10 fotosEl legado de la guerra en LaosDurante la Guerra de Vietnam, se arrojaron sobre Laos al menos 270 millones de submuniciones en racimo. 07 sept 2016 - 14:44CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceDurante la Guerra de Vietnam (1963 a 1972), se arrojaron sobre Laos al menos 270 millones de bombas de racimo. En la foto, un monje budista posa junto a bombas sin explotar lanzadas por las Fuerzas A¨¦reas de los Estados Unidos, en Kalispell (Laos).JORGE SILVA (REUTERS)Estas bombas han mutilado o matado a m¨¢s de 20000 laosianos desde el fin oficial de la guerra. En la im¨¢gen un patio se utiliza como dep¨®sito de bombas sin explotar, en Kalispell (Laos).JORGE SILVA (REUTERS)Aproximadamente un 80% de los habitantes del pa¨ªs se dedican a la agricultura de subsitencia en tierras llenas de dispositivos sin explotar. En la im¨¢gen, trabajadores p¨²blicos juegan a la petanca en un patio utilizado como dep¨®sito de bombas lanzadas por Estados Unidos, en Xieng Khouang (Laos).JORGE SILVA (REUTERS)De acuerdo a la organizaci¨®n 'Legado de la guerra', una organizaci¨®n centrada en abordar el impacto de las bombas lanzadas sobre Laos, es necesario un gasto de 25 millones de d¨®lares al a?o durante una d¨¦cada para evitar m¨¢s v¨ªctimas. En la im¨¢gen, Soud, de 40 a?os de edad, tuvo la mala suerte de que su pala golpease una bomba hace 30 a?os mientras trabajaba en el campo.JORGE SILVA (REUTERS)Debido a las bombas, el turismo se ve muy afectado ya que se desaconseja totalmente a los turistas explorar la zona debido a un alto riesgo de explosi¨®n. En la im¨¢gen, un ni?o posa frente a una casa construida sobre bombas, en la provincia Xieng Khouang, en Laos.JORGE SILVA (REUTERS)El pito de los detectores de metal interrumpen la tranquilidad de los habitantes de forma constante ya que los t¨¦cnicos recorren las laderas en la b¨²squeda de bombas sin explotar. En la im¨¢gen, una bomba sin explotar se usa como decoraci¨®n en un hotel de Kalispell (Laos).JORGE SILVA (REUTERS)El Gobierno de Laos, dice que un sondeo total llevar¨ªa cinco a?os en completarse, pero el especialista en detonaciones Phouttasone Nounthabout, afirma que es practicamente imposible finalizar dicho sondeo de forma satisfactoria. En la im¨¢gen, un t¨¦cnico sujeta un gatillo antes de la destrucci¨®n de bombas sin explotar.JORGE SILVA (REUTERS)Mientras el n¨²mero total de bajas ha disminuido (en 2008 se registraron m¨¢s de 300 en comparaci¨®n con las 42 v¨ªctimas durante el 2015), el porcentaje de ni?os heridos o muertos ha subido. En la im¨¢gen, una mujer posa a la entrada decorada con bombas de su casa.JORGE SILVA (REUTERS)Seg¨²n los locales, hasta que no se limpie el terreno completamente, los ni?os estar¨¢n expuestos al peligro. En la foto, una mujer pasa al lado de un restaurante decorado con bombas sin explotar.JORGE SILVA (REUTERS)Debido a la pobreza de la zona, las personas intentan aprovechar cada oportunidad. En la im¨¢gen, un hombre hace cucharas derritiendo bombas sin explotar.JORGE SILVA (REUTERS)