Hadid, un apellido de oro
Son guapos y ricos. La fama de los hermanos Gigi, Bella y Anwar les viene desde la cuna

Gigi Hadid es quien lleva el brillo del apellido familiar, aunque, tras los momentos (muy reveladores) del pasado festival de cine de Cannes de su hermana peque?a, Bella ya comparte el peso de ese ¨¦xito; y el benjam¨ªn, Anwar, acaba de decidir que sigue sus pasos en la industria de la moda. Pero es Gigi, a sus 21 a?os, quien a¨²n recibe mayor atenci¨®n. Por sus 16 millones de seguidores en Instagram; por su aparici¨®n como ¨¢ngel de Victoria¡¯s Secret en el pasado y medi¨¢tico desfile de la firma de lencer¨ªa; por su amistad con Taylor Swift y Kendall Jenner, y por su exnovio el ex One Direction, Zayn Malik. Y ahora compartir el foco con sus dos hermanos solo le suma m¨¢s fama a la supermodelo y, sobre todo, a su apellido de oro.

Ninguno de los tres hermanos ha salido de la nada. Cuando alcanzaron el estatus de celebridad llevaban mucho camino recorrido gracias a sus padres. Los tres hab¨ªan aparecido en televisi¨®n con su madre, Yolanda Hadid, en el reality show The Real Housewives of Beverly Hills. Los tres disfrutaron de una vida privilegiada, en un rancho en Santa B¨¢rbara y en una mansi¨®n en Malib¨², gracias a la fortuna de su padre, el promotor inmobiliario Mohamed Hadid, quien puso en marcha este sue?o dorado desde Palestina, donde el patriarca naci¨® el mismo a?o que lo hac¨ªa el Estado de Israel, en 1948.
La aventura de la familia Hadid comenz¨®, de hecho, gracias a una partida de backgammon que el abuelo de las modelos, Anwar Hadid, gan¨® al embajador americano de Jordania. Aquella victoria garantiz¨® pasaportes a los 10 miembros de la familia, que hab¨ªan pasado unos meses de refugiados y a?os entre L¨ªbano y Siria. Los Hadid emigraron a Estados Unidos y se instalaron en Washington, donde Anwar se convirti¨® en el primer ¨¢rabe de Voz de Am¨¦rica, el servicio de radio y televisi¨®n del Gobierno estado?unidense. Mohamed Hadid ten¨ªa entonces 15 a?os y hablaba ¨¢rabe y mejor franc¨¦s que ingl¨¦s.

Empez¨® a estudiar Ingenier¨ªa en el MIT, pero lo dej¨® cuando a los 20 a?os conoci¨® a sus primeros socios, un ingl¨¦s y un griego, con quienes abri¨® en Rodas (Grecia) la que se convertir¨ªa en una de las discotecas m¨¢s exclusivas de Europa, Aquarius. De ah¨ª salt¨® a Qatar, a aprovechar el boom del petr¨®leo, a trabajar para todos esos nuevos multimillonarios construyendo y dise?ando sus mansiones de lujo. Ah¨ª encontr¨® su vocaci¨®n: creador de sue?os inmobiliarios. De vuelta a Estados Unidos, empez¨® su particular Monopoly. Compr¨® y restaur¨® los hoteles Ritz-Carlton de Washington y de Nueva York; se enfrent¨® al magnate Donald Trump en una lucrativa operaci¨®n en Aspen (Colorado) y venci¨®; y, despu¨¦s de perder el 90% de su fortuna, se march¨® a Los ?ngeles en los noventa a construir mansiones.

En aquel entorno, entre casas de lujo, conoci¨® a la modelo Yolanda van den Herik, quien hab¨ªa salido de su Holanda natal fichada por la mism¨ªsima Eileen Ford ¡ªcofundadora con su marido de la reconocida agencia Ford Models¡ª. Despu¨¦s de 15 a?os sobre las pasarelas internacionales, decidi¨® retirarse para ser ¡°orgullosa esposa y madre¡±. Adopt¨® el apellido Hadid y se dedic¨® a proteger a sus tres hijos. Solo a la mayor, Gigi, le dej¨® hacer unos pinitos en la moda a los dos a?os con Guess Kids. Despu¨¦s se llev¨® a los tres al rancho de Santa B¨¢rbara, que se qued¨® tras el divorcio del empresario inmobiliario en 2000, adem¨¢s de 3,6 millones de d¨®lares (unos 3,2 millones de euros), una pensi¨®n de unos 26.000 euros al mes y la mansi¨®n de Malib¨², a la que se mudaron despu¨¦s.
En el rancho, Gigi y Bella se convirtieron en amazonas. La mayor abandon¨® pronto el sue?o ecuestre cuando, a los 17 a?os, su madre la dej¨® volver a la moda. La peque?a Bella, que hoy tiene 19 a?os y acaba de firmar contrato como embajadora de la l¨ªnea de maquillaje de Dior, esperaba competir este verano en los Juegos Ol¨ªmpicos, pero la enfermedad de Lyme, que comparte con su madre y su hermano, se lo ha impedido y ha decidido centrarse tambi¨¦n en las pasarelas.

El de los Hadid es un apellido que en Hollywood significa belleza y poder. Y su ¨¢rbol geneal¨®gico es tan complejo como el de los Kardashian. Gigi, Bella y Anwar tienen dos hermanas mayores de la primera boda de su padre con Mary Butler: Marielle, autodefinida ¡°como madre de dos ni?os¡±, y Alana, estilista y dise?adora. Adem¨¢s, durante el segundo matrimonio de casi cinco a?os de su madre con el productor musical David Foster, las dos hijas de ¨¦l, las actrices Sara y Erin Foster, agrandaron la familia.
Ahora, separada de Foster desde diciembre, Yolanda ha recuperado el apellido Hadid por sus hijos aunque pronto habr¨¢ otra se?ora con el mismo apellido, cuando el patriarca se case con la iran¨ª Shiva Safai, 30 a?os m¨¢s joven que ¨¦l. Los Hadid crecen y brillan cada vez m¨¢s. Y el patriarca, desde su mansi¨®n Belvedere de 5.000 metros cuadrados en Bel Air, se niega a aceptar que todo lo que reluce es su dinero: ¡°Estoy muy orgulloso de mis hijas. Habr¨¢ miles de chicas m¨¢s guapas que Gigi y Bella, pero ninguna trabaja tan duro¡±, ha dicho a Paris Match. ¡°Se han ganado su ¨¦xito. Me vuelve loco que digan que se lo deben a la fortuna de su padre¡±.
Marcados por la enfermedad
Yolanda Hadid se ha erigido en una especie de portavoz para dar mayor visibilidad a la enfermedad de Lyme, que transmite una garrapata y tiene una sintomatolog¨ªa similar a la malaria. La exmodelo la padece desde 2012, y hace unos meses revel¨® que dos de sus hijos tambi¨¦n la sufren desde ese mismo a?o. El pasado enero public¨® en su Instagram una imagen junto a su hija Bella Hadid mientras esta recib¨ªa el tratamiento para paliar los efectos de la enfermedad, algo que muchos le reprocharon como una maniobra para llamar la atenci¨®n. "Voy a caminar hasta el fin del mundo para encontrar una cura para ellos y millones de personas debilitadas por esta enfermedad invisible", dec¨ªa en el mensaje que acompa?aba la fotograf¨ªa.Gigi, por su parte, intenta ser fuerte por ellos. "Soy la ¨²nica de mis hermanos, mi madre y mi familia que no ha sido afectada por la enfermedad de Lyme. Es dif¨ªcil y simplemente intento darles esperanza, aunque no puedo entender por lo que est¨¢n pasando", cont¨® en una entrevista.
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