F¨²tbol y homosexualidad, el gran tab¨² que empieza a quebrarse

¡°Los futbolistas no salen del armario porque tienen miedo¡±, respondi¨® sin rodeos Antoine Griezmann esta misma semana en una entrevista a una cuesti¨®n que se viene planteando cada vez m¨¢s ante la ausencia de novedades. ?C¨®mo es posible que a estas alturas ning¨²n futbolista se haya declarado abiertamente homosexual? La explicaci¨®n del astro franc¨¦s expone una realidad, la de los deportistas de ¨¦lite que compiten en un entorno marcadamente masculino. Miedo a los insultos, al rechazo de los propios compa?eros, en definitiva, a tirar su carrera por la borda por el simple hecho de vivir con normalidad sus preferencias afectivas. Algunos dir¨¢n que no hay ning¨²n futbolista gay, aunque la estad¨ªstica hace pensar que, como en todos los ¨¢mbitos, el f¨²tbol tambi¨¦n tiene su cuota LGTB. Pasan los a?os y las conquistas del colectivo gay se ampl¨ªan. Pero quedan muros por derribar, como la educaci¨®n desde el colegio, una mayor visibilidad de las lesbianas, y la casi necesidad de que un ¨ªdolo de masas del deporte emerja como pionero y h¨¦roe de la diversidad sexual. A las puertas de la celebraci¨®n del orgullo mundial en Madrid, algunas citas del macro evento tienen al f¨²tbol como protagonista. Desde un torneo a una obra de teatro, El gol de Alex, que plantea c¨®mo ser¨ªa la salida del armario de un jugador famoso y los motivos que le llevar¨ªan a no querer contarlo, hasta decidirse finalmente a dar el paso.

?El estreno de El gol de Alex ha coincidido con la entrevista de Antoine Griezmann. Lo primero que llama la atenci¨®n de la obra es que es una comedia rom¨¢ntica, prueba de que las historias gais hace tiempo que no tienen que terminar en tragedia. Su autor, Antonio Hern¨¢ndez Centeno, es abiertamente gay. La primera pregunta es si esto de los futbolistas homosexuales no acaba de ser una fantas¨ªa proyectada de los gais hacia los iconos de la masculinidad de esta sociedad. ¡°Puede haber parte de fantas¨ªa sexual, pero el tema es que la homosexualidad en deportes donde la testosterona tiene un peso importante est¨¢ arrinconada totalmente. Lo que plantea la obra es lo interesante que ser¨ªa que un jugador con cierta notoriedad diera un paso adelante y dijera que es gay. Servir¨ªa para muchas cosas, porque las personas crecemos con referentes que te ayudan a crecer, en aquello que te gusta, en el cine, en la m¨²sica o en el deporte. SI ves a alguien con una tendencia sexual como la tuya, eso te ayudar¨ªa tambi¨¦n a dar el paso y vivir tu sexualidad abiertamente¡±, asegura Centeno. ¡°No estamos diciendo que tenga que salir nadie del armario, ojo¡±, puntualiza Alejandro Albarrac¨ªn, protagonista de la obra. ¡°Pero con la cantidad de gente que mueve el f¨²tbol, ayudar¨ªa mucho a mejorar las cosas. Ser¨ªa incre¨ªble. Su compa?ero de reparto y amante en la historia es Pepe Ocio, actor que participa en la serie Las Chicas del Cable, que tiene claro que ¡°es imposible que no haya ning¨²n futbolista gay, por pura l¨®gica debe haberlos.¡±

La obra narra la relaci¨®n amorosa que surge entre un delantero conocido y un cronista de deportes, y el punto ¨¢lgido es el momento en que se plantea la salida del armario del jugador, una recreaci¨®n ficticia de algo hasta el momento nunca visto. ¡°Si lo hace una superestrella ser¨ªa menos problem¨¢tico que si fuese un jugador de un equipo m¨¢s modesto¡±, opina el autor. ¡°Futbolistas conocidos por todo el mundo mas deben ser veinte o menos. Pero si el que sale del armario es un jugador que solo lo conoce la gente futbolera, de repente pasar¨ªa a ser famoso para la gran masa por algo que no es su juego. ?Qu¨¦ pasar¨ªa con su capacidad goleadora? Su vida cambiar¨ªa much¨ªsimo¡±. Pero cabe la posibilidad de que no cambiase nada, de que la reacci¨®n del p¨²blico fuese de total normalidad. ¡°Qui¨¦n sabe, el caso es que ser¨ªa buen¨ªsimo, porque mucha gente a¨²n reacia hacia los homosexuales podr¨ªa cambiar de opini¨®n al ver que uno de sus ¨ªdolos y referentes de masculinidad es gay y no por ello menos hombre¡±.

Por ¨²ltimo se plantea si tambi¨¦n es responsabilidad de los propios gais la tradicional brecha entre f¨²tbol y homosexualidad, y si deber¨ªan ser ellos los que tambi¨¦n se acercasen m¨¢s al f¨²tbol. ¡°Por supuesto, por eso mi aportaci¨®n con esta obra. El f¨²tbol es algo maravilloso, y est¨¢ lleno de belleza, de inteligencia, de momentos art¨ªsticos sublimes. La construcci¨®n de las jugadas, las t¨¢cticas¡­ Pero s¨ª, los homosexuales deber¨ªan ser m¨¢s futboleros¡±, afirma Centeno, confeso hincha del Celta de Vigo. Pepe Ocio cree que muchos no van porque no se sienten bien recibidos en el estadio. ¡°En un estadio de f¨²tbol el insulto que m¨¢s se escucha es maric¨®n. Hay un punto casposo a¨²n que tiene que superarse¡±, sentencia. La comedia, con final feliz, deja un ¨²ltimo mensaje. El amor tambi¨¦n es un deporte, una competici¨®n con mucho que ganar y mucho por perder tambi¨¦n. En un momento al final se dice que ¡°hay que apostar siempre por el juego, seguir apostando a pesar de la derrota. El juego es el f¨²tbol, pero tambi¨¦n el amor, la vida, donde un empate es un eterno letargo hacia la infelicidad¡±.