Lady Gaga tendr¨¢ el dif¨ªcil cometido de entretener a los amantes del f¨²tbol americano en el medio tiempo de la Super Bowl. El repertorio que cantar¨¢ sigue siendo un misterio, al igual que si aprovechar¨¢ la ocasi¨®n para lanzar alguna 'puyita' a Donald Trump. Pero, sea como fuere, el evento deportivo m¨¢s seguido a?o tras a?o por televisi¨®n casi nunca defrauda y nos deja para el recuerdo actuaciones antol¨®gicas sobrecargadas de pirotecnia, hits por doquier y las justas dosis de pol¨¦mica. El show est¨¢ a punto de empezar. Por ello, hemos destacado nueve actuaciones de los ¨²ltimos a?os para enmarcar, y un ¨²ltimo para ignorar.En aquel a?o poco import¨® al mundo que Nelly, Jessica Simpson, Puff Daddy o Kid Rock actuasen: el pez¨®n derecho de Janet Jackson acapar¨® todos los titulares. La versi¨®n oficial dice que fue un de error de vestuario el que provoc¨® que la mano de Justin Timberlake destapara m¨¢s de la cuenta el seno de la artista, pero lo surrealista del asunto es c¨®mo la opini¨®n p¨²blica m¨¢s puritana y ultraconservadora de Estados Unidos se ceb¨® con Janet. De la noche a la ma?ana la convirtieron en una paria social, en una lasciva apestada del show business que hab¨ªa que alejar como fuese del ojo medi¨¢tico. Y vaya si lo fue¡ Desde entonces la pobre no levanta cabeza y numerosos medios de comunicaci¨®n (con MTV a la cabeza) le han ninguneado hasta el mayor de los ostracismos. Eso s¨ª, a Timberlake nadie le dijo ni p¨ªo y ha seguido con su carrera con total normalidad. El nipplegate instaur¨® los cinco segundos de retraso en las retransmisiones en directo y volvi¨® a evidenciar que la superpotencia mundial deber¨ªa follar m¨¢s y poner el grito en el cielo por asuntos m¨¢s relevantes que un simple pez¨®n moreno.Si alguien daba sentido a la pirotecnia y los despliegues t¨¦cnicos millonarios ese era Michael Jackson. El Rey del Pop durante el primer minuto y medio se qued¨® inm¨®vil, como un gato de escayola, enloqueciendo a los asistentes. As¨ª que ya pueden imaginarse la que se li¨® cuando empez¨® a moverse como s¨®lo ¨¦l sab¨ªa y se marc¨® un Billie Jean de a¨²pa. No falt¨® el t¨ªpico coro de ni?os que le acompa?aron en 'We Are the World' o ese 'Black or White' que de 'black' ten¨ªa m¨¢s bien poco. Pasan los a?os y a¨²n estamos esperando un sustituto que se acerque a la sombra de lo que en su d¨ªa ¨¦l fue.Por surrealista que parezca aquel a?o los extintos NSYNC, Aerosmith y Britney Spears se unieron para entretener a las masas futboleras. Lo de la Spears compartiendo foco con la 'boy band' se sobreentiende porque en aquella ¨¦poca compart¨ªa cama con Justin Timberlake, pero lo que nadie pod¨ªa llegarse a imaginar es que se atrever¨ªa a cantar el 'Walk This Way' con la enc¨ªa andante de Steven Tyler. Y s¨ª, decimos cantar, porque Britney hasta que no se volvi¨® un poco loca, se rap¨® la cabeza y estuvo a punto de echar por la borda su carrera, no era una politoxic¨®mana del playback.Los haters de U2 siempre atacan a Bono porque habitualmente confunde los conciertos con m¨ªtines pol¨ªticos o la Asamblea General de las Naciones Unidas. Pero para la Superbowl, lejos de dar una de sus cansinas charlas, ¨¦l y sus compinches optaron por honrar a las v¨ªctimas del 11-S proyectando sus nombres sobre una lona mientras entonaban MLK y Where the Streets Have No Name. El presupuesto se fue en eso y su chaqueta patri¨®tica b¨¢sicamente porque el escenario era exactamente el mismo que emplearon para la gira Elevation Tour de 2011. ?Para qu¨¦ gastar m¨¢s?La lluvia podr¨ªa haber estropeado la fiesta, pero el agua no hizo m¨¢s que Prince se creciera sobre el escenario y diera una valiosa lecci¨®n al mundo de lo que el rock debe ser. Ahora que no est¨¢ entre nosotros duele comprobar lo todoterreno que era como artista. Y lo mejor es que lejos de centrar el set de su actuaci¨®n en canciones propias se atrevi¨®, con un par, a cantar el Proud Mary y hasta el Best of You de los Foo Fighters. Aunque si algo se recordar¨¢ ser¨¢ esa guitarra morada que us¨® para finalizar con Purple Rain y que Soy Una Pringada definir¨ªa como ¡°pura fantas¨ªa¡±. Bruce Springsteen confesaba en su reciente autobiograf¨ªa que minutos antes de actuar en la Superbowl estaba acojonado. La presi¨®n de actuar ante una audiencia televisiva de m¨¢s de 100 millones de personas no es f¨¢cil de gestionar, por supuesto. Pero revisando su actuaci¨®n nada hace pensar que esa inseguridad le com¨ªa por dentro. Con un aplome indiscutible, el Boss y su E Street Band ofrecieron una actuaci¨®n pluscuamperfecta que en poco m¨¢s de diez minutos condensaba lo que los talifans de New Jersey saben desde hace d¨¦cadas: sobre el escenario no tiene rival. Para el recuerdo siempre quedar¨¢ la figura de Clarence Clemons, el legendario y carism¨¢tico saxofonista que tristemente nos dej¨® en 2011.Pocas artistas son m¨¢s mimadas en el star system que Beyonc¨¦. Y con raz¨®n. El pasado a?o se apropi¨® de la actuaci¨®n de Coldplay (?alguien recuerda qu¨¦ tocaron?) presentando por todo lo alto Formation con su legi¨®n de Panteras Negras. No obstante, tres a?os antes dispuso de un cuarto de hora para hacer lo que se le antojara como protagonista absoluta meses antes de editar aquel ¨¢lbum hom¨®nimo que le convirti¨® en nuevo objeto de culto de Pitchfork y dem¨¢s medios musicales gafapastas. Tuvo la consideraci¨®n de llamar a sus ex compa?eras en Destiny¡¯s Child para que le echaran un cable (no estaban muy ocupadas que digamos por entonces) y triunf¨® a lo grande sin que ninguna pol¨¦mica innecesaria le salpicara.Katy Perry no es Maria Callas, ni pretende serlo. Pero la verdad es que a pesar de tener unas cuerdas vocales algo limitadas se las ingeni¨® de maravilla para ofrecer un espect¨¢culo divertid¨ªsimo y m¨¢s inofensivo que una entrevista de Isabel Pantoja en 'El Hormiguero'. Se dej¨® arropar por Lenny Kravitz y una Missy Elliott que llevaba a?os desaparecida en combate, aunque dos tiburones de peluche de su cuerpo de baile fueron los que realmente acapararon las portadas de los diarios al d¨ªa siguiente. El infantilismo siempre convence.Un partido de f¨²tbol americano es lo menos homosexual que hay sobre la faz de la Tierra. Pero la cosa cambia cuando un icono para la comunidad LGTB como Madonna se encarga de actuar en su medio tiempo. La diva, ataviada cual Cleopatra, aprovech¨® sus minutos para mandar al mundo un mensaje valios¨ªsimo: puedo haber pasado la cincuentena, pero a ver qui¨¦n de mis competidoras directas es capaz de moverse como yo lo hago. Que invitara a esos farsantes llamados LMFAO a compartir escenario con ella, a?os despu¨¦s, sigue consider¨¢ndose un error garrafal. Pero la que meti¨® la pata hasta el fondo aquella noche fue M.I.A., que no pudo contenerse y mientras entonaba Give Me All Your Luvin¡¯ mostr¨® su dedo coraz¨®n a la c¨¢mara topando (otra vez, s¨ª) con la censura m¨¢s carca y absurda yanqui.No sabemos qu¨¦ tomaron los directivos de la NFL cuando pensaron en ellos para actuar en el medio tiempo, pero seguro que algo les obnubil¨® la mente. Aparte de demostrar a un centenar de millones de espectadores que un evento como este se les queda grande, por no decir enorme, destrozaron t¨ªmpanos como nadie. Y si encima a eso le sumamos que Slash tuvo la poca decencia de compartir plano con Fergie para mancillar Sweet Child O¡¯ Mine, lo que nos queda es un cuadro de comedor para olvidar.
