¨ªna o 'piedra' (crack).JAVIER ARCENILLAS Una joven pasea por la calle inhalando pegamento. En la capital de Honduras y otras poblaciones del pa¨ªs es una estampa habitual. Cientos de j¨®venes se arrastran con una botella de pl¨¢stico o una bolsa con el disolvente entre sus manos y pegadas a la nariz.JAVIER ARCENILLASLa joven Bel¨¦n Barahona solloza cuando recuerda su situaci¨®n. Se ha cortado el pelo para pasar por var¨®n y no tener m¨¢s problemas a?adidos a la violencia y dureza de la vida en la calle.JAVIER ARCENILLASAlgunos j¨®venes acogidos en el edificio de Casa Alianza en Tegucigalpa (Honduras) bailan en el sal¨®n principal. El objetivo de esta agrupaci¨®n es la integraci¨®n por medio de modificar conductas, reforzar la salud y recuperar la vida socialJAVIER ARCENILLAS Uno de los miembros de Casa Alianza posa frente a un mural elaborado por todos los participantes en las actividades de esta agrupaci¨®n. El tiempo medio de estancia est¨¢ en los tres a?os y la franja de edad a la que se dirigen se sit¨²a entre los 12 y los 18 a?os.JAVIER ARCENILLAS A la adicci¨®n a inhalar disolventes le acompa?a la p¨¦rdida de conciencia y la carencia de autoestima. Muchos de los 'resistoleros' que viven en las calles sufren episodios de violencia y trastornos del sistema nervioso. JAVIER ARCENILLAS Tres 'resistoleros' se enfrentan en plena calle. Los d¨ªas de estos j¨®venes enganchados al pegamento transcurren entre dos actividades: buscar dinero para conseguir el disolvente y esnifarlo. La lucha por la supervivencia en el d¨ªa as d¨ªa genera disputas continuas entre ellos. JAVIER ARCENILLAS En las calles paralelas a plazas se cuenta el dinero obtenido para comprar un bote de Resistol, cuyo precio gira en torno a las 200 lempiras (8 euros). Con un bote pueden satisfacer su dosis diaria unas cinco personas.JAVIER ARCENILLAS Dos miembros de Casa Alianza pelean en el comedor de la agrupaci¨®n. El proceso por el que atraviesan los j¨®venes hasta recuperarse pasa por ataques de ira, autolesi¨®n o abandono temporal del programa. JAVIER ARCENILLAS Un chico y una chica juegan ante la comida que les da el centro. Los dos sexos est¨¢n separados en distintos corredores, aunque la vida all¨ª sea en com¨²n. Una de las finalidades de Casa Alianza es favorecer una convivencia respetuosa y ofrecer educaci¨®n sexual para los adolescentes.JAVIER ARCENILLASUn vendedor callejero se asoma a la puerta de la organizaci¨®n. Seg¨²n Jos¨¦ Guadalupe Ruelas, director de Casa Alianza, cerca de un mill¨®n de ni?os en Honduras no accede a la educaci¨®n secundaria por explotaci¨®n laboral o falta de plazas. JAVIER ARCENILLAS