Cuando un ni?o de pap¨¢ se pasa de la raya
Esc¨¢ndalo en Marruecos tras grabar un conductor ebrio c¨®mo se mofa de los agentes
En las carreteras de Marruecos le pueden poner una multa por el equivalente a 30 euros si conduce a 70 kil¨®metros por hora en un lugar donde no se debe pasar de 60. En las proximidades del aeropuerto Rabat-Sal¨¦, pongamos por caso. Pero ese rigor no es el mismo para todo el mundo. Las injusticias se asumen con resignaci¨®n hasta que alguien se pasa de la raya.
La semana pasada, un joven al volante de un flamante Ferrari en Rabat traspas¨® los l¨ªmites. Tal vez no porque condujera un Ferrari borracho, provocara un accidente, se burlara de los polic¨ªas que ven¨ªan a dar parte del asunto y se marchara impunemente sin ser detenido de forma preventiva, como fija la ley. Se pas¨® porque grab¨® sus haza?as en un v¨ªdeo y el v¨ªdeo termin¨® circulando por la redes. La raya, en este caso, la marc¨® Internet.
Ante el esc¨¢ndalo del v¨ªdeo, un responsable de Interior declar¨® que eso no quedar¨ªa impune y al cabo de cinco d¨ªas hab¨ªa cinco personas encarceladas, entre ellas dos agentes y el propio conductor, Hamza Derhem, hijo del difunto director general de la compa?¨ªa Atlas Sahara, dedicada a la importaci¨®n de productos petroleros.
Y hablando de v¨¢stagos con dinero, el cantante marroqu¨ª Saad Lamjarred, hijo del cantante Bachir Abdu y de la actriz Neza Regragui, detenido en noviembre pasado en Par¨ªs por supuesta violaci¨®n a una mujer de 20 a?os, sali¨® el 13 de abril de la c¨¢rcel con la expresa prohibici¨®n de abandonar Francia y portando una pulsera electr¨®nica de vigilancia en el tobillo hasta que se celebre el juicio.
El rey Mohamed VI le ofreci¨® en su d¨ªa los servicios de su abogado en Par¨ªs, Eric Dupond-Moretti. Pero nada m¨¢s salir de la c¨¢rcel a Lamjarred no se le ocurri¨® otra cosa que grabar un videoclip donde canta y r¨ªe. ¡°?Qu¨¦ terrible falta de gusto, qu¨¦ inconsciencia!¡±, se quejaba un columnista en el medio digital Le360, pr¨®ximo al palacio real.
Otro que se pas¨® de la raya. Pero sigue teniendo un magn¨ªfico abogado.
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