El negocio

El diputado del PP Vicente Mart¨ªnez Pujalte, sin ir m¨¢s lejos (aqu¨ª hay que recordar a aquel cura que cuando quer¨ªa poner un ejemplo dec¨ªa: ¡°Dios, sin ir m¨¢s lejos¡±), ha sido denunciado por cobrar trabajos inexistentes, la famosa asesor¨ªa verbal a una constructora que le pagaba 5.000 euros al mes para aprovechar su ¡°visi¨®n privilegiada¡±, seg¨²n dijo en su momento el consejero delegado. ?En qu¨¦ consiste una asesor¨ªa verbal? El constructor lo explic¨®: tomar con Pujalte un par de caf¨¦s al mes. Pujalte es la persona que mejor bebe caf¨¦ de la historia; bebe el caf¨¦ como lo debe de beber Batman, por eso 5.000 euros al mes por verlo coger dos veces la tacilla es un precio razonable. No es casualidad que terminado el trabajo Pujalte decidiese afeitarse el bigote, pues el barrido del primer sorbo era parte del espect¨¢culo.

La pr¨¢ctica es com¨²n y muchos de los casos de corrupci¨®n incluyen, en su apartado estrella, la prestaci¨®n de ¡°servicios inexistentes¡±, un eufemismo ex¨®tico, pues de lo que se trata es de pagar lo que no se hace. Y revela la formidable salud del empleo espa?ol cuando no se realiza: suelen ser los puestos de trabajo mejor pagados. Hay contratos fijos, temporales y despu¨¦s est¨¢n los contratos que se sit¨²an en un plano superior, destinados a levantar un pa¨ªs imaginario. El Instituto Ben¨¦fico N¨®os recibi¨® 380.000 euros del Gobierno valenciano para organizar la candidatura a los Juegos Europeos; Valencia no opt¨® a los Juegos. Camps lo justific¨® diciendo que como Madrid se presentaba a los Juegos Ol¨ªmpicos Valencia se retir¨® de los Europeos por ¡°lealtad, patriotismo y espa?olidad¡±, las mismas razones por las que cobraba el yerno del Rey. Gonz¨¢lez Pons, m¨¢s realista, dijo que Valencia no se hab¨ªa podido presentar porque N¨®os no hizo nada: se trataba de un trabajo inexistente. El Gobierno pagaba y N¨®os no trabajaba; si se le ocurr¨ªa trabajar, el Gobierno empezaba a pensar mal.

Circula dinero legal, dinero negro y dinero que subvenciona actividades invisibles, como los cursos de formaci¨®n de la Junta de Andaluc¨ªa. Ese dinero no forma parte estrictamente de una econom¨ªa sumergida sino de algo m¨¢s sutil: de una econom¨ªa ficticia y boyante. Cuanto menos se trabaje, m¨¢s dispuesto se muestra a pagar el empresario, especialmente si es a s¨ª mismo a trav¨¦s de sociedades instrumentales. De la investigaci¨®n sobre Mario Conde, por ejemplo, se concluye que el exbanquero repatriaba su fortuna a trav¨¦s de pr¨¦stamos fingidos y trabajos inexistentes. Si uno se presta dinero a s¨ª mismo y se paga su propio trabajo los problemas desaparecen. Si adem¨¢s en ese contrato lo ¨²nico que no es tuyo es el dinero estamos ante un negocio perfecto.