12 fotosLos altos costes de los entierros en Hait¨ªLas familias se ven obligadas a endeudarse para dar sepultura a sus familiares fallecidos 06 abr 2017 - 13:19CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceUn grupo de familiares y amigos observan como un pariente fallecido es enterrado en el cementerio nacional de Puerto Pr¨ªncipe, en Hait¨ª. Mientras que muchos haitianos unen recursos y buscan ayuda en familiares que vivan en el extranjero para pagar los gastos funerarios, muchas familias se ven obligadas a vender sus posesiones o a solicitar pr¨¦stamos con intereses muy altos para costearlos.Dieu Nalio Chery (AP)Algunos familiares da?an el ata¨²d con los restos de un miembro de la familia, justo antes del entierro en el cementerio nacional de Puerto Pr¨ªncipe, en Hait¨ª. Las familias llevan a cabo esta pr¨¢ctica con el fin de evitar que roben el f¨¦retro y que el cuerpo termine en el suelo.Dieu Nalio Chery (AP)Un hombre permanece sentado frente al ata¨²d de su madre durante el funeral en la iglesia de St. Anne en Puerto Pr¨ªncipe, Hait¨ª.Dieu Nalio Chery (AP)Jerry Chery, subdirector del cementerio, camina entre ata¨²des rotos en el cementerio nacional de Puerto Pr¨ªncipe, en Hait¨ª. Durante el paseo se pueden apreciar de esqueletos que yac¨ªan en ata¨²des abiertos, costillas y v¨¦rtebras dispersas a¨²n dentro de los trajes blanqueados por el sol y los lazos a¨²n atados. Unos cuantos cuerpos arrojados al suelo por los trabajadores a¨²n ten¨ªan la piel momificada en sus cr¨¢neos.Dieu Nalio Chery (AP)Los restos de un cad¨¢ver exhumado permanecen en el suelo antes de que los trabajadoes lo trasladen a una fosa com¨²n del cementerio nacional de Puerto Pr¨ªncipe, en Hait¨ª.Dieu Nalio Chery (AP)Un grupo de m¨²sicos toca durante un funeral en el centro de Puerto Pr¨ªncipe, en Hait¨ª. A lo largo de la bulliciosa calle donde se porta el f¨¦retro, enterradores establecidos y otros sin licencia libran una guerra de ofertas diarias para nuevos clientes, mientras que los equipos de empresarios, incluyendo vide¨®grafos y bandas de m¨²sica que dirigen las procesiones callejeras, est¨¢n listos para sacar partido a familias que normalmente no pueden pagar por ello. Incluso hay personas que lloran a sueldo por aquellos que quieren el prestigio social de una gran despedida.Dieu Nalio Chery (AP)Loubert Gouin mueve un ata¨²d roto que contiene los restos de un cad¨¢ver exhumado, en una vieja tumba en el cementerio nacional de Puerto Pr¨ªncipe, en Hait¨ª. Los trabajadores del cementerio dicen que generalmente tiran los huesos en una b¨®veda o que temporalmente los dejan apartados en un rinc¨®n para dejar espacio al siguiente cliente. Pocas familias acuden a recoger los restos.Dieu Nalio Chery (AP)Arnold Destin (derecha), trabajador de una morgue, coloca el cuerpo de una mujer dentro de un ata¨²d, en la funeraria y morgue Zenith en Puerto Pr¨ªncipe, Hait¨ª. Las funerarias establecidas quieren que las autoridades controlen a los funerarios independientes que les usurpan sus negocios.Dieu Nalio Chery (AP)Aspasia Tanis sostiene la ropa de su padre fallecido en la funeraria y morgue 'Zenith' en Puerto Pr¨ªncipe, Hait¨ª. Tanis, que vive al borde del desahucio, se dedica a vender paquetes de espaguetis y galletas fuera de su choza de hormig¨®n en la capital de Hait¨ª. La muerte de su padre amenaza con soportar una deuda de por vida.Dieu Nalio Chery (AP)Una mujer llora durante el funeral de su hijo en la iglesia de St. Anne, en Puerto Pr¨ªncipe (Hait¨ª).Dieu Nalio Chery (AP)Aspasia Tanis y su hermano observan el cuerpo de su padre fallecido en la funeraria Zenith en Puerto Pr¨ªncipe, Hait¨ª. Tanis busca fren¨¦ticamente pr¨¦stamos de amigos y pastores para pagar el funeral m¨¢s barato que se ofrece.Dieu Nalio Chery (AP)Jean Pierre Mercelien tapiza el interior de un ata¨²d en una tienda en el centro de Puerto Pr¨ªncipe, Hait¨ª. "Es una buena vida porque nunca dejaremos de tener nuevos clientes", coment¨® en un patio donde varios hombres construyen ata¨²des de madera y los decoran con cojines y tiradores de aluminio.Dieu Nalio Chery (AP)