Despu¨¦s de dos a?os de trabajo, la identificaci¨®n, organizaci¨®n y digitalizaci¨®n el 4 de mayo se podr¨¢ consultar el archivo del autor de Los santos inocentes
El manuscrito 'Cinco horas con Mario'. Delibes contaba con una m¨¢quina de escribir, pero siempre escrib¨ªa a mano con una letra peque?a y cada vez menos comprensible. Detestaba los ordenadores y jam¨¢s tuvo uno. Le parece¨ªan un "sumidero de ideas".Fundaci¨®n Miguel DelibesCarta de identidad escolar de ?ngeles de Castro, su mujer. ?ngeles fue su primera y ¨²nica novia. Tuvieron siete hijos y con apenas 51 a?os su mujer muri¨®. Jam¨¢s volvi¨® a casarse, y en los a?os noventa tuvo fuerzas para homenajearla en 'Mujer de rojo sobre fondo gris'. Dec¨ªa que era su "equilibrio, la mejor mitad de m¨ª mismo".Fundaci¨®n Miguel DelibesDelibes dec¨ªa que lo suyo era la caza menor, "porque una perdiz muerta es un bodeg¨®n y un ciervo muerto un cad¨¢ver". El campo fue un tema recurrente en su literatura, con obras como 'La caza de la perdiz roja', 'El libro de la caza menor'. 'Mis amigas las truchas' o 'Las ratas'.Fundaci¨®n Miguel DelibesArt¨ªculo corregido de Delibes para 'EL PA?S'. Met¨®dico, rescrib¨ªa art¨ªculos ya escritos, como este publicado en las p¨¢ginas de Opini¨®n de este diario en 1990.Fundaci¨®n Miguel Delibes?ngeles de Castro, su mujer, fallec¨ªa el 22 de noviembre a los 51 a?os en una cl¨ªnica de Madrid. "A m¨ª me ocurre una cosa: me parece que hemos pasado de la juventud a la vejez no en poco tiempo, sino en una noche (en un fundido, como las pel¨ªculas), que ayer todav¨ªa est¨¢bamos lidiando con Aparicio, la Vieja (el censor), yendo a Barcelona a operar a Adolfo, y, de repente, ?ngeles ha hecho mutis y nos ha cambiado la decoraci¨®n sin enterarnos", le escrib¨ªa a su editor.Fundaci¨®n Miguel DelibesManuscrito de 'Los santos inocentes'. En Extremadura Delibes conoci¨® a un Azar¨ªas que se orinaba las manos para que no se le agrietasen e impresionado escribi¨® 'Los santos inocentes'. La public¨® a?os m¨¢s tarde, en 1981, cuando Jos¨¦ Manuel Lara, con un suculento anticipo, le convenci¨® de que escribiese algo para Planeta. El editor abri¨® el paquete con la obra de apenas cien folios y se qued¨® petrificado. "Entr¨® en el despacho de Borr¨¢s, su segundo de a bordo, y le dijo: ?Rafael, creo que los santos inocentes hemos sido nosotros!". Fue un exitazo.Fundaci¨®n Miguel DelibesInvitaci¨®n boda. Delibes y su mujer se casaron en el colegio de Lourdes, en Valladolid, donde ¨¦l hab¨ªa estudiado. ?l, poco amigo de formalismos, quiso una boda sencilla. Tanto que ?ngeles iba de negro y acudieron pocas personas.Fundaci¨®n Miguel DelibesMiguel Delibes, con su esposa, ?ngeles de Castro, en los a?os cuarenta. Era ella quien quer¨ªa que el escritor entrase en la Academia y as¨ª el lo hizo pocos meses despu¨¦s de la muerte de ella. "?ngeles, esa mujer maternal y ni?a a la vez, que con su sola presencia aligeraba la pesadumbre de vivir", la describi¨® Juli¨¢n Mar¨ªas en su discurso de respuesta durante el acto.Fundaci¨®n Miguel DelibesArt¨ªculo corregido para 'ABC'. En 1944, entr¨® a trabajar como redactor en el diario 'El Norte de Castilla', para el que ya hab¨ªa hecho caricaturas. Entonces apenas escrib¨ªa. Lleg¨® a ser su director y tras abandonar el cargo sigui¨® escribiendo en prensa. En muchas ocasiones en el diario 'ABC'.Fundaci¨®n Miguel Delibes
