No te presentes para Navidad
I
Cuando asesinaron a la amante de su marido, Leticia dijo:/
¨CMax, que tu hija se quede con su abuelita. Aqu¨ª ?qui¨¦n la criar¨¢? Apenas podemos con Fabrizio. Adem¨¢s, ya est¨¢ acostumbrada con esa se?ora y no contigo. Traerla ser¨ªa peor.
¨CPero, Lucky, no me da confianza dejar a Sof¨ªa con la abuela ¨Cdijo Max.
¨C?Por qu¨¦?
¨CEs que es una asidua de casinos y verbenas y la encarga a Sofi con la vecina.
¨CAj¨¢ ¨Cdijo Lucky¨C. Como la finada.
¨CAdem¨¢s, creo que le habla mal de m¨ª a Sof¨ªa.
¨C?Miserable!
¨CEst¨¢ resentida, pues.
¨CPero t¨² dijiste que antes era tratable.
¨CS¨ª, hasta chup¨¢bamos. Cuando visitaba a Monique y a Sofi, le llevaba una garrafita de moscato y la se?ora Altagracia se picaba. Una vez bailamos el Noa Noa.
¨C?Habrase visto¡!
¨CPero es una rayada tambi¨¦n. A ella se le ocurri¨® que le ocult¨¢ramos a Sof¨ªa que a Monique la mataron. Dijo que se traumar¨ªa, que necesitar¨ªa psic¨®logos, que le dij¨¦ramos que viaj¨® a Chile, que esper¨¢semos hasta que Sof¨ªa pudiera entender lo que es la muerte de una madre.
¨C?Y t¨² aceptaste esa vaina?, br¨®der.
¨CS¨ª, pues. La cagu¨¦, ?no?
II
Leticia sospech¨® la infidelidad cuando Max dormido pronunci¨®: ¡°Mmmm, Monique¡±.
¨CExageras, Leti ¨Creplic¨® Max¨C. No conozco a ninguna Monique.
Pero al tiempo Monique telefone¨® a Leticia y le dijo:
¨CMax me ha pre?ado.
Entonces Leticia y sus padres corrieron a Max de la casa.
¨CMe enamor¨¦ de Monique ¨Cdijo Max¨C. Tuvimos una ¨¦poca bonita, de pajaritos. Hasta planeamos abrir un negocio de estampados. Y Monique tiraba como nadie, Lucky. ?Qu¨¦ hembra! Era un demonio en la cama.
Pero, como al a?o de nacer Sof¨ªa, Monique se desapareci¨® una semana. Luego Max se enter¨® de que ella se la pas¨® con La Esfinge, un punk de Atocongo, y la abofete¨® en plena avenida Pachac¨²tec.
Despu¨¦s Max se enred¨® con una de 48 que le financiaba el trago y la coca, una tal Promoci¨®n Reynoso. Max visitaba a sus hijos con resaca. Incluso, cierta vez, Fabrizio le pregunt¨®:
¨CPapi, ?por qu¨¦ hueles a gasolina?
Pero cuando le cortaron la cara despu¨¦s de bronquearse con pico de botella en la discoteca new wave Vampiros, Max se tranquiliz¨®. A pedido de Leticia, asisti¨® a Alcoh¨®licos An¨®nimos con Lucky, se acerc¨® al Cristo de Pachacamilla. Luego le dijo a Monique: ¡°No debo verte m¨¢s¡±, y regres¨® a vivir con Leticia y Fabrizio.
Monique se molest¨® horrible y le prohibi¨® a Max visitar a Sof¨ªa.
III
Max se sent¨ªa satisfecho con las compras, pero algo le inquietaba: que Sof¨ªa, para Nochebuena, quisiera ver a su madre.
La Navidad de 2013, Max no vio a Sof¨ªa. Monique se la llev¨® a las playas de Trujillo con La Esfinge. Aquella vez, Max y Leticia cenaron chancho al palo, panet¨®n Ricco¡¯s y brindaron con sidra sin alcohol.
La Nochebuena de 2014, Max tampoco vio a su hija. El 24 se puso a tomar menjunje con Lucky y unos proxenetas en el Maquisapa. Se cruz¨® con Chuchuhuasi y se durmi¨® sobre la barra. Lucky y los cafichos tuvieron que cargarlo a un taxi. Lo enviaron al depa de Promoci¨®n Reynoso.
Este 2015, Max quer¨ªa recomenzar todo con Sof¨ªa. Planeaba llev¨¢rsela a vivir con Leticia y Fabrizio en 2016. Incluso habl¨® con Lucky ¨Cocasional alba?il¨C para construir un dormitorio. Pero antes Max necesitaba reconciliarse con la se?ora Altagracia. No quer¨ªa llegar a un juicio por la custodia. Pasaba que Altagracia cre¨ªa que Max era en algo culpable de la muerte de Monique. Ni quer¨ªa verlo.
El 22 de diciembre de 2015, Max se dirigi¨® a Mesa Redonda por unos adornos para el ¨¢rbol y el nacimiento que le pidi¨® Leticia, un sable l¨¢ser de imitaci¨®n y un dinosaurio para Fabrizio, una mu?eca de Frozen tambi¨¦n falsa para Sof¨ªa y un wok chino de acero inoxidable para Altagracia.
Caminando por ese mercadillo, Max record¨® que hac¨ªa a?os all¨ª hubo un incendio en el que murieron cientos de personas. El fuego comenz¨® cuando un vendedor probaba un volc¨¢n que lanzaba luces de colores. Pas¨® que una chispa le cay¨® a un puesto de cohetones y al instante centenares de explosiones se desataron. En minutos, las llamas se propagaron por las galer¨ªas y jirones adyacentes colmados de transe¨²ntes. Los bomberos no llegaron a tiempo por los ambulantes que copaban las calles en aquella temporada navide?a. Max recordaba las im¨¢genes del siniestro. Gente avent¨¢ndose de las azoteas. Un Pap¨¢ Noel en llamas. Cuerpos hechos chicharr¨®n amontonados. Un infierno incandescente.
Ahora una placita con una Virgen recordaba a los fallecidos. Por esa tragedia, se prohibi¨® la venta de cohetes en la zona, pero nadie obedec¨ªa. Sobornaban a los inspectores y polic¨ªas. Max, al tanto de esto, adquiri¨® una docena de pirot¨¦cnicos. Sof¨ªa se los pidi¨® por Facebook.
Max se sent¨ªa satisfecho con las compras navide?as, pero algo le inquietaba: que Sof¨ªa, para Nochebuena, quisiera ver a su madre.
IV
Max se cas¨® con Leticia embarazada en un matrimonio masivo en Villa Mar¨ªa del Triunfo. Meses despu¨¦s, su primog¨¦nita naci¨® pero vivi¨® solo un d¨ªa. Los m¨¦dicos les dijeron que no guardaran esperanzas, pero igual Max y Leticia le imploraron al Divino Ni?o Jes¨²s por un milagro navide?o.
Luego Leticia se concentr¨® en su trabajo en Topy Top. Le prescribieron escitalopram y clonazepan. Se volvi¨® distante y fr¨ªa con Max. Aun as¨ª, se embaraz¨® y, como tem¨ªa perder otra vez a su beb¨¦, se cuidaba. No acompa?aba a Max de juerga. Por eso, no estuvo con ¨¦l en el concierto de Armaged¨®n donde Max conoci¨® a Monique. En realidad, Monique ya le hab¨ªa echado el ojo a Max en un bar de Alipio Ponce y se le mand¨® con todo. Le dijo cosas sucias.
Cuando Monique qued¨® embarazada, le pidi¨® a Max que comprara unos ¨®vulos en una botica clandestina del Centro de Lima y que se los colocara en el ¨²tero. A los d¨ªas, Monique sufri¨® una profusa hemorragia y expuls¨® el cigoto. Abortar¨ªa en otra oportunidad, pero, para la tercera, Max se opuso.
As¨ª naci¨® Sof¨ªa.
V
¨CMax no estaba enamorado de Monique ¨Cdijo Lucky en el Maquisapa¨C. Estaba enchuchado. No s¨¦ c¨®mo aguantaba tantos cuernos. Lo que m¨¢s le ard¨ªa era que Monique colgara en Facebook fotos de Sof¨ªa haciendo boquita de pato, en bikini, incluso con La Esfinge. Caracho, con tanto degenerado que pulula. Pobre chibola. La pho?toshopeaban. Que Monique se blanqueara y se borrara las arrugas se entend¨ªa. Pero ?la ni?a? Es que esa Monique se la daba de mam¨¢ ideal de Facebook, pero bien que se desaparec¨ªa los viernes y la dejaba a Sof¨ªa arrimada. Madre ejemplar no era, sino una desnaturalizada. Y qu¨¦ bueno que a Max se le pas¨® la obsesi¨®n y empez¨® a tratarla como a una cualquiera. Hasta me propuso un tr¨ªo con ella. Un pan con pescado. ?Uf!, br¨®der, esa Monique no cre¨ªa en nadie.
Lo que m¨¢s le ard¨ªa a Max era que Monique colgara en Facebook fotos de su hija Sof¨ªa haciendo boquita de pato, en bikini.
VI
¨CFabrizio y Sof¨ªa ya deben conocerse ¨Cdijo Max¨C. De m¨¢s grandes ser¨¢ m¨¢s complicado.
¨CComo me pas¨® a m¨ª ¨Cdijo Lucky¨C. Cuando conoc¨ª a mi hermanastro nos terminamos trompeando.
Luego Lucky cont¨® otra historia:
¨CHay una quincea?era de Pamplona que se enamor¨® de su hermanastro a primera vista y tuvo un hijo con ¨¦l que le sali¨® mongolito.
A Max esto le parec¨ªa una barrabasada m¨¢s de Lucky, pero igual se acordaba de la historia.
Sin avisarle a Leticia, el 24 de diciembre de 2015, Max y Fabrizio abordaron el mototaxi de Lucky hacia la vivienda de Altagracia y Sof¨ªa en Manuel Scorza bajo.
¨CTarado ¨CAltagracia jal¨® a un lado a Max¨C. ?No quedaste con Monique que no lo traer¨ªas a tu hijo ac¨¢? Sof¨ªa ni sospecha de su existencia.
¨CAltagracia, ya quiero que se conozcan. Es Navidad.
¨CEst¨¢s bien cojudo t¨², ?no? ?L¨¢rgate!
Sof¨ªa sali¨®.
¨CFeliz Navidad, princesita m¨ªa ¨Cdijo Max¨C. Aqu¨ª est¨¢ tu regalo.
¨C?Elsa de Frozen! Lo m¨¢ximo, papi. ?Y mami? T¨² dijiste que vendr¨ªa.
¨CElla no puede venir. Tiene mucho trabajo en Chile, pero te traje otro regalo.
¨CYo quiero a mi mami.
¨CSofi, ?ves a ese ni?o? Pues ¨¦l es tu regalo. Es tu hermano Fabrizio.
¨C?Mi hermano?
¨CEs el hijo que tengo con otra se?ora.
¨C?Qu¨¦ otra se?ora?
Cuando anocheci¨®, en el pasaje de tierra, Max y sus hijos prendieron las chispitas mariposa, jugaron con los rascapi¨¦s y reventaron los cohetes, silbadores y pokerratas. Max tuvo cuidado. Hac¨ªa a?os vio a un primo volarse el pulgar y a una vecinita morirse por tragarse el rascapi¨¦s creyendo que era un chicle globo.
Cuando terminaron, Fabrizio dijo:
¨CPapi, ya v¨¢monos. Estoy aburrido y quiero mis regalos.
VII
¨C?As¨ª que la vieja no te acept¨® los obsequios? ¨Cdijo Lucky. Leticia retiraba los platos de la cena navide?a, pavo al horno con ensalada rusa.
¨CNi el moscato ni el wok ¨Cdijo Max¨C. Otra vez sali¨® con que por mi culpa mataron a Monique. Me prohibi¨® entrar y le dej¨¦ el wok juntito a la puerta. Ni que lo trajera. ?Qu¨¦ le dir¨ªa a Leti?
Despu¨¦s de que arrestaron a La Esfinge en la frontera, Altagracia se enter¨® de que, en un concierto subterr¨¢neo, Max y Lucky le pegaron a La Esfinge, y que, inmovilizado en el suelo, Max le mostr¨® un v¨ªdeo de su celular en que Monique ten¨ªa sexo con Max y Lucky. El prop¨®sito de Max era herir el honor de La Esfinge, pero no: este termin¨® d¨¢ndole tal golpiza a Monique que la descerebr¨®.
¨CLucky, creo que la vieja tiene raz¨®n ¨Cdijo Max tom¨¢ndose su s¨¦ptimo vino Gato Negro¨C. Esa fue la peor mierda que hice en mi vida.
¨CYa, Zambo, no te tortures m¨¢s ¨Cle dijo Lucky¨C. Perd¨®nate. Es Navidad.
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