Portugal ampl¨ªa el cerco al tabaco y al ¡®vapeo¡¯
Desde enero el exterior de hospitales y escuelas estar¨¢ libre de todo tipo de humos
Portugal es el pa¨ªs m¨¢s viejo de Europa, pero el objetivo final parece ser su inmortalidad. Dos recientes leyes van en esa direcci¨®n. Desde el pr¨®ximo mes ser¨¢ obligatorio en todos los servicios privados (ya exist¨ªa en los p¨²blicos) dar preferencia en la cola a embarazadas, viejos o minusv¨¢lidos. Desde octubre, bajo pena de multas se pondr¨¢ en pr¨¢ctica lo que antes se consegu¨ªa con educaci¨®n. Si esa ley no ha levantado pol¨¦mica alguna, no ocurre lo mismo con el nuevo cerco al tabaquismo. A partir de A?o Nuevo el exterior de hospitales y escuelas ser¨¢n zonas libres de humos... y vapores. Los fumadores no podr¨¢n aliviarse en el cenicero colocado en la misma puerta del hospital; deber¨¢n alejarse hasta una distancia suficiente para que el humo que exhala no vuelva al interior del local, concepto dif¨ªcil de cumplir pues depender¨¢ del viento reinante, entre otros factores.
La prohibici¨®n de fumar fuera choca con el permiso para fumar dentro. Hace 10 a?os, Portugal sigui¨® a Espa?a en la primera ley antitabaco que imped¨ªa fumar en locales cerrados salvo con ciertas condiciones, a las que se acogieron muchos restaurantes; a?os despu¨¦s, Espa?a acab¨® con las excepciones, pero Portugal no lo hizo y hoy en d¨ªa se puede fumar en la mayor¨ªa de restaurantes lusos. En el periodo 2006-2014, seg¨²n el Eurobar¨®metro, los fumadores espa?oles han ca¨ªdo (en el buen sentido de la palabra) cinco puntos, mientras que han aumentado un punto los portugueses.
Tampoco es que la pol¨¦mica de la nueva ley antitabaco haya saltado por la distancia a la que puede llegar el humo, sino por ampliar la restricci¨®n al cigarro electr¨®nico. Si no hay enmienda en la tramitaci¨®n parlamentaria, el humo del tabaco queda equiparado al vapor del cigarro electr¨®nico, y su usuario deber¨¢ refugiarse para aplicarse el remedio a su exvicio en las jaulas habilitadas para fumadores. Estos vaporizadores no podr¨¢n publicitarse y llevar¨¢n etiquetas con la advertencia del peligro que entra?a fumar, aunque a¨²n se desconoce si ser¨¢ ¡°el tabaco mata¡± o ¡°el vapor mata¡±.
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