Las galletas NO son saludables, aunque lleven el logo de los pediatras

Entre dos cajas de galletas, una con el logo visible de la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa y otra sin ¨¦l, ?creer¨ªas que la que lleva el sello es mejor que la que no? Al fin y al cabo, es la asociaci¨®n de los m¨¦dicos a los que conf¨ªas la salud de tus hijos. Si algo lleva su sello, ser¨¢ bueno para ellos. ?O no? Si te fijas en el supermercado, este logo aparece en varias marcas de galletas dirigidas a los ni?os, en algunos yogures o en cereales de desayuno. Y no es el ¨²nico. Puede parecer broma, pero los Bollycao, es decir, boller¨ªa industrial de toda la vida, llevan estampado bien grande el sello de la Sociedad Espa?ola de Diet¨¦tica y Ciencias de la Alimentaci¨®n.

Puede que no lo pienses conscientemente, pero s¨ª puede influir en tu decisi¨®n de compra. Y eso es lo que pretende impedir la Organizaci¨®n M¨¦dica Colegial, la instituci¨®n que agrupa a todos los colegios de m¨¦dicos de Espa?a, cuya Comisi¨®n Central de Deontolog¨ªa ha aprobado recientemente una declaraci¨®n que proh¨ªbe este tipo de uso de los sellos de sociedades m¨¦dicas cient¨ªficas en marcas comerciales al considerar que no es ¨¦tico. Seg¨²n el texto, este tipo de pr¨¢cticas suponen "una forma de publicidad subliminal asociativa en la que se entiende que el producto viene avalado por la sociedad cient¨ªfica cuya imagen o logo figura en el mismo producto o en una imagen en la que aparecen ambos". Os recomiendo que le¨¢is aqu¨ª la declaraci¨®n completa, que es muy clara y no tiene desperdicio.

A la espera de la reacci¨®n de estas instituciones y de comprobar si se dan o no por aludidas, el presidente de la Organizaci¨®n M¨¦dica Colegial, Juan Jos¨¦ Rodr¨ªguez Send¨ªn, es tajante: "Yo les dir¨ªa a los consumidores que duden de la verosimilitud de todos los productos con sellos de sociedades cient¨ªficas, organismos o instituciones m¨¦dicas". Es decir, que en vez de pensar que son mejores que otros productos, "pongan en duda su credibilidad y ventajas". Rodr¨ªguez Send¨ªn, en conversaci¨®n telef¨®nica, insiste en que "los m¨¦dicos no est¨¢n para hablar de estas cosas, sino para recomendar buenas pr¨¢cticas sanitarias y de salud", y que "todo lo dem¨¢s son pamplinas".

La aparici¨®n de logos de sociedades m¨¦dicas cient¨ªficas en marcas comerciales, desde salchichas hasta pa?ales, ha sido denunciada desde hace tiempo por muchos de los propios m¨¦dicos y profesionales de la salud, como reconoce la propia declaraci¨®n de la Organizaci¨®n M¨¦dica Colegial. Uno de los m¨¢s activos ha sido el dietista y nutricionista Julio Basulto, autor de varios libros y colaborador habitual de medios de comunicaci¨®n como Radio Nacional de Espa?a y la Cadena SER. Basulto emprendi¨® hace meses una cruzada contra el uso del sello de la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa en las galletas Dinosaurus. "El sello est¨¢ en un mont¨®n de sitios, pero en este caso me parece especialmente grave porque el alimento est¨¢ dirigido al ni?o, con un formato muy atrayente", me explica. "Un donut todo el mundo sabe que no es saludable, pero la gente cree que las galletas s¨ª lo son".

Me incluyo en ese grupo, como madre de tres ni?os que desayunan galletas (tendr¨¦ que empezar una campa?a de desintoxicaci¨®n). Y es que aunque la informaci¨®n nutricional figura en la caja, s¨®lo la mitad de los consumidores la miran siempre, seg¨²n una encuesta de Eroski Consumer de 2013, y de ellos, s¨®lo la mitad la entienden. Para el 94% de los encuestados, las etiquetas usan t¨¦rminos demasiado complejos. Pero Basulto lo explica de forma muy gr¨¢fica: "La galleta tiene la misma cantidad de grasa que un churro y bastante m¨¢s az¨²car".

As¨ª es. Mirando la etiqueta de las Dinosaurus de chocolate, tienen un 22% de grasa y un 31% de az¨²car, es decir, que si te comes las tres que vienen en cada bolsa, casi te has comido una entera hecha de az¨²car, 13 gramos, que es algo m¨¢s de la tercera parte del consumo diario que recomienda la OMS para los ni?os, 37 gramos (para una dieta de 1.750 calor¨ªas). En el caso de las Dinosaurus normales, el contenido es del 21% en az¨²car, es decir, que cinco de ellas hacen una entera hecha de az¨²car. El porcentaje sube en las Oceanix, a las que est¨¢n enganchados mis hijos, hasta el 27%. "Nos da bastante rabia que se asocien las galletas a algo saludable, cuando contribuyen notablemente a la ingesta de az¨²cares y grasas saturadas en los ni?os y al riesgo de obesidad infantil", dice Basulto.

?Quiz¨¢s al llevar el sello de la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa (AEP) son algo mejores que las dem¨¢s? ?Puede que tengan cantidades menores de grasas y az¨²cares? "No son distintas a las dem¨¢s. Para que est¨¦n buenas tienen que tener grasa y az¨²car", afirma el nutricionista, que advierte de que sumando tasas de sobrepeso y obesidad infantil, "estamos entre el 30,8% y el 44,5%, y el Gobierno no toma medidas serias para revertir esta situaci¨®n, como prohibir la publicidad de alimentos poco sanos en horario infantil".

Y si estos logos son tan pol¨¦micos, ?por qu¨¦ las sociedades m¨¦dico cient¨ªficas permiten su uso? B¨¢sicamente, por dinero. La "colaboraci¨®n con organizaciones, instituciones y empresas" es "una de las fuentes de ingresos econ¨®micos" para poder llevar a cabo "actividades de formaci¨®n, investigaci¨®n, divulgaci¨®n cient¨ªfica y acci¨®n social", explica en respuesta a un cuestionario escrito Antonio Nieto, vicepresidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa. Es decir, que la industria patrocina actividades docentes y formativas de los m¨¦dicos. Y a cambio, las sociedades permiten el uso de sus sellos a determinadas marcas.

"La industria de la alimentaci¨®n se encarga de bombardearnos de modo descarado o subliminal en y entre programas de TV, en pel¨ªculas, en anuncios, etc. para que consumamos sus productos, en lugar de incitarnos a comer sano", critica el pediatra Jos¨¦ Mar¨ªa Paricio. "Esta misma industria organiza pretendidos programas y campa?as antiobesidad (v¨¦ase el programa THAO, patrocinado por fabricantes de chocolate, leches infantiles y bebidas azucaradas) y paga descaradamente a determinadas sociedades cient¨ªficas y sanitarias para que avalen sus productos", a?ade.

La Organizaci¨®n M¨¦dica Colegial, en su declaraci¨®n sobre el tema, establece que "es deontol¨®gicamente aceptable un cierto tipo de promoci¨®n publicitaria, siempre que ello se desarrolle dentro de los siguientes principios: transparencia, asunci¨®n de responsabilidades por parte de los promotores y avalistas y que los beneficios de los productos, sustancias, m¨¦todos o actividades ofrecidos a la poblaci¨®n superen ampliamente a posibles riesgos o efectos adversos". Tambi¨¦n afirma que "es contrario a la Deontolog¨ªa M¨¦dica solicitar o aceptar contraprestaciones a cambio de prestar la imagen de la profesi¨®n m¨¦dica para avalar productos alimentarios de dudosa salubridad".

?Qui¨¦n decide si un producto es saludable o no? El propio texto de la Organizaci¨®n M¨¦dica Colegial cita a las "cl¨¢sicas galletas" como "productos que podr¨ªan ser incluso perjudiciales". "Hay documentos de organizaciones cient¨ªficas, como la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, expertos, grupos, paneles... ", sugiere Francisco Ojuelos, abogado experto en Derecho alimentario. "Se resuelve consultando las fuentes que no tienen conflicto de inter¨¦s".

Sin embargo, desde la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa, niegan la mayor, que el sello en la caja de un producto suponga que lo est¨¦n avalando. "Entendemos que la resoluci¨®n es v¨¢lida para aquellos profesionales m¨¦dicos colegiados que no cumplan con la legalidad. En nuestro caso, ninguna de las actuaciones de la AEP incumple ninguna normativa ya que nuestra asociaci¨®n no concede avales a productos, ni los patrocina, ni presta su logotipo con tal fin", asegura su vicepresidente.

"Los acuerdos de colaboraci¨®n de la AEP con las empresas son claros y trasparentes. El uso del logotipo de la AEP, que se acompa?a siempre de la frase ¡°Entidad colaboradora con la AEP¡±, cuyo contenido y significado es claro, indica que la entidad u organizaci¨®n colabora con nuestra Asociaci¨®n para actividades que est¨¦n alineadas con nuestros fines profesionales o sociales. Es decir, principalmente a trav¨¦s de sus programas de Responsabilidad Social Corporativa, colaboran en el fomento de la formaci¨®n profesional o de la promoci¨®n de la salud infantil", contin¨²a Nieto. Es cierto que los logos llevan esa coletilla de "entidad colaboradora" (que un consumidor normal probablemente no sepa lo que signifique). Pero si os fij¨¢is en las fotos, a un tama?o de letra considerablemente menor.

"Ellos sabr¨¢n lo que hacen, pero la declaraci¨®n es muy clara", afirma Rodr¨ªguez Send¨ªn. El presidente de la Organizaci¨®n M¨¦dica Colegial, que no quiere entrar a valorar casos de marcas y sociedades m¨¦dico cient¨ªficas concretas, dice que ahora hay que esperar a ver c¨®mo reaccionan las entidades que llevan a cabo estas pr¨¢cticas, y en funci¨®n de su respuesta, decidir los siguientes pasos, ya que se trata de una situaci¨®n nueva. El c¨®digo deontol¨®gico es vinculante para todos los m¨¦dicos, ya que han de estar colegiados para poder ejercer. "Las sanciones son a t¨ªtulo individual, no colectivo, pero estos organismos tienen juntas directivas" a cuyos miembros se puede pedir responsabilidad.

Rodr¨ªguez Send¨ªn recuerda que "la medicina no es una actividad mercantil", y que "los m¨¦dicos y la medicina no pueden usar el prestigio de la profesi¨®n para dar ventaja competitiva a una marca comercial". "Nos parece deplorable que entidades m¨¦dicas pongan su logo para dar un marchamo de calidad a productos como galletas o salchichas", concluye.