9 fotos¡°Una voz no se escucha, pero la de un grupo s¨ª¡±Nepal cuantific¨® en entre 16.000 y 17.000 las personas que fueron v¨ªctimas de trata entre 2013 y 2015. Algunas v¨ªctimas se unen para hacer valer sus derechos Katmandu - 31 ago 2016 - 09:01CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceBimala ayuda a rellenar una denuncia de un ciudadano que no sabe escribir en la comisar¨ªa de Bhaktapur, en el Valle de Katmand¨². Su trabajo consiste en asesorar a los ciudadanos que quieren registrar denuncias en casos que van desde violencia dom¨¦stica a robos o desaparici¨®n de personas. De las 2.000 denuncias que se registran en esta comisar¨ªa, las trabajadoras de SASANE gestionan unas 100. Elena del EstalIndira (izquierda) y Aruna (derecha) trabajan en la oficina central de SASANE en Katmand¨². ¡°Si est¨¢s enfermo puedes ir al doctor... y si sobrevives a un crimen como el nuestro, ?qu¨¦ haces? A trav¨¦s de los tribunales, de la polic¨ªa no conseguimos justicia¡±, dice Indira Gurunj. Elena del EstalTodas las mujeres que trabajan en SASANE son supervivientes de la trata de personas. En la imagen, preparan juntas el almuerzo en las instalaciones que la ONG tiene en Katmand¨². ¡°Son todas de fuera de Katmand¨². Cuando fueron rescatadas no sab¨ªan hablar ingl¨¦s ni utilizar un ordenador¡±, explica Shyam Pokharel, fundador de la ONG.Elena del EstalAliza sirve el pollo para el almuerzo que comparten todos los trabajadores de SASANE en su oficina de Katmand¨². Desde que la ONG se estableciera en 2008, m¨¢s de 200 chicas se han formado en conocimientos jur¨ªdicos para poder ejercer de asistentes legales en una treintena de comisar¨ªas del Valle de Katmand¨² y de la ciudad tur¨ªstica de Pokhara.Elena del EstalLas trabajadoras de SASANE durante una reuni¨®n para preparar una exposici¨®n en la que explican la problem¨¢tica del tr¨¢fico de mujeres y menores en Nepal y el trabajo que hacen en la organizaci¨®n. A la izquierda, en la pared se puede leer ¡°La hermandad de las supervivientes¡±. Elena del EstalMachhindra prepara sus cosas para irse a casa tras un d¨ªa de trabajo en la oficina central de SASANE en Katmand¨². ¡°Las v¨ªctimas de trata tienen generalmente entre 7 y 23 a?os. A los traficantes les gusta que parezcan ind¨ªgenas, con rasgos tibetanos. Las nepal¨ªes de zonas remotas no hablan siquiera nepal¨ª. Son inocentes y honestas¡±, cuenta Shyam Pokharel.Elena del EstalDurante jornadas de siete u ocho horas, Machhindra se dedica a digitalizar la informaci¨®n que ha sido recogida en las distintas comisar¨ªas donde trabajadoras de SASANE prestan su ayuda como asistente legales. Elena del EstalAsha (centro) bromea con Vanesa (izquierda), una chica australiana que durante varias semanas est¨¢ en SASANE con un programa de voluntariado para ayudar a preparar documentos en ingl¨¦s. Entre las chicas se ha creado un nexo de hermandad: ¡°Una voz no se escucha, pero la de un grupo s¨ª¡±, cuenta Indira Gurunj. Elena del Estal¡°Protej¨¢monos a nosotras mismas¡±, se lee en una de las paredes de la oficina central de SASANE en Katmand¨². En un informe reciente, la Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos de Nepal cuantific¨® en entre 16.000 y 17.000 las personas que fueron v¨ªctimas de trata entre 2013 y 2015.Elena del Estal