19 fotosEl mayor centro de inmigraci¨®n de California, en im¨¢genesEl d¨ªa a d¨ªa de los inmigrantes del Centro de detenci¨®n de Adelanto 31 may 2017 - 11:54CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceUn detenido del Servicio de Inmigraci¨®n y Control de Aduanas de EE. UU permanece en su celda en el centro de detenci¨®n de inmigrantes.LUCY NICHOLSON (REUTERS)240 de los detenidos son mujeres. Los inmigrantes con traje naranja son identificados como detenidos por delitos de mediana gravedad, como violencia dom¨¦stica o agresi¨®n f¨ªsica.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Una cerca de alambre rodea todo el centro de inmigraci¨®n de Adelanto. Desde que Donald Trump lleg¨® al poder se han endurecido las medidas de seguridad en las fronteras de Estados Unidos.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Los detenidos hacen ejercicio en el ¨¢rea del recreo. El grupo privado GEO es el responsable del mayor centro de detenci¨®n de inmigrantes de California.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Roberto Galan, inmigrante sansalvadore?o de 33 a?os, posa para un fot¨®grafo en el centro de detenci¨®n. Galan tiene condenas en California por venta de marihuana y posesi¨®n de un arma de fuego. Lleva un traje rojo que le identifica como detenido de alto riesgo que ha estado en la c¨¢rcel.LUCY NICHOLSON (REUTERS)El centro de detenci¨®n de Adelanto cuenta con servicios m¨¦dicos, religiosos y un ¨¢rea recreativa donde pueden jugar al f¨²tbol y baloncesto.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Un hombre juega al domin¨® con sus compa?eros del centro de detenci¨®n de inmigrantes.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Las pertenencias personales se encuentran sobre la cama del dormitorio de una mujer. En Adelanto comparten espacio las migrantes que han huido de la violencia, a quienes se les pide vestir uniforme azul.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Un detenido del centro hace una llamada. Muchos de los residentes desean regresar a Estados Unidos con sus familiar.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Inmigrantes sentados en sus celdas para detenidos del Servicio de Inmigraci¨®n y Control de Aduanas de EEUU.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Dos hombres comparten unos auriculares para ver la televisi¨®n en su dormitorio del centro.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Un detenido dibuja unas rosas en una postal de cumplea?os en el centro de inmigraci¨®n de Adelanto.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Detenidos esperan su turno a la hora de la cena en el comedor del centro.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Las pertenencias de uno de los detenidos vistas en el ¨¢rea de admisi¨®n.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Un inmigrante lleva la comida al interior de su celda en el centro de Adelanto.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Detenidos del centro en la sala com¨²n. Los convictos tienen acceso a internet y a una biblioteca de manera restringida.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Una mujer descansa en la cama de su dormitorio. Las mujeres con traje naranja s¨®lo pueden compartir espacio con las de traje rojo y nunca con las de azul, ya que ¨¦stas no han cometido ning¨²n delito.LUCY NICHOLSON (REUTERS)Mujeres detenidas leen acerca de la huelga de hambre que tuvo lugar en un centro de detenci¨®n de inmigrantes en Tacoma (Washington).LUCY NICHOLSON (REUTERS)Un mapa del mundo cuelga de la pared de la sala de visitas del centro de inmigraci¨®n.LUCY NICHOLSON (REUTERS)