Para Jordi Segura, ¡°el vaso de ca?a ¨Cm¨¢s estrecho en la base, de vidrio grueso y una capacidad de unos 20 centilitros¨C no es el vaso ideal, pero al hostelero le viene bien porque es resistente¡±.¡°Contrariamente a lo que se cree, los vasos gruesos retienen m¨¢s el calor. Cuanto m¨¢s fino sea el vidrio, menos intercambio de temperatura habr¨¢ entre cerveza y ambiente¡±, aseguran desde Riedel.Un cl¨¢sico para ¡°tragos muy alcoh¨®licos, sin hielo¡±, explica Borja Cortina. El tallo o fuste juega un papel fundamental: ¡°Evita que la bebida se caliente, lo que potencia a¨²n m¨¢s el alcohol¡±.Su anchura tiene un porqu¨¦: ¡°Necesitamos un vaso en el que quepan los cubitos¡±, observa Cortina. ¡°Por su boca ancha, tambi¨¦n sirve para c¨®cteles que se preparan directamente en el vaso¡±.Para Cortina, ¡°las copas de bal¨®n son quebradizas, inestables e inc¨®modas, y dejan que se escapen los aromas. Mejor una que se estreche en la boca y ayude a segmentar los sabores de la ginebra¡±.¡°El vaso de tubo es perfecto para los destilados que se mezclan con refresco o zumo¡±, cuenta Segura. ¡°Su vidrio, fino, ayuda a mantener fr¨ªa la bebida durante m¨¢s tiempo y a proteger su sabor y su aroma¡±.Segura propone una copa sencilla, estrecha y que se cierre ligeramente en su parte de arriba. ¡°Dise?ada para degustar albari?os o verdejos, variedades de uva con altos niveles de az¨²car y fruta¡±. Para Cotroneo, ¡°es la cl¨¢sica copa media que siempre hay que tener en casa¡±.M¨¢s ancha, permite captar los matices ¨¢cidos, equilibrando los sabores a fruta y los aromas a barrica. ¡°Hace que todos los aromas se desarrollen¡±, cuenta Segura. ¡°Pero, si no tenemos una as¨ª en casa, es mejor decantar el vino previamente¡±, a?ade Cotroneo.Este cl¨¢sico dise?o, que data de 1958, permite desarrollar al m¨¢ximo todos los sabores: ¡°Su labio superior ligeramente acampanado hacia fuera acent¨²a los aromas de la fruta, manteniendo el equilibrio del vino y conserva su aroma¡±, describe Segura.Desde Riedel recomiendan degustarlo en una copa sin campana, espec¨ªficamente dise?ada para la uva tempranillo y que permite disfrutar de vinos j¨®venes de Rioja y Ribera, y de otros con mayor crianza en barrica, por el contraste entre fondo ancho y boca m¨¢s estrecha.La sumiller Rut Cotroneo destaca que esta copa en forma de uve, fabricada por Gabriel Glas, es ideal para disfrutar de casi cualquier vino. ¡°Es muy vers¨¢til, porque se va cerrando poco a poco y en ella no se pierden ni los aromas de los blancos ni los de los rosados¡±.La cl¨¢sica copa de Jerez, estrecha y de tallo alto, no cuenta con la simpat¨ªa de Cotroneo. ¡°Estos vinos complejos deber¨ªan tomarse en una copa m¨¢s amplia para poder apreciar mejor los aromas. Los catavinos se usan por costumbre, pero no son los id¨®neos¡±.Aunque es habitual servirlo en copa Pompadour (como la de la iustraci¨®n), para Rut Cotroneo no es la mejor: ¡°Su forma abierta hace que el carb¨®nico y los aromas se escapen. Yo lo ofrecer¨ªa en una copa de vino blanco¡¡±.¡°En mi opini¨®n, solo servir¨ªa en esta copa de flauta espumosos sin pretensiones. Es demasiado estrecha y no permite apreciar los matices de un champ¨¢n¡±, sentencia Cotroneo.¡°La copa ancha de tallo corto permite calentar el l¨ªquido con la mano para sacar los aromas¡±, explica Cortina. Riedel ha hecho una versi¨®n m¨¢s esbelta ¡°que hace que percibamos primero las notas dulces con la punta de la lengua, contrarrestando el contenido alcoh¨®lico¡±.Para Cortina, los vasos de chupito, cortos, no permiten apreciar las cualidades de lo que contienen (¡°uno no puede meter la nariz¡±). Es mejor que tengan forma de chimenea para apreciar los aromas con m¨¢s nitidez, aunque no son aptos para tomar el licor de un trago.
