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Obsolescencia programada: Comprar, tirar, comprar Dise?ar productos con fallos, con componentes ef¨ªmeros o sin ninguna vocaci¨®n de durabilidad para que el consumidor vuelva a pasar por caja. Es la obsolescencia programada, una pr¨¢ctica que nos conduce a un callej¨®n sin salida La obsolescencia programada es una pr¨¢ctica que viene de lejos. Asom¨® la cabeza all¨¢ por finales del siglo XIX, en la industria textil, cuando los fabricantes empezaron a utilizar el almid¨®n, y menos algod¨®n, para que el producto resultara menos duradero. Con la llegada de la sociedad consumo, la pr¨¢ctica tom¨® nuevos br¨ªos. ?Por qu¨¦ no abandonar ese af¨¢n rom¨¢ntico de manufacturar productos bien hechos, consistentes, duraderos, y ser pr¨¢cticos de una vez? ?No ser¨¢ mejor para el business hacer que el cliente desembolse m¨¢s a menudo? En la imagen, la bombilla fabricada por la Shelby Electric Company de Ohio que que ilumina ininterrumpidamente desde el a?o 1901 el parque de bomberos de Livermore, en California. John G. Mabanglo Cada a?o unas 215.000 toneladas de aparatos electr¨®nicos procedentes de, fundamentalmente, Estados Unidos y Europa, recaen en vertederos como estos en Ghana, seg¨²n apunta la plataforma multimedia Motherboard. En la imagen, el vertedero de Agbogbloshie en Accra la capital de Ghana al que cada a?o llegan 129.000 toneladas de residuos electr¨®nicos. Entre el 60 y el 90 % de estos residuos electr¨®nicos terminan en manos de bandas organizadas que los comercializan de manera ilegal. Olivier Hoslet (EFE) Investigadores del Instituto Oko y la Universidad de Bonn demostraron en 2016 que en la ¨²ltima d¨¦cada los electrodom¨¦sticos alemanes han perdido de media un a?o de vida, desde los 14,1 a?os de 2004 hasta los 13 a?os de 2012 y los 12,6 de 2013. Algo que resulta dif¨ªcil de explicar en un contexto de un continuo avance tecnol¨®gico al que, parece, le resulta dif¨ªcil avanzar en el terreno de la durabilidad. Desde la Asociaci¨®n Nacional de Fabricantes de Electrodom¨¦sticos (ANFEL), se se?ala que, influyen, tambi¨¦n, cambios en los usos. Su director general, Alberto Zapatero, escribe: ¡°La utilizaci¨®n real de la lavadora, que antiguamente se pon¨ªa en marcha en los hogares una vez a la semana¡±, ¡°actualmente se puede llegar a utilizar de media entre 3 y 4 veces por semana¡±. Stena Genbrug (Getty Images) La obsolescencia programada no es el ¨²nico motivo que impulsa a los consumidores a renovar sus aparatos electr¨®nicos con frecuencia. En el caso de los tel¨¦fonos m¨®viles, no es necesario que el terminal deje de funcionar para que el usuario decida cambiarlo. En ocasiones solo hace falta que salga un nuevo modelo con m¨¢s prestaciones para que sintamos que nuestro tel¨¦fono inteligente ya no cumple las funciones que necesitamos. En la imagen se puede ver a John f. Mitchell, vicepresidente de Motorola, con uno de los primeros modelos del invento del siglo, el tel¨¦fono m¨®vil. Getty Images La Fundaci¨®n Energ¨ªa e Innovaci¨®n Sostenible Sin Obsolescencia Programada (FENISS) concede un sello de calidad llamado ISSOP a empresas que fabriquen sin obsolescencia programada y priorizando la compra de productos respetuosos con el medioambiente. De 159 empresas que lo han solicitado, cuenta su presidente, Benito Muros, solo 15 lo han obtenido en Espa?a. Entre ellas est¨¢ Prososphera (emprendedores que promueven el uso de tecnolog¨ªas sin O.P.), Happylegs feet (que confecciona un aparato para ejercitar las piernas mientras estamos sentados), Zumex (exprimidores de fruta) y la marca de relojes y calculadoras Casio. Su director general en Espa?a, Koichi Danjo, afirma que su empresa apuesta por la durabilidad porque es lo m¨¢s inteligente que se puede hacer para fidelizar al cliente: ¡°Un producto bien duradero puede crear afinidad en el consumidor¡±. En la imagen una de las empleadas de la empresa Casio en Jap¨®n ense?a una serie de calculadoras para mostrar c¨®mo ha cambiado este producto tan cotidiano a lo largo de los a?os. Yoshikazu Tsuno (AFP)