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8 alimentos 'antimichelines': no hacen milagros, pero algo es algo Que si 2 cent¨ªmetros, que si sacian mucho, que si hay sospechas... Comer engorda, pero una dulce posibilidad antigrasa resta culpa con estos ingredientes Y tambi¨¦n los refrescos de cola con cafe¨ªna y sin az¨²car. La cafe¨ªna es una de las sustancias tradicionalmente asociada a la reducci¨®n de peso porque acelera la oxidaci¨®n de las grasas y la termog¨¦nesis (la capacidad del cuerpo para generar calor). Cient¨ªficos japoneses han demostrado que, incluso en dietas altas en grasa, aumentar el consumo de cafe¨ªna ayuda a quemarlas debido a la liberaci¨®n de sustancias estimulantes como la adrenalina. Pero ojo, modere el n¨²mero de caf¨¦s: privarse de sue?o engorda . Pese a que a algunas personas la lactosa pueda provocarles cierta hinchaz¨®n intestinal debido a los gases, este alimento ayuda a deshacerse del tejido adiposo. As¨ª lo sostiene un estudio de la Universidad de McMaster (Canad¨¢) que demostr¨® que elevar el consumo de l¨¢cteos (con un poco de ejercicio f¨ªsico, dicho sea de paso) provocaba un aumento de la masa muscular y un descenso de l¨ªpidos en mujeres menop¨¢usicas y obsesas. Si el caf¨¦ es ya un buen camino para quemar michelines, el t¨¦ verde supone meterse en autopista a todo gas. Y todo porque sus polifenoles, adem¨¢s de ser excelentes contra la oxidaci¨®n celular, potencian los efectos termog¨¦nicos de la cafe¨ªna, seg¨²n un art¨ªculo publicado en el ¡®International Journal of Obesity¡¯ . Sin embargo, los efectos de este brebaje no son concluyentes para todos los investigadores: cient¨ªficos como el bioqu¨ªmico Michael Boschmann reconocen que, si bien esos efectos antigrasa se corroboran en peque?os grupos de estudio, hacen falta investigaciones a mayor escala para adjudicarle con garant¨ªas ese poder quemagrasa ?Le gusta la comida picante? Est¨¢ de enhorabuena. Un estudio liderado por David Heber, de la Universidad de California (EE UU), sostiene que la capsaicina de este condimento estimula el consumo de grasa corporal. Tal vez usted jam¨¢s haya o¨ªdo hablar de semejante sustancia, pero ya sab¨ªa de su existencia: es la responsable de ese acaloramiento que producen los platos de la cocina mexicana y la que ha abierto numerosas l¨ªneas de investigaci¨®n para su efecto adelgazante. Falta evidencia, pero, mientras tanto, a nadie le amarga un chile. Uno de los grandes obst¨¢culos al ponerse a dieta es la sensaci¨®n de hambre que pone a prueba la voluntad de quienes quieren perder unos kilos de m¨¢s. Desde el departamento de Nutrici¨®n y Fisiolog¨ªa del Ejercicio de la Universidad de Missouri (EE UU) insisten en el poder saciante y la disminuci¨®n del deseo de comer de quienes llevan una dieta alta en prote¨ªnas magras, como la pechuga de pollo y la carne roja sin grasa. ?Es usted de los que se despierta a medianoche con una gazuza voraz? Sepa que aumentar en 25-30% las calor¨ªas procedentes de las prote¨ªnas reducen hasta en un 60% los picos de hambre nocturna y puede ayudarle a perder hasta medio kilo a la semana. Ponerse a dieta suena a llevar tristeza asc¨¦tica a la mesa en forma de infinitas hojas de lechuga. Ali?arlas con vinagre, adem¨¢s de darles vidilla, le ayudar¨¢ a plantarle cara a los michelines. As¨ª lo sostienen investigadores japoneses : los sujetos de estudio que aumentaron su consumo de vinagre durante 12 semanas redujeron su peso corporal, la grasa visceral y la circunferencia de la cintura. El responsable: el ¨¢cido ac¨¦tico, ese que le da su caracter¨ªstico sabor. Atenci¨®n: solo vale el vinagre de vino de toda la vida (una cucharada aporta unas 3 calor¨ªas). Si le da por el bals¨¢mico estar¨¢ sumando hasta 14 calor¨ªas. Conocida popularmente por ser el ingrediente favorito de las mermeladas brit¨¢nicas, esta variedad tambi¨¦n denominada 'citrus x aurantium' o Naranja de Sevilla contiene fenilefrina , una sustancia que incrementa el gasto metab¨®lico en reposo y ocasiona una moderada p¨¦rdida de peso. La cara B de esta fruta es que puede conducir a la hipertensi¨®n, seg¨²n el Departamento de Salud de EE UU. Este c¨ªtrico tambi¨¦n aporta su granito de arena frente a las grasas. Sobre todo, ayuda a reducir los niveles de colesterol en sangre y la presi¨®n arterial. ?Pero adelgaza o no? Pues un poco. Un estudio de la Universidad de Arizona (EE UU), con personas con sobrepeso, revela que tras seis semanas incluyendo pomelos en el men¨² perdieron hasta 2,45 cent¨ªmetros de cintura. No es para lanzar cohetes, pero algo es algo.