Kirsten Dunst se neg¨® a adelgazar para la nueva pel¨ªcula de Sofia Coppola

La actriz Kirsten Dunst se neg¨® a perder peso para su nueva pel¨ªcula El Seductor, de Sofia Coppola. Una petici¨®n que le vino de la directora, pero Coppola no puso m¨¢s reparos a su negativa y comenz¨® el rodaje. ¡°Es bastante dif¨ªcil cuando tienes 35 a?os y odias hacer ejercicio¡±, explic¨® la actriz con naturalidad durante una entrevista a ambas en la revista Variety. Y es que no resulta raro que un actor se tenga que someter a determinados cambios f¨ªsicos para ajustarse a las exigencias de guion; lo que no es tan normal es que el director acepte las negativas tan f¨¢cilmente.

Dunst se disculp¨® ante las peticiones de Coppola y argument¨® que, adem¨¢s de no gustarle el ejercicio, le costaba mucho resistirse a la gastronom¨ªa del lugar de rodaje, en Luisiana (EE UU). ¡°Mi idea era comer pollo frito y comida del McDonald's antes de ir a trabajar. As¨ª que le dije que lo sent¨ªa pero que no iba a poder perder peso para hacer este personaje¡±, ha recordado la int¨¦rprete.

Quiz¨¢ sea un buen ejemplo de la buena relaci¨®n y confianza fomentada por ese v¨ªnculo inquebrantable que hay entre ambas desde que Coppola la fich¨® para un personaje en Las v¨ªrgenes suicidas (1999). M¨¢s tarde le dio el papel protagonista de Maria Antonieta (2006) y, siete a?os despu¨¦s, Dunst apareci¨® en un cameo en Ladrones de la fama haciendo de s¨ª misma. Ahora, las dos est¨¢n en el Festival de Cannes presentando el ¨²ltimo thriller de Coppola que se estrenar¨¢ este verano.

Dunst, de 35 a?os, siempre ha cuidado su aspecto pero se ha negado a entrar en la espiral de perfecci¨®n que demanda Hollywood a sus actrices. De hecho, la que ha sido la protagonista de las tres primeras pel¨ªculas de Spiderman cuenta en la misma entrevista que uno de los productores de la saga le sugiri¨® que se arreglara los dientes y ella se neg¨®. Una posici¨®n que Coppola alaba de la actriz, a la que considera una gran influencia para las chicas j¨®venes. ¡°Sofia una vez me dijo que le encantaban mis dientes, que nunca me los retocase. Ella me da la confianza en estas peque?as cosas que no siempre he tenido¡±, asegura Dunst, que aboga por mantener intacta su naturalidad.