C¨®mo Sean Penn convirti¨® unas zapas de cuadros en icono de rebeld¨ªa adolescente

Para muchos, los cuadros blanquinegros est¨¢n ¨ªntimamente relacionados con la segunda ola del ska, aquella protagonizada por combos multirraciales que mezclaban elementos del punk blanco y del ska cl¨¢sico que lleg¨® a Reino Unido gracias los emigrantes jamaicanos. El ska sab¨ªa de corbatas, sombreros y zapatos, pero nada de zapatillas. La marca californiana Vans poco ten¨ªa que ver con aquella corriente que surg¨ªa a miles de kil¨®metros.

En los setenta, Vans propuso a sus clientes un concurso de dise?o en el que el ganador, adem¨¢s de sus zapatillas, podr¨ªa disfrutar de un d¨ªa en un parque de atracciones Disneyland situado apenas a diez minutos de la tienda. S¨ª, hay dise?adores que cobran menos por sus trabajos... Una de aquellas zapatillas ganadoras colocaba un patr¨®n de cuadros negros y blancos en la suela y alguien decidi¨® plasmar el estampado en algunos modelos del momento, que empezaban a utilizarse para skate y BMX. La que pasar¨ªa a la historia por los cuadros es la Vans #98, una zapatilla b¨¢sica sin cordones que luego ser¨ªa rebautizada como Slip On.

A principios de los ochenta, Universal produjo una comedia juvenil que acab¨® convirti¨¦ndose en una obra seminal e inspiradora para una nueva generaci¨®n, Aquel Excitante Curso (Fast Times at Ridgemont High), que cumple 35 a?os. All¨ª estaban Sean Penn en el papel de surfero descerebrado, Eric Stoltz (que durante cinco semanas de rodaje fue el protagonista de Regreso al futuro), Forest Whitaker (en su segunda pel¨ªcula, 24 a?os antes de su Oscar), Jennifer Jason Leigh (en su primer desnudo) o Nicolas Cage (con su apellido real que luego trat¨® de esconder, Coppola). Hay peque?as intervenciones de la hermana de Bruce Springteen (por entonces novia de Sean Penn) y Lana Clarkson, que apareci¨® en Scarface y Barbarian Queen antes de ser asesinada por Phil Spector. Un reparto completo.

Incluso David Lynch recibi¨® una propuesta para dirigirla, pero la rechaz¨® casi al mismo tiempo que El Retorno del Jedi. La direcci¨®n corri¨® a cargo de Amy Heckerling -que a?os m¨¢s tarde se encargar¨ªa de otra comedia juvenil, Clueless-, aunque la clave estaba en el guionista, Cameron Crowe. Hab¨ªa trabajado en Rolling Stone desde los 15 a?os -una historia que reflej¨® a?os despu¨¦s en Casi Famosos, dirigida por ¨¦l mismo-, y sus buenas relaciones con la industria discogr¨¢fica facilitaron que en Aquel Excitante Curso sonaran Jackson Browne, Led Zeppelin, The Go-Go?s, Stevie Nick y Oingo Boingo (el grupo de Danny Elfman, autor de la sinton¨ªa de Los Simpsons o las bandas sonoras de Tim Burton). No era casual que en las adolescentes habitaciones de los protagonistas hubiera posters de Buzzcocks y Devo.

La pel¨ªcula se estren¨® en 1982, el mismo a?o que E.T., la pel¨ªcula que perfeccion¨® el arte del product placement. Hasta entonces, cuando ve¨ªas una marca en una pel¨ªcula no pensabas cu¨¢nto dinero costaba esa aparici¨®n casual. Sean Penn ya conoc¨ªa la tienda Vans de Santa Monica por su relaci¨®n con la escena surfera de la localidad y desde all¨ª le mandaron algunos pares con la esperanza de que pudiera llevarlos en alguna pel¨ªcula. La dise?adora de vestuario Marilyn Vance (El Club de los Cinco, Ferris Bueller/Todo en un d¨ªa y La Chica de Rosa) debi¨® dar su aprobaci¨®n porque aquellas Vans Slip On de cuadros aparecen m¨¢s tiempo en pantalla que algunos de los actores protagonistas. No se trataba de una pel¨ªcula patrocinada y de hecho aparecen distintas marcas, pero Jeff Spicoli, el surfero con una actitud incompatible con la abstinencia, siempre llevaba aquellas Vans de cuadros que acabaron convirti¨¦ndose en la portada de la banda sonora.

De ah¨ª al paso siguiente. Steve Van Doren, hijo del fundador, pidi¨® a la marca mil pares de Slip On a cuadros para repartirlas en las emisoras, junto a la banda sonora de la pel¨ªcula. Cada vez que sonaba algunas de sus canciones, el locutor nombraba a Vans. Se convirti¨® en el s¨ªmbolo del adolescente problem¨¢tico, la imagen ideal para vender zapatillas. Melenas rubias, camisas de flores y Vans Slip On, establecidas como cl¨¢sicos del adolescente gamberro.