Independencia, ?de qu¨¦?
Espa?a no les roba a los catalanes ni el dinero ni la cultura ni su derecho de expresarse
Desde el otro lado del mundo, desde India, a 8.000 kil¨®metros de distancia, sigo con incredulidad y estupefacci¨®n los acontecimientos en Catalu?a. Hablo con muchos amigos espa?oles de distintas regiones, diferentes ¨¢mbitos y varias profesiones. Trato de estar al d¨ªa pese a la rapidez con la que ha descarrilado el asunto catal¨¢n. Y hay algo que sigo sin entender: independencia, ?de qu¨¦?
Vivo en Nueva Delhi, la capital de la mayor democracia del mundo, con una poblaci¨®n de 1.200 millones de personas. Es el lugar de nacimiento de cuatro religiones, con 29 Estados y siete territorios administrados por el Gobierno central. Se hablan 22 idiomas, hay trece escrituras diferentes y m¨¢s de trescientos dialectos. Cada Estado tiene su propia cultura, gastronom¨ªa, tradiciones, costumbres¡ Estamos gobernados por la Constituci¨®n de 1950 y as¨ª hemos vivido, en convivencia m¨¢s o menos. Desde este entorno, no es nada f¨¢cil concebir las ra¨ªces del separatismo en Catalu?a.
En cuestiones econ¨®micas y de reparto de fondos entre regiones de un pa¨ªs es normal que las m¨¢s pr¨®speras contribuyan m¨¢s al fondo estatal y que reciban menos. Es el reto de un Gobierno central que tiene la responsabilidad de toda una naci¨®n y no de una sola parte.
En tiempos de globalizaci¨®n parece incre¨ªble que Catalu?a no cuide m¨¢s el castellano
Aparte de las cuestiones econ¨®micas, est¨¢n la lengua y la cultura. Me acuerdo de cuando vino un amigo espa?ol a visitarme en la India. Viajamos al sur y ¨¦ramos ah¨ª igual de extranjeros. All¨ª no se hablaba hindi, el idioma del Gobierno central y de gran parte del norte del pa¨ªs. Yo desconoc¨ªa los platos que nos serv¨ªan, el estilo de vida, la arquitectura tan distinta a la de mi ciudad¡ Fue un viaje de descubrimiento para m¨ª tanto como para mi amigo. Y fue estupendo.
En India viven, entre otros, los bengal¨ªes del este del subcontinente. Se muestran a veces demasiado orgullosos de su tesoro cultural. Tienen raz¨®n. Cuentan con el famoso director Satyajit Ray y el gran poeta y escritor Rabindranath Tagore, autor tambi¨¦n del himno nacional indio. El paso de los a?os no ha disminuido en absoluto la manera en que los bengal¨ªes salvaguardan sus tradiciones o su cultura y las transmiten a sus hijos, incluso a los que viven en otras partes del pa¨ªs. Igual pasa en Rajast¨¢n o Punjab o Gujarat. Pienso en esto y me pregunto: ?qu¨¦ amenaza siente Catalu?a hacia su cultura? ?Qui¨¦n impide promover esa cultura a trav¨¦s del teatro, la literatura, la m¨²sica? ?Qui¨¦n se niega a ense?ar a sus hijos el arte de Dal¨ª y Mir¨® o llevarles a visitar la Sagrada Familia y las Casas de Gaud¨ª?
Pienso lo mismo cuando oigo hablar sobre la necesidad de proteger el idioma ante el castellano. Yo, como muchos ni?os indios de cierto sector econ¨®mico, estudiaba en una escuela p¨²blica donde la ense?anza era en ingl¨¦s. Mi lengua materna, el hindi, la estudiaba como una asignatura aparte. La mayor¨ªa de mis compa?eros no hablaban bien el hindi, bien porque no era su lengua materna bien porque en casa no la usaban mucho. Mi abuela insist¨ªa en que habl¨¢ramos un poco en nuestro idioma porque mi abuelo era un poeta famoso y a ella le parec¨ªa fatal que acab¨¢ramos siendo tan ¡°angl¨®fonos¡±.
La fuerza de India reside en nuestra unidad y nuestra diversidad
La lengua y la cultura no son est¨¢ticas. Son din¨¢micas. Se pueden enriquecer m¨¢s, y esto queda en manos de los que ya creen en su valor y tienen la voluntad de conservar y ampliar su conocimiento. En el caso del catal¨¢n, es un idioma hablado sobre todo en Catalu?a. No se habla catal¨¢n en el resto de Espa?a, ni en Latinoam¨¦rica, ni en las antiguas colonias de Espa?a, ni tampoco en la ONU. El castellano es el segundo idioma m¨¢s hablado en el mundo. En pa¨ªses como India, el castellano est¨¢ entre los idiomas extranjeros m¨¢s elegidos por los estudiantes por el gran panorama de oportunidades que les ofrece. En tiempos de globalizaci¨®n parece incre¨ªble que Catalu?a, que pretende ser ¡°la cara m¨¢s europea¡± de Espa?a, no cuide el idioma que m¨¢s oportunidades lucrativas presenta y que m¨¢s futuro tiene.
La diversidad que hay en Catalu?a palidece si se compara con la que hay en un pa¨ªs como India. Es dif¨ªcil conversar con alguien que te encuentres en la calle porque su entorno, su religi¨®n, su casta, sus creencias, sus necesidades, su conocimiento y su visi¨®n del futuro pueden ser tan diferentes que no sabes por d¨®nde empezar.
Despu¨¦s del triste ejemplo del Brexit, despu¨¦s de haber perdido tantas empresas, despu¨¦s de las firmes negativas de los pa¨ªses europeos de reconocer a Catalu?a como Estado independiente, despu¨¦s de todos los art¨ªculos, discursos, debates, exigencias, peticiones de expertos de distintos campos que van advirtiendo de la enormidad de las consecuencias de la DUI, no s¨¦ c¨®mo los separatistas insisten en seguir por ese camino. La comunidad internacional no les ofrece ning¨²n respaldo. ?Ser¨¢ porque no hay simpat¨ªa por su causa?
Los catalanes no est¨¢n oprimidos. Espa?a no les roba ni el dinero ni la cultura ni su derecho de expresarse. A India le han robado mucho los varios conquistadores que ha tenido y el imperio brit¨¢nico, sobre todo cuando el pa¨ªs estaba m¨¢s fragmentado pol¨ªtica y socialmente. Hoy sabemos bien que nuestra fuerza reside en nuestra unidad y diversidad. Espa?a se enriquece con todo lo que le aporta Catalu?a y Catalu?a gana mucho al estar integrada en el resto del pa¨ªs. Por eso, me vuelvo a preguntar: independencia, ?de qu¨¦?
Devyani Rao es una periodista india que vivi¨® y trabaj¨® en Espa?a.
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