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Por qu¨¦ ver otra vez las 20 pel¨ªculas m¨¢s taquilleras del verano en Espa?a En honor a aquellos a?os en los que las mejores pel¨ªculas se estrenaban en julio y agosto, hemos recopilado las 20 m¨¢s taquilleras del verano en Espa?a. Y hemos encontrado motivos para volver a verlas En la vida de toda persona hay marcap¨¢ginas temporales que nada tienen que ver con lo vivido por su protagonista. Qu¨¦ hac¨ªa cuando Espa?a gan¨® el Mundial, d¨®nde estaba cuando abdic¨® el rey o con qui¨¦n vio la demoledora muerte de Mufasa son hechos que dif¨ªcilmente se olvidan. El cine en verano, en aqu¨¦l tiempo en el que no estaba monopolizado por el bucle interminable de estrenos de refritos y sagas, era un acontecimiento memorable. Las pel¨ªculas m¨¢s esperadas del a?o se estrenaban en julio y agosto. Como dir¨ªa cualquier buen abuelo, ya no se hacen pel¨ªculas como las de antes. Si pretende rememorar aqu¨¦l verano en el que Sharon Stone cruz¨® las piernas en 'Instinto b¨¢sico' y todos (ellas y ellos) nos agitamos en la butaca, hemos preguntado al ministerio de Cultura y hemos recopilado las 20 pel¨ªculas m¨¢s taquilleras del verano en Espa?a. Y hemos encontrado motivos para volver a verlas. N¨²mero de espectadores. Con 4.1 millones de espectadores, ocupa el vig¨¦simo lugar de la lista. Quiz¨¢ la primera vez que Spielberg dio rienda suelta a sus sue?os de infancia y la primera vez que se lo pasa bien tras la c¨¢mara. Era como si los c¨®mics que hab¨ªa en casa de nuestros abuelos cobrasen vida y el g¨¦nero de las aventuras resucitase tras un par de d¨¦cadas relegado a la serie B. Indy era un h¨¦roe que siempre parec¨ªa estar de resaca, pero el pulso de su l¨¢tigo nunca fallaba. Faltaba mucho para los antih¨¦roes taciturnos y esta aventura s¨®lo quer¨ªa sacar a correr al ni?o interior que todos llevamos dentro. Lo consigui¨®, y 35 a?os despu¨¦s sigue despert¨¢ndonos ganas de salir a jugar a la calle. Por qu¨¦ debo volver a verla. Ver 'El arca perdida' es lo m¨¢s cerca que est¨¢ un cuarent¨®n de ponerse a jugar con sus mu?ecos.N¨²mero de espectadores. 4.2 millones.
Eso de "personajes opuestos obligados a entenderse" no lo invent¨® Pixar, sino la Biblia cuando Dios les pidi¨® un regalo a Ca¨ªn y Abel sabiendo perfectamente c¨®mo iba a acabar eso. Este recurso es la base del 80% de las pel¨ªculas. Tres cazarrecompensas van en busca de un bot¨ªn y la reposada pero incesante tensi¨®n va asfixiando lentamente su b¨²squeda. Una lecci¨®n de cine que ha sido tan imitada que hoy quiz¨¢ parece una parodia, pero eso es injusto con Sergio Leone.
Por qu¨¦ debo volver a verla. 'El bueno, el feo y el malo' es el m¨¢s deslumbrante ejemplo de que simplificar una historia puede permitir tal energ¨ªa visual que se permite entender la pel¨ªcula hasta sin di¨¢logos.N¨²mero de espectadores. 4.2 millones.
Todos quer¨ªamos ser Indy, pero no pod¨ªamos. Sin embargo, la tercera entrega de la saga nos dio algo con lo que sentirnos identificados: Indy tambi¨¦n tiene un padre que le hace sentir como un fracasado ocasionalmente. La ¨²ltima cruzada es la m¨¢s fren¨¦tica, la m¨¢s divertida y la m¨¢s emotiva de todas.
Por qu¨¦ debo volver a verla. Mezcla el santo grial con cosas nazis, porque es una pel¨ªcula y porque les da la gana, y a?ade a la colecci¨®n de conquistas de Indy a la t¨ªa m¨¢s buena de toda la saga, que tambi¨¦n es la m¨¢s mala. Porque si Spielberg saca a una mujer inteligente en una pel¨ªcula, tarde o temprano acabar¨¢ siendo una bruja.N¨²mero de espectadores. 4.2 millones.
La ¨¦pica de la pel¨ªcula de Wolfgang Petersen era tan postiza como la gente que aclara *modo iron¨ªa on* cuando quiere ser ir¨®nica. Lo ¨²nico ¨¦pico era su duraci¨®n, porque sus h¨¦roes limpios, sus batallas sin sangre y su erotismo para se?oras despertaron suspiros en las salas de cine pero pocas ganas de alcanzar la gloria. Por si fuera poco, lo ¨²nico que respetaban de la 'Iliada' de Homero era culpar de todo a la mujer. Helena de Troya nunca se librar¨¢ de su t¨ªtulo de la primera destrozahogares de la humanidad. El guionista, David Benioff, se resarci¨® d¨¢ndonos en 'Juego de tronos' a las mujeres m¨¢s aguerridas de la televisi¨®n actual.
Por qu¨¦ debo volver a verla. Hab¨ªa maromos para todos los gustos: peludos (Eric Bana), posadolescentes (Orlando Bloom, con una trayectoria plagada de taquillazos brutales que nunca son gracias a ¨¦l) y Brad Pitt, que es un modelo de hombre en s¨ª mismo.N¨²mero de espectadores. 4.2 millones.
La soluci¨®n de Hollywood para la Guerra Fr¨ªa: un se?or elegante con una pasmosa habilidad para salvar el mundo. Sean Connery fue el mejor James Bond, un espejo en el que se han mirado todos los aspirantes a seductores de los ¨²ltimos 54 a?os. El mito se ha adaptado lentamente a los tiempos, pero cada nueva entrega de la saga tiene una deuda con esta primera aventura. Cambian los h¨¦roes y los villanos, pero no los andares, las peripecias de azotea en azotea ni los canalillos. La franquicia redefini¨® para siempre el cine de acci¨®n.
Por qu¨¦ debo volver a verla. '007 contra el Doctor No' ¨Cdirigida por Terence Young¨C cre¨® el g¨¦nero tal y como lo concebimos hoy.N¨²mero de espectadores. 4.3 millones.
El acierto de Kyle Balda y Pierre Coffin, sus creadores, fue desmarcarse de la complejidad emocional de Pixar y apostar por la locura "cartoon" de Bugs Bunny o el pato Lucas. Golpes, persecuciones y ca¨ªdas se suceden en la hist¨¦rica lucha por la supervivencia de unos adorables perdedores a los que nada les sale bien. Y si triunfan, es por pura casualidad. Imposible no sentirse un poco identificado con ellos.
Por qu¨¦ debo volver a verla. La cultura popular parec¨ªa sedienta de nuevos mu?ecos y elev¨® a estos destartalados peones de obra a la categor¨ªa de iconos como Mickey Mouse, Bart Simpson o los Pitufos.N¨²mero de espectadores. 4.4 millones.
Mucho antes de que El canto del loco cantase sobre lo buena que estaba la madre de Jos¨¦, Dustin Hoffman ya hab¨ªa recibido una lecci¨®n de sexo por parte de su futura suegra en la pel¨ªcula de Mike Nichols. El pobre canalla se dejaba querer y lideraba a una generaci¨®n a la que el mundo se le estaba poniendo en bandeja. Su final plantea una pregunta a esa generaci¨®n: ?y ahora qu¨¦? La respuesta era "y ahora nada, se te acab¨® la diversi¨®n". Pero en aquel momento nadie lo sab¨ªa.
Por qu¨¦ debo volver a verla. La se?ora Robinson es un mito er¨®tico generacional no s¨®lo porque estaba prohibida, sino porque su seducci¨®n no era insinuante: era directa, obvia e implacable.N¨²mero de espectadores. 4.5 millones.
Sin m¨¢s pretensi¨®n que la de hacer dinero, es, sencillamente, una pel¨ªcula muy bien hecha. Steve McQueen, Paul Newman, Faye Dunaway, Fred Astaire y O.J. Simpson desfilaban con prestancia atrapados en un rascacielos durante un incendio que convierte lo del Windsor en un chispazo. Dos estudios fueron necesarios para abordar la inversi¨®n, que recuperaron con creces, y se consolid¨® como un angustioso cl¨¢sico de la televisi¨®n de los domingos por la tarde.
Por qu¨¦ debo volver a verla. Aunque siempre se habla de 'El padrino', 'Star Wars' y 'Tibur¨®n' como las fundadoras del cine moderno, 'El coloso en llamas' ¨Cdirigida por John Guillermin e Irwin Allen¨C sigue siendo una obra tremendamente influyente. Ha envejecido visualmente, pero la tensi¨®n sigue siendo abrumadora.N¨²mero de espectadores. 4.7 millones.
Aquel verano la Expo de Sevilla y los Juegos de Barcelona caldearon un fervor colectivo que llev¨® a los espa?oles a creerse la naci¨®n m¨¢s pr¨®spera del mundo. Mientras los ni?os estaban de campamento los pap¨¢s abarrotaron unas salas de cine cuyo aire acondicionado nunca era suficientemente fr¨ªo para aplacar el fuego de un thriller en el que todo el mundo sudaba sin parar. Catherine Trammell era claramente la asesina, pero el cuerpo de polic¨ªa estaba cegado por el cuerpo del delito.
Por qu¨¦ debo volver a verla. 'Instinto b¨¢sico' convirti¨® a Sharon Stone en el mito er¨®tico de la d¨¦cada y nos ense?¨® que hay m¨¢s de una postura en el sexo. Todos los nacidos a partir del 93 son un poco hijos de Paul Verhoeven.N¨²mero de espectadores. 4.8 millones.
Cuando una saga pone al villano a colaborar con los h¨¦roes es que ya van escasos de ideas. A estas alturas, la tercera entrega pod¨ªa sacar a Johnny Depp bailando polka durante dos horas y habr¨ªa recaudado lo mismo. Orlando Bloom abandon¨® el barco, Keira Knightley tambi¨¦n. Ninguno parec¨ªa pas¨¢rselo demasiado bien. Bloom, sin embargo, volver¨¢ para la quinta, ahora que ya sabemos que rema a estribor.
Por qu¨¦ debo volver a verla. Las pel¨ªculas de 'Piratas del Caribe' se convirtieron en una tradici¨®n familiar y no se vieron afectadas por caer en un error que ninguna aventura con gente saltando entre barcos deber¨ªa permitirse: ser aburridas.N¨²mero de espectadores. 4.9 millones.
En esta vida y en la otra. El triunfo de M¨¢ximo D¨¦cimo Meridio fue tambi¨¦n el nuestro, gracias al aplomo y la vulnerabilidad de un Russell Crowe que devoraba la pantalla con actitud de "no me toques los huevos que vengo calentito". Despu¨¦s surgieron muchos imitadores, que ignoraron que la ¨¦pica de 'Gladiator' ¨Cdirigida por Ridley Scott¨C no radicaba en la c¨¢mara lenta, sino que nac¨ªa de la empat¨ªa que Crowe despertaba.
Por qu¨¦ debo volver a verla. Los hombres tan ¨ªntegros como M¨¢ximo no existen, pero es emocionante creer que s¨ª.N¨²mero de espectadores. 5 millones.
Cuando ya no quedaba nadie por leerse el libro apareci¨® la pel¨ªcula. Todo el mundo fue a verla, los que hab¨ªan devorado el libro en el metro y los que hab¨ªan pasado del fen¨®meno pero sent¨ªan cierta curiosidad. Su ¨¦xito, eso s¨ª, no sirvi¨® para que el mundo dejase de llamar a Audrey Tatou "Amelie" y mira que ella corr¨ªa de un lado a otro con convicente cara de preocupaci¨®n.
Por qu¨¦ debo volver a verla. La pel¨ªcula de Ron Howard era tan fiel al original que resultaba igual de intrigante y efectiva, y hasta pod¨ªamos adivinar con qu¨¦ revelaci¨®n terminaba cada cap¨ªtulo de la novela.N¨²mero de espectadores. 5.25 millones.
En Espa?a nuestro superh¨¦roe favorito ha sido Spiderman, de toda la vida. Por eso nadie quiso perderse su primera gran aparici¨®n en cines, aunque cada actor pareciese estar en una pel¨ªcula distinta (y no todas ellas buenas). El de Sam Raimi no era un Spiderman perfecto, pero s¨ª sent¨® las bases del tono y el esp¨ªritu todo el cine superheroico posterior y, sobre todo, fertiliz¨® el terreno para una secuela que convierte en adolescente durante dos horas a todo el que la ve.
Por qu¨¦ debo volver a verla. Cuando Peter Parker se pon¨ªa la m¨¢scara y ocultaba su cara de panoli, volaba por Nueva York con unos saltos vertiginos que eran tal y como los hab¨ªamos imaginado de peque?os. Y esa es la esencia del cine: llevarnos a lugares que s¨®lo podemos imaginar.N¨²mero de espectadores. 5.5 millones.
Aunque ahora cueste reconocer a Orlando Bloom con tanta ropa, su declive profesional empez¨® aqu¨ª, cuando Johnny Depp le rob¨® la pel¨ªcula en su cara.
Por qu¨¦ debo volver a verla. La segunda parte de 'Piratas del Caribe' encontr¨® un tesoro que Hollywood sigue persiguiendo: atraer a padres, ni?os y abuelos en masa a disfrutar con unas aventuras tan simp¨¢ticas y grandiosas como olvidables. Hoy nadie distingue las pel¨ªculas de esta saga entre s¨ª, pero Disney sigue contando billetes.N¨²mero de espectadores. 5.9 millones.
Llevamos 40 a?os mirando alrededor cada vez que nos ba?amos en el mar. Por si acaso. Y todo por culpa de un bicho que apenas aparece en la pantalla, pero que surca el agua acompasado por una m¨²sica que te avisa de que no quieres que salga. A Steven Spielberg se le escacharr¨® el mu?eco y tuvo que reescribir su western crepuscular por las noches durante el rodaje.
Por qu¨¦ debo volver a verla. 'Tibur¨®n' es aterradora porque reconoces ese escenario de playa atestada de ni?os pesados y sientes que podr¨ªa pasarte a ti, pero adem¨¢s es disfrutable porque le est¨¢ pasando a otros.N¨²mero de espectadores. 5.9 millones.
Nada volvi¨® a ser igual tras aquel verano. Los dinosaurios empezaron a molar y los productos oficiales de la pel¨ªcula se agotaban en las tiendas, condenando el cine comercial a los acuerdos con compa?¨ªas de juguetes que obligan a los estudios a rodar sus pel¨ªculas a contrarreloj. A Steven Spielberg su criatura le sali¨® extraordinaria y su respeto por el espectador ha mantenido a los bichos vigentes m¨¢s de dos d¨¦cadas despu¨¦s.
Por qu¨¦ debo volver a verla. Todo el mundo tiene su propia historia con 'Parque Jur¨¢sico', porque la excitaci¨®n ante la primera aparici¨®n del tiranosaurio (tuvieras la edad que tuvieras) es imposible de olvidar.N¨²mero de espectadores. 6 millones.
Ir a visitar a los suegros siempre es un marr¨®n, pero tener que explicarles que tu beso de amor verdadero ha convertido a su hija en una ogra dan ganas de no casarse nunca. El siglo XXI ya no pod¨ªa colar a una hada madrina tan altruista y aqu¨ª era una villana dispuesta a todo para que su hijo heredase tierras. Visto lo visto, Shrek hizo bien en quedarse en su ci¨¦naga. Daba asco, pero ah¨ª ¨¦l era el rey.
Por qu¨¦ debo volver a verla. Andrew Adamson, Kelly Asbury y Conrad Vernon, creadores de 'Shrek', introdujeron los pedos y los eructos en el cine de animaci¨®n y lo celebramos con tal pasi¨®n que casi nos sorprende que en 'Frozen' Elsa no salga cort¨¢ndose las u?as.N¨²mero de espectadores. 6.25 millones.
Si internet hubiera sido masiva aquel verano, los chats del IRC habr¨ªan ardido en discusiones eternas. George Lucas quer¨ªa mostrar las virguer¨ªas visuales que pod¨ªa lograr y convirti¨® las aventuras estelares en un lamento sobre la corrupci¨®n pol¨ªtica intergal¨¢ctica y las fecundaciones m¨¢gicas. Si millones de espectadores ¨¦ramos felices con aquello de "los buenos son muy buenos y los malos llevan capa", no hab¨ªa ninguna necesidad de darnos m¨¢s explicaciones.
Por qu¨¦ debo volver a verla. 'La amenaza fantasma' es como un videojuego pixelado en el que ni siquiera puedes manejar a los personajes, que toman una decisi¨®n est¨²pida tras otra sin saber nunca ad¨®nde mirar.N¨²mero de espectadores. 6.3 millones.
Fueron necesarios 27 guionistas para esculpir la m¨¢s cruel y festiva met¨¢fora sobre la monarqu¨ªa parlamentaria. En los 90 la correcci¨®n pol¨ªtica era gaseosa y el villano ten¨ªa acento brit¨¢nico, mientras que sus secuaces las hienas del gueto eran un latino, una negra y un disminu¨ªdo ps¨ªquico con una asombrosa facilidad para desfilar alineadas cuales hordas nazis. Disney no se atrevi¨® a dar luz verde al proyecto hasta que alguno de sus guionistas tuvo la brillante idea de introducir a Tim¨®n y Pumba para distraer la atenci¨®n tras la salvaje muerte de Mufasa.
Por qu¨¦ debo volver a verla. La filosof¨ªa de la pel¨ªcula quita hierro a cualquier problema vital. ?Que tu t¨ªo ha asesinado a tu padre y ha intentado culparte? Pues Hakuna Matata, vive y s¨¦ feliz.N¨²mero de espectadores. En el n¨²mero uno y con 6.9 millones de espectadores, 'La guerra de las galaxias' es la pel¨ªcula m¨¢s taquillera de la lista.
Las colas que daban la vuelta a la manzana el verano del 77 estaban compuestas en su mayor¨ªa por espectadores que quer¨ªan repetir, a¨²n aturdidos por su primera inmersi¨®n en el universo de 'Star Wars'. Con el paso del tiempo la pureza de esp¨ªritu de Luke ha perdido garra y disfrutamos m¨¢s con la caradura de Han Solo, padre de todos los canallas del cine. George Lucas se acab¨® volviendo un megal¨®mano cascarrabias, pero 'La guerra de las galaxias' le canoniz¨® como el primer gran visionario del cine moderno.
Por qu¨¦ debo volver a verla. No hacen falta excusas para volver a la Estrella de la Muerte, sobre todo porque la magia de las haza?as de Luke Skywalker sigue funcionando 40 a?os despu¨¦s.