Constituyente impostora
Es hora de no cejar en la presi¨®n internacional hasta lograr el completo aislamiento y deslegitimaci¨®n de la dictadura chavista
Paso a paso, el r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro va completando la asfixia de todo atisbo de vida democr¨¢tica en Venezuela. Como muestra la huida a Colombia de la ex fiscal general Luisa Ortega, que hab¨ªa osado cuestionar el vaciamiento de poderes de la Asamblea Nacional por parte, primero, del Tribunal Supremo y, ahora, de la Asamblea Constituyente, en el abismo en el que el fanatismo de Maduro y sus secuaces ha sumido al pa¨ªs no queda espacio para la m¨ªnima disidencia.
La Asamblea Nacional es la ¨²nica instituci¨®n democr¨¢tica que queda en el pa¨ªs. De ah¨ª que el r¨¦gimen chavista haya utilizado mil y un subterfugios para desembarazarse de ella. En un proceso de asalto al parlamentarismo democr¨¢tico que pasara a los libros de su historia por su inquina y mezquindad, los chavistas han ido despoj¨¢ndola de todos sus poderes. Para ello han contado con la anuencia de un Tribunal Supremo infame y servil, convertido en instrumento ejecutivo del totalitarismo en el que ha devenido un r¨¦gimen que presume de representar la v¨ªa al socialismo democr¨¢tico en el siglo XXI, as¨ª como de una Asamblea Constituyente ilegal e impostora. Esa Constituyente, nacida de un fraude constitucional y democr¨¢tico, no solo pretende sustituir a la Asamblea Nacional, sino convertirse en otro instrumento de represi¨®n contra las libertades de los venezolanos.
Hacen bien los embajadores de la Uni¨®n Europea y de Am¨¦rica Latina en solidarizarse con la Asamblea Nacional person¨¢ndose en el Palacio Federal Legislativo para as¨ª proteger a los parlamentarios de la oposici¨®n del hostigamiento de los chavistas. La triste realidad de Venezuela hoy es la de un pa¨ªs donde los derechos y las libertades han sido secuestrados y los representantes leg¨ªtimos del pueblo han sido convertidos en rehenes. Es hora de no cejar en la presi¨®n internacional hasta lograr el completo aislamiento y deslegitimaci¨®n de la dictadura chavista.
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