Una muestra organizada por la Fundaci¨®n Museo Torino pone de relieve el trabajo de 14 fotoreporteras en primera l¨ªnea de zonas de conflicto
Una pareja camina sobre las cenizas de su hogar destruido por los bombardeos entre 2012 y 2013 en Sud¨¢n.Camille LepageUna de las v¨ªctimas de la epidemia de malaria es llevada al centro de atenci¨®n primaria Panthou, en el condado de Aweil, en Sud¨¢n del Sur en 2015.Diana Zeyneb AlhindawiEl pasado a?o en Grecia hubo miles de solicitantes de asilo que llegaban, tras un viaje dif¨ªcil y peligroso, a trav¨¦s de Turqu¨ªa y los Balcanes. Palestinos, yemen¨ªes, iran¨ªes, paquistan¨ªes, somal¨ªes, eritreos... todos hacinados en campamentos de refugiados en Atenas.Jodi HiltonUn soldado Seleka sentado en su base en Bambari, en la Rep¨²blica Centroafricana en 2014. Desde marzo de 2013, el pa¨ªs fue devastado por el conflicto entre la milicia anti-Balaka, la fe cristiana, y la coalici¨®n rebelde Seleka, una mayor¨ªa musulmana, que tom¨® el poder por la fuerza.Laurece GeaiLa madre de uno de los j¨®venes asesinados por el ej¨¦rcito en Port Said llora en el aparcamiento que hay fuera de la Academia de Polic¨ªa. La multitud estall¨® en gritos de alegr¨ªa y rezos cuando se anunci¨® la cadena perpetua de Mubarak en la plaza Tahrir, en El Cairo.MaysunUna mujer en Siria muestra en la pantalla del tel¨¦fono a uno de sus hijos muertos durante la guerra. El Estado Isl¨¢mico masacr¨® a cientos de hombres y ni?os de su tribu, los Shaitat, en la provincia oriental de Deir al-Zor.Shelly KittlesonSoldados en una de las l¨ªneas de fuego en Shyrokyne, en Ucrania, el 26 de junio de 2015. La de Shyrokyne fue una batalla entre febrero y julio de 2015 por el control de esa localidad entre las fuerzas ucranianas, lideradas por el batall¨®n Azov, y los separatistas rusos. En la imagen, Linsa (nombre de guerra), dispara con un lanzagranadas antitanque. Junto a ¨¦l, su compa?ero Andrei se tapa los o¨ªdos para amortiguar el ruido de los disparos, que es muy alto. Linsa dirige el fuego hacia uno de los tanques que han visto en el lado separatista.Virginie Nguyen HoangEsta es una de las im¨¢genes que Capucine captur¨® en ell seguimiento durante varios d¨ªas a la unidad de los hombres de artiller¨ªa llamado 'La primera brigada eslava' en la regi¨®n de Debaltsevo, entre la firma del acuerdo de alto el fuego firmado en Minsk el 15 de febrero de 2015, y justo antes de que las fuerzas pro-rusas se apoderaran de la ciudad estrat¨¦gica de Debaltsevo, anteriormente en manos de unos pocos miles de soldados ucranianos. Unos d¨ªas antes, la primera brigada eslava hab¨ªa tomado la ciudad e hizo de Vulegirsk su sede. Ubicado a menos de 10 km de la ciudad de Debaltsevo, la ciudad se hab¨ªa convertido en una l¨ªnea de frente. Despu¨¦s de semanas de combates con artiller¨ªa, las fuerzas pro-rusas han recuperado Debaltsevo a pesar del acuerdo de Minsk. Desde 2014 el este de Ucrania ha estado sometido a un conflicto cada vez mayor. Mientras que las milicias respaldadas por Rusia se han organizado, expandido y radicalizado, el Ej¨¦rcito de Ucrania se ha visto reforzado por reservistas j¨®venes que dentro de una amplia operaci¨®n "antiterrorista" para recuperar el control del territorio controlado por los rebeldes. Los combates han desplazado a m¨¢s de 2000.000 personas y matado a m¨¢s de 10.000. Esta es la violencia, la muerte y el dolor que componen la vida cotidiana de la regi¨®n. Capucine lleg¨® a Donbass el 14 de abril de 2014, y desde entonces captura la lucha y la dif¨ªcil situaci¨®n de los civiles que sufren las consecuencias de este conflicto.Capucine Granier-DeferreUna soldado duerme en su cama de campa?a en un paraje de la provincia de Helmand, en Afganist¨¢n, entre 2011 y 2012.Alison BaskervilleEn Siria, Mohammed nunca sali¨® de su tierra, que cultiv¨® con verduras para vender a los ¨¢rabes y kurdos. Ahora su suelo f¨¦rtil es un campo de petr¨®leo, est¨¦ril. Cada d¨ªa arriesgan sus vidas, incluso sin tomar las armas.Annabell Van Den BergheEn el Kurdist¨¢n iran¨ª, Ali es un hombre de negocios en Sanandaj. La Universidad de esta ciudad alberga desde 2015 el primer curso de la lengua y la literatura kurda.Linda DorigoLas mujeres huyen de Siria hacia L¨ªbano, todav¨ªa hoy. En la imagen, una de esas refugiadas en 2012, con la cara cubierta por razones de seguridad, por temor a ser secuestradas, asesinadas o violadas. No son reconocidas como refugiadas y no pueden trabajar ni enviar a sus hijos a la escuela. Muchas de ellas vieron morir a sus familias.Matilde GattoniVirunga es el parque nacional m¨¢s antiguo de ?frica y el hogar de m¨¢s de 200 de los 800 gorilas de monta?a que quedan en el mundo, en la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo. Desde hace 20 a?os est¨¢ en el centro de una guerra entre milicias armadas que pretenden explotar los recursos naturales del parque, y soldados que defienden con valor el territorio. 14 mujeres trabajan all¨ª como guardas, entrenando militarmente para un trabajo extremadamente peligroso que ya ha se ha cobrado la muerte de m¨¢s de 150 guardas.Monique Jacques
