14 fotosReverdecer los alrededores de YamenaLa canalizaci¨®n del riego y la formaci¨®n agr¨ªcola transforman las afueras de la capital de Chad en huertos f¨¦rtilesCarlos Laorden ZubimendiYamena - 13 jul 2017 - 08:12CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceA unos cientos de metros de los terrenos en las afueras de Yamena (Chad) donde se ha implantado el proyecto, la aridez del terreno seco contrasta con el verdor y la fertilidad de los huertos de pimientos, lechugas o berenjenas que los agricultores cultivan en combinaci¨®n con los cultivos principales de sorgo, arroz o ma¨ªz. Es la diferencia entre tener buenos sistemas de riego, utensilios y formaci¨®n o no tenerlos.Carlos LaordenUn grupo de habitantes de Amnaback (en las afueras de Yamena, Chad) pasa por el terreno donde los formadores ense?an a algunos de los beneficiarios t¨¦cnicas de cultivo, que luego estos deben compartir entre sus vecinos. Aqu¨ª aprenden a regar con mayor eficiencia, a usar biopesticidas biol¨®gicos a partir de hojas de ¨¢rboles y otras cuestiones que pueden mejorar la productividad del terreno de forma sostenible.Carlos LaordenRosalie Nekarmbaye, que cr¨ªa sola a sus cinco hijos, todos en edad escolar, trabaja en una de las parecelas del terreno en las afueras de Yamena (Chad) que se beneficia del proyecto. Las mujeres y los hombres participan en igualdad de condiciones y se organizan por grupos que se reparten todo el terreno de la comunidad.Carlos Laorden¡°Como producimos m¨¢s cosas, no tenemos problemas para conseguir comida. Antes solo com¨ªamos sorgo, mijo o arroz. Pero ahora tambi¨¦n tomamos cosas como lechuga o pimientos, que antes no prob¨¢bamos¡±, comenta Simon Dinferantolom, un agricultor de Amnaback, en las afueras de Yamena (Chad).Carlos LaordenEstos terrenos de Amnaback est¨¢n a unos 10 kil¨®metros de la capital de Chad, Yamena, y a orillas del rio Logone, que hace de frontera natural con Senegal. Antes las crecidas del r¨ªo generaban problemas e inundaban las tierras. Ahora, con la canalizaci¨®n y construcci¨®n de acequias, aprovechan el agua para riego evitando esos problemas. Pero ahora la erosi¨®n de la orilla est¨¢ poniendo en peligro los terrenos de las comunidades ribere?as.Carlos LaordenEstos terrenos floridos a orillas del r¨ªo Logone a las afueras de Yamena (Chad) est¨¢n llenos de pimientos, berenjenas ¡ªmoradas y blancas, una variedad local¡ª ocras, cebollas, lechugas¡ Muchos de sus habitantes llegaron del campo en busca de oportunidades en la capital y ahora tienen una vida casi rural a algo m¨¢s de 10 kil¨®metros del centro.Carlos Laorden¡°Antes ten¨ªamos muchos problemas para asegurarnos la comida, sobre todo si la cosecha de arroz no hab¨ªa sido buena¡±, explica Mobean Mbainodji, uno de los agricultores de estos terrenos a las afueras de Yamena (Chad). ¡°Y cuando intent¨¢bamos plantar algo fuera de la temporada y regarlo con agua del r¨ªo, se inundaba todo y los campos se volv¨ªan impracticables¡±.Carlos Laorden¡°Tambi¨¦n producimos compost con los restos, y as¨ª nos ahorramos hasta la mitad de lo que antes gast¨¢bamos en fertilizante¡±, comenta Simon Dinferantolom, un agricultor de las afueras de Yamena (Chad). En teor¨ªa, tambi¨¦n deber¨ªan usar biopesticidas contra las plagas pero son muchos los que a¨²n no se f¨ªan y siguen recurriendo a los qu¨ªmicos.Carlos Laorden¡°Aqu¨ª nos pagan muy poco por nuestros productos¡±, se queja Rosalie Nekarmbaye, que cr¨ªa sola a sus cinco hijos, todos en edad escolar. Intermediarios con motos llegan desde Yamena y les compran las verduras para colocarlas en los mercados capitalinos. Y fijan sus propios precios, ante los que los agricultores no tienen ninguna fuerza de negociaci¨®n.Carlos Laorden¡°Yo me voy andando hasta el centro [de Yamena, a 10 kil¨®metros de su casa] y vendo los productos por las calles¡±, asegura Rosalie Nekarmbaye, camiseta gris, falda de colores rojizos, mirada al suelo. El esfuerzo, que implica dejar a los ni?os solos, le sale a cuenta, incluso cuando paga a alg¨²n motociclista para que le acerque, dados los precios que imponen los intermediarios.Carlos LaordenEstos terrenos a 10 kil¨®metros de Yamena son parte de Chad. Pero a unos 200 metros, al otro lado del r¨ªo, ya es territorio senegal¨¦s. La configuraci¨®n fluvial est¨¢ cambiando, y la erosi¨®n carcome las orillas del Logone, reduciendo el terreno cultivable y dando cancha a las inundaciones en ¨¦poca de lluvias. A menos de dos kil¨®metros r¨ªo arriba, operarios cameruneses extraen del lecho metros y m¨¢s metros c¨²bicos de arena para la construcci¨®n que se llevan en camiones.Carlos LaordenEstos movimientos aliados con los ciclos h¨ªdricos ponen en riesgo los campos de cultivo, y tambi¨¦n amenazan las casas de muchos vecinos. Algunos de ellos, con fondos de una ONG local, plantan hileras de ejemplares de 'Mimosa Pygra' en distintos tramos de la ribera. Estos arbustos le?osos, bastante invasivos, fijan y retienen el suelo ante las crecidas del r¨ªo y las lluvias.Carlos LaordenDe momento, la plantaci¨®n de arbustos para fijar el terreno y luchar contra la erosi¨®n de la orilla no llega a proteger los huertos de Amnaback ni muchos de los otros centenares de hect¨¢reas, estas secas y amarillentas, que rodean Yamena, la capital de Chad.Carlos LaordenLos hipop¨®tamos del r¨ªo son tambi¨¦n un problema para los agricultores, ya que muchas veces arruinan las cosechas de los terrenos m¨¢s cercanos a la orilla.Carlos Laorden