10 fotosVivir con discapacidades en TindufLas escuelas de educaci¨®n especial ayudan a progresar a los ni?os saharauis del campo argelino Tinduf - 30 ago 2017 - 07:34CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceEl patio de la escuela de educaci¨®n especial es el lugar de juegos de los ni?os con discapacidades. El centro, creado con ayuda de la cooperaci¨®n internacional, atiende a 23 menores invidentes, con autismo, con S¨ªndrome de Down u otras discacpadiades. Sergi Param¨¨sSalma tiene cinco a?os y padece un trastorno del espectro autista. Si no le das de comer, no come, si no le das de beber, no bebe. Solo muestra inter¨¦s por roer cables. A Zeinuha su madre, le preocupa su falta de inter¨¦s por las cosas pero se alegra de que a ella, la reconozca. En la escuela de educaci¨®n especial se aseguran que los ni?os reciban al menos dos comidas al d¨ªa gracias a un acuerdo de cooperaci¨®n con Cruz Roja Internacional. Sergi Param¨¨sGracias a las escuelas de educaci¨®n especial se ha pasado de tener a las personas con discapacidad atadas para que no escapasen de las jaimas a tener programas individualizados con la ayuda de asistentes sociales, psic¨®logos, fisioterapeutas y monitores para intentar que los menores sean tan aut¨®nomos como sea posible y lleven una vida integrados con el resto de habitantes del campo. Sergi Param¨¨sEn el interior de una jaima se realiza la ceremonia del t¨¦. La sociedad saharaui es marcadamente matriarcal, herencia de un pasado n¨®mada y beduino.Sergi Param¨¨sBuda no puede hacer nada por s¨ª mismo, y su madre Zeinab agradece la ayuda de los vecinos. Su esperanza es que su hijo consiga ganar autonom¨ªa y que, al menos, pueda ir al ba?o ¨¦l solo. Sergi Param¨¨sMamadou sufre epilepsia y otros trastornos y a¨²n usa pa?ales. Pero es consciente de su discapacidad y ayuda con los ni?os m¨¢s peque?os de la escuela. Para Mourguef, su hijo ser¨¢ siempre una bendici¨®n: "?Nos lo ha dado Al¨¢!". Sergi Param¨¨sFatimetu es monitora de la escuela de educaci¨®n especial y ense?a costura a otras adolescentes del centro. Ella es invidente y fue en su momento alumna de la escuela. Habla castellano porque ha viajado a Espa?a en varias ocasiones con el programa ¡®Vacaciones en paz¡¯. Sergi Param¨¨sTara (derecha) atiende las indicaciones de El Hawari, el director del centro, que es soci¨®logo y especialista en la atenci¨®n a invidentes. En la escuela lamentan que las largas distancias dentro del recinto y el estado de los caminos en pleno desierto dificultan la asistencia de muchos alumnos con dificultades motrices o de visi¨®n. Sergi Param¨¨sUna joven saharaui desde el interior de la escuela ordinaria. En el desierto no hay futuro. Si estudias, tienes la posibilidad de cursar una carrera en el extranjero. Pero, al no tener papeles, debes volver con tu t¨ªtulo al desierto, donde no te sirve para nada. Sergi Param¨¨sPara muchos ni?os del campo de Tinduf, el desierto del S¨¢hara, una extensi¨®n tan grande como Estados Unidos, es su grna campo de juego. Pero los ni?os con discapacidad no pueden jugar m¨¢s all¨¢ de las paredes de paja y barro o de las telas de una jaima.Sergi Param¨¨s