Cu¨¢nto nos gusta el sadomasoquismo
Si el Marqu¨¦s de Sade levantara la cabeza repudiar¨ªa a Christian Grey
Ya le hubiera gustado al Marqu¨¦s de Sade que le hubi¨¦ramos hecho tanto caso como le hicimos al se?or Grey.
Christian Grey fue ideado por una ejecutiva de televisi¨®n, que supo darle forma convirti¨¦ndolo en el amante imaginario de millones de mujeres en el mundo. El personaje se erigi¨® hace un lustro como salvador de nuestras aburridas camas, apareciendo como perfecto amante, educado, atento y galante. Pero sobre todo, perfecto iniciador del sadomasoquismo. ?Ja! Si el vecino del quinto en paro, sudoroso y con camiseta de tirantes sucia, osara hacernos la mitad de lo que el se?or Grey hace en el libro, habr¨ªa sido denunciado por acoso a la primera de cambio. En realidad Anastasia, que as¨ª se llama la protagonista, deber¨ªa haber denunciado al se?or Grey.
El sadomasoquismo no es como cuenta el libro, pero deb¨ªamos de tener tantas ganas de que nos lo mostraran que lo convertimos en un ¨¦xito de ventas y abrimos nuestra mente. Esto ¨²ltimo es lo ¨²nico que da valor a la tetralog¨ªa. A pesar de estar escrito p¨¦simamente y de no explicar en qu¨¦ consiste el sadomasoquismo, permiti¨® que un mont¨®n de lectores, la mayor¨ªa mujeres, se sintieran interesadas por las pr¨¢cticas sexuales no convencionales. No se hagan los locos, la pel¨ªcula arras¨® en la taquilla siendo lo m¨¢s visto de la historia en 11 pa¨ªses. C¨®mo ser¨¢ la devoci¨®n que a MapaNublo Films y La Lata Producciones, les bast¨® titular su pel¨ªcula en YouTube 50 sombras de Grey para que haya sido visualizada m¨¢s de 20 millones de veces. Y eso que avisan de que no es la original... Algo deliciosamente perverso.
En apenas tres a?os, 50 sombras de Grey sobrepas¨® los 100 millones de ejemplares vendidos. El estreno de la primera pel¨ªcula de la saga dispar¨® las ventas solo en Amazon un 255 % y un 355 % en t¨ªtulos que tambi¨¦n trataran la tem¨¢tica. NI qu¨¦ decir que en jugueter¨ªa er¨®tica hubo un aut¨¦ntico resurgir de todo lo que fueran arneses, m¨¢scaras, fustas y esposas. Con el libro, el incremento de ventas estuvo entre el 20 y 30% y con la pel¨ªcula subi¨® hasta el 50%. Parec¨ªa que necesit¨¢ramos una excusa para poder dar rienda suelta a nuestras perversiones personales. Es la RAE la que lo cataloga como perversi¨®n. Hubiera estado mejor decir que es una pr¨¢ctica sexual no convencional, pero a saber qu¨¦ consideran los se?ores de tan magna academia que puede o no ser convencional en una cama, m¨¢xime si es la ajena.
Menos mal que Andreas A.J. Wismeijer y Marcel van Assen dictaminaron en The Journal Sexual Medicine que los amantes de este tipo de pr¨¢cticas sexuales suelen tener la cabeza bien amueblada. Lo digo por si alguno de los se?ores de la RAE quiere replantearse la definici¨®n de sadomasoquismo. Wismejer y van Assen recurrieron a 902 practicantes de BDSM (Bondage, Dominaci¨®n, Sado, Masoquismo), frente a 433 con sexualidad convencional. Respondieron a un cuestionario sin saber que se trataba de un estudio para determinar cu¨¢n cuerdos est¨¢n los que gustan del sadomasoquismo. Contestaron sobre su estilo de vida, c¨®mo encajaban las cr¨ªticas, c¨®mo se relacionaban con los dem¨¢s y cu¨¢les eran sus pr¨¢cticas sexuales m¨¢s habituales. Y aqu¨ª les incluyeron preguntas sobre el tema. El estudio no tuvo desperdicio. "Los dominantes resultaron ser los menos neur¨®ticos, m¨¢s extrovertidos y m¨¢s abiertos a nuevas experiencias, seguidos de los sumisos". Por ¨²ltimo, y m¨¢s proclives a encajar mal las cr¨ªticas y a relacionarse peor, los que su vida sexual se basaba en las pr¨¢cticas m¨¢s habituales. Los bdsmeros, como ellos mismos se llaman, sufren menos el rechazo de los dem¨¢s, aceptan mejor las cr¨ªticas y est¨¢n mentalmente m¨¢s equilibrados que las personas que no lo practican. En Contigo Dentro una mujer nos cont¨® c¨®mo dirim¨ªa sus diferencias de pareja con sesiones de "spanking", azotes. Y era de todo menos desequilibrada.
El Fetish Project es un proyecto de investigaci¨®n sociol¨®gica, destinado a hacer un an¨¢lisis sociodemogr¨¢fico de la comunidad bdsmera espa?ola.
Sabemos poco, poqu¨ªsimo del sadomasoquismo. Nos llama la atenci¨®n o nos espanta como todo a lo que no estamos acostumbrados. El cine ha tratado el tema en contadas ocasiones, pero con firmas tan sublimes como Luis Bu?uel o Pier Paolo Pasolini. Y no es la t¨ªpica pr¨¢ctica sexual que puedes encontrar en cualquier lugar. Desgraciadamente, un alto porcentaje de desconocidos creer¨ªa que pueden tortearte la cara sin m¨¢s si les comentas que est¨¢s interesada en el sadomasoquismo. Es lo malo de guiarse por p¨¦simos maestros por muy hollywoodenses que sean. Lo mejor, aprender. ?De qui¨¦n? De los mejores.
Laura C¨¢mara aporta datos para principiantes claros y concisos. Si de verdad queremos m¨¢s, BDSMK divulga y muestra esta sexualidad, alej¨¢ndola de lo que no es el sadomasoquismo. Si nos interesa y queremos m¨¢s, sepamos d¨®nde y cu¨¢ndo tendr¨¢n lugar las pr¨®ximas fiestas BDSM. Los que est¨¢n detr¨¢s de Flechazos publican las fechas y lugares de los eventos en toda Espa?a. Para los BDSMeros, estas reuniones m¨¢s o menos p¨²blicas son la ¨²nica posibilidad de conocer a gente que tenga esta sexualidad sin que ning¨²n mat¨®n de discoteca se haga l¨ªos. Y ya si nos consideramos m¨ªnimamente metidos en el ajo, podr¨ªamos participar en el Fetish Project. Bastar¨¢ con contestar a las preguntas que ha elaborado Ignasi Puig Rodas, al que ya he presentado hablando de sexo gomoso y sexo con perfectos (des)conocidos. Ahora, elabora un proyecto de investigaci¨®n sociol¨®gica, sin ¨¢nimo de lucro. Un an¨¢lisis sociodemogr¨¢fico de las caracter¨ªsticas de la comunidad bdsmera espa?ola.
Si aprendemos m¨¢s del tema, puede que dejemos de juzgar a los que no follen como nosotros.
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