8 fotos?Ups! ?Le ha dado a enviar? Mejor no haga esto en los correos de trabajo7 claves para no meter la pata antes de darle al bot¨®n rojoPatricia Peyr¨® Jim¨¦nez25 oct 2017 - 10:02CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceFundamental tener dos emails: uno personal y otro de empresa. De este modo podremos ¡°utilizar el ¨²ltimo exclusivamente para temas laborales y dejar el personal para todo lo dem¨¢s¡±. As¨ª lo aconseja Miguel Ruiz Arriazu, Maganer Director de Talent.Up a sus alumnos de MBA. En realidad, ¡°tampoco hay que aplicar grandes cosas en su utilizaci¨®n, sino usar el sentido com¨²n, sabiendo que se llevar¨¢ a cabo la interpretaci¨®n de todo lo que se escribe y que, por tanto, hay que gestionar las expectativas del que recibe nuestro mensaje¡±.En mensajes laborales, definitivamente no es una buena idea. Un reciente estudio publicado en Social Psychological and Personality Science conclu¨ªa que, lejos de aportar y de fomentar la empat¨ªa como sucede en la comunicaci¨®n cara a cara, los emoticonos hacen parecer menos competentes a aquellos que los incluyen en sus textos de trabajo. Existen otros motivos para evitar el uso emojis, hashtags y dem¨¢s simbolog¨ªa propia de las redes sociales: ¡°Nuestros emails pueden ir directamente a la bandeja de spam¡±, previene Jim¨¦nez Rubio. Otra raz¨®n m¨¢s para no convertir al simp¨¢tico smiley en una pesadilla. Ni tampoco busque trabajo ni pida favores. Partiendo del sentido com¨²n, ¡°ser¨ªa un error por falta de discreci¨®n¡±, apunta Miguel Ruiz, e insiste en que ¡°si es un tema personal, deber¨ªa usarse siempre el correo personal¡±. Y mucho cuidado con ligar: podr¨ªa dar lugar a malos entendidos o usarse para denunciar a alguien por acoso sexual.Lo primero ser¨ªa ¡°no atentar contra lo que se conoce como compliance de empresa¡±, advierte Ruiz, refiri¨¦ndose al cumplimiento de los distintos procedimientos y legislaciones especificados por la propia compa?¨ªa. Esto incluye, de partida, evitar temas de corte pol¨ªtico, religioso o que puedan resultar ofensivos en lo personal a alguien. Los jefes tambi¨¦n deber¨ªan cubrirse las espaldas y tener cuidado con lo que ordenan v¨ªa email. Por ello, jam¨¢s deber¨ªa realizar encargos de car¨¢cter personal o reflejar temas confidenciales. ¡°El protocolo para comunicar acciones comprometidas o estrategias debe seguir un canal de comunicaci¨®n formal¡±, nos recuerdan desde Page Group. ¡°Se debe convocar una reuni¨®n con las personas involucradas bajo una orden del d¨ªa para que todas las partes puedan ir preparadas y de este modo sacar el m¨¢ximo provecho a la reuni¨®n. Despu¨¦s se realiza un acta de la reuni¨®n que ser¨¢ enviada a todas las personas involucradas¡±. Ni compra de entradas ni de zapatos: nada justifica las compras desde el mail de la empresa, ni siquiera para una final de f¨²tbol. Por otro lado, estas acciones ¡°favorecen la aparici¨®n de publicidad que nos desconcentra en el trabajo¡±, advierten desde PageGroup. Recurrir a la falsa camarader¨ªa es un error m¨¢s com¨²n de lo que creemos. As¨ª que nada de tutear. Saltarse a la torera la formalidad del ¡°usted¡± y pasar al ¡°t¨²¡± de buenas a primeras podr¨ªa no ser una buena idea, incluso y a pesar de que sea la tendencia de las empresas m¨¢s modernas. M¨¢s vale ¡°pecar de formal que de informal¡±, advierte Garc¨ªa. No obstante, el ¨¦xito est¨¢ en adaptarse al interlocutor y por ello, ¡°lo mejor es conocer un poco a la persona que tienes al otro lado antes de aventurarte con una comunicaci¨®n m¨¢s cercana¡±. La comunicaci¨®n no verbal brilla por su ausencia en los mails. Sin embargo, escribir en may¨²sculas s¨ª proporciona una lectura no verbal clara: la de la agresividad o la exigencia. Equivale a gritar. Ante la duda de lo que pensar¨¢n al leer nuestro mail, ¡°la mejor manera de evitar la ambig¨¹edad es pedirle a un compa?ero que lea el mensaje y pueda explicarnos su interpretaci¨®n¡±, aconseja Garc¨ªa. ¡°Como suele decirse en estos casos, cuatro ojos ven m¨¢s que dos¡±.